La izquierda insulta en la Asamblea de Madrid a la profesora que no quiere el hiyab en las aulas

Pese a las trabas interpuestas por la Mesa de la Asamblea de Madrid, en la que el Partido Popular tiene mayoría, Elena del Pilar Ramallo, la profesora que impulsa una modificación legal en toda España para prohibir el hiyab en las clases y el burka en los espacios públicos, pudo dar por fin este viernes una ponencia en la Cámara regional, a propuesta de Vox. Sin embargo, esta doctora en Derecho, investigadora y, desde hace años, experta en violencia contra las mujeres y contra los menores, recibió desprecios de PSOE y Más Madrid, que pusieron en evidencia su currículum y la tildaron de «racista, homófoba y machista».

Ramallo intervino en la Comisión de la Mujer criticando que «las ideologías se ponen por encima de los derechos humanos» al abordar determinados temas. Y el devenir de la ponencia le terminó dando la razón. La profesora hizo un alegato en defensa de la «libertad, igualdad y dignidad», recordando que en Afganistán o Irán «las mujeres son obligadas a ir tapadas, veladas y carecen de derechos», y que hay lugares de Europa en los que, bajo el mantra de la «diversidad cultural», eso se está imponiendo. «No quiero eso en mi país, que es una democracia», abundó.

La profesora recordó que países como Francia o Bélgica ya han legislado «para que las niñas puedan ir libres y no veladas a los colegios», y denunció que el burka es una «indignidad» que debería ser prohibida por «seguridad nacional». «Tengan valor y coraje, dejen a un lado discursos partidistas y piensen en las mujeres: si la sharía se impone, mujeres como yo ya no podremos hablar y sus niñas irán veladas. Ellos imponen sus tradiciones, que vulneran la libertad», exhortó Ramallo a las diputadas.

La intervención de la ponente terminó con una apelación a que se debata su propuesta de prohibir el hiyab en las aulas y el burka en los espacios públicos, por cuanto «la libertad religiosa puede ser recortada o reducida si vulnera derechos fundamentales». «Las personas que vienen se tienen que adaptar y cumplir las leyes», zanjó Ramallo.

La portavoz de Vox, Isabel Pérez Moñino, recogió la intervención señalando que «el islamismo radical es contrario a los derechos y libertades fundamentales», y que la permisividad con este deriva en «la proliferación de sociedades paralelas donde ya no rigen nuestras normas» y en un auge de las agresiones sexuales, como, a su juicio, sucede ya en Cataluña. Por otro lado, crítico a quienes «autoproclamándose defensores de las mujeres permiten la llegada masiva de culturas totalmente incompatibles con los derechos de las mujeres».

Ataques de la izquierda

Tras esto, las portavoces de las formaciones de izquierdas, PSOE y Más Madrid, cargaron contra Vox y la invitada. La socialista Silvia Monterrubio comenzó su intervención asegurando que «yo no la hubiera invitado» porque «en sus redes tiene comentarios racistas, homófobos y machistas», a su juicio, de «ultraderecha». «Vox la ha traído para que haga un discurso de odio. Nadie viene aquí a imponer nada: cada uno tiene sus tradiciones. La diversidad cultural nos enriquece», zanjó Monterrubio.

La representante de Más Madrid, Jimena González, sostuvo que las culturas no son estables e incorruptibles, sino que avanzan. También citó pasajes del Génesis para criticar nuestra cultura cristiana por «machista»: «Gracias al movimiento feminista nos hemos sobrepuesto a estas barbaridades, a estas creencias discriminatorias, consagradas en un libro sagrado y transmitidas durante generaciones y siglos en nuestra cultura». «Denunciamos las violaciones en cualquier lugar del mundo», aseveró González, en referencia seguida a que «las mujeres en Gaza están siendo masacradas por el Estado genocida de Israel».

Su compañera Marta Carmona prosiguió señalando que «el fundamentalismo religioso es malo en cualquier religión», y afeó a Elena Ramallo que «se le han olvidado ocho siglos bastante importantes en nuestra historia», en referencia a Al-Ándalus. También le acusó de racismo: «Las judías ortodoxas llevan tichel. Para usted es una cuestión de color de piel: una persona que tenga el color de piel oscura no puede elegir libremente». Por último, hizo una desubicada alusión al franquismo, cuando «las mujeres no podían abrirse una cuenta bancaria a su nombre».

Ramallo, «sorprendida»

La representante del Partido Popular criticó a la ponente porque «ha insultado al PP» y «ha hecho política en vez de hablar del tema que nos preocupa». Esther Platero cargó contra Vox y la izquierda: «El debate sobre el hiyab no puede ser secuestrado por dos extremos: la izquierda cómplice del islamismo y Vox, que azuza el miedo y la exclusión». Aunque no especificó su postura, sí ha señalado que «el islamismo se lleva muy mal con la democracia y los derechos humanos».

Tras la comparecencia, Ramallo dijo estar «sorprendida» por el comportamiento de las diputadas. «Es la primera vez en mi vida, tras muchas comparecencias, que soy interrumpida con gestos y malas formas, y que se cuestiona mi currículum. Más Madrid ha hablado del cristianismo y de Franco; el PSOE me ha llamado racista; y sobre el PP… me gustaría saber su posición», lamentó, a la par que apremió a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a que «legisle sobre este tema y prohíba que las niñas tengan que ir veladas a la escuela».