Ábalos se expone a una multa de hasta 10.000 euros por tratar de hombre a una mujer trans
El diputado apoyó la ‘ley trans’ que fija sanciones por comentarios considerados «vejatorios» como los que él ha hecho

La mujer colombiana Valeri Cuéllar.
El diputado José Luís Ábalos podría haber incurrido en un delito de odio por la forma en la que se ha dirigido a la mujer trans colombiana Valeri Cuéllar, que ha afirmado en una entrevista en Lecturas haber mantenido múltiples encuentros sexuales con el ex ministro de Transportes. Ábalos ha negado las afirmaciones de Cuéllar y, en un extenso comentario en X, la ha tratado de hombre («un tal Valerie») y ha usado expresiones como «ese ser» o «personaje siniestro». En virtud de la ley trans, este tipo de actitudes son susceptibles de sanciones de 200 a 2.000 euros para los casos leves, o de hasta 10.000 euros en las infracciones graves.
Así lo confirma la abogada penalista Paula Fraga en conversación con THE OBJECTIVE: «Si esta persona se autopercibe mujer, no tiene ni que tener el cambio de sexo registral hecho para que la expresión sea considerada vejatoria. Los comentarios que ha vertido pueden llevar aparejados sanciones de hasta 10.000 euros». La feminista señala además que «este tipo de procedimientos pueden ser a instancia de parte o partir de la propia Administración», y resalta la paradoja de que el exministro de Transportes «puede ser sancionado con la misma ley que él ha aprobado».
Cuéllar, conocida por su relación con el jinete y personaje televisivo Álvaro Muñoz Escassi, ha asegurado ser la «colombiana» a la que Ábalos hace referencia en el ya viral audio del exministro y Koldo García hablando sobre las mujeres a las que contrarían. El exministro socialista, sin embargo, ha calificado de «demencial» y de «mentira» la publicación de esta información.
En su mensaje, se dirige a la mujer colombiana como si fuera un hombre: «No conozco de nada al tal Valeri Cuéllar (…). Lo que es indudable es que se trata de un personaje siniestro que se apunta al circo mediático para adquirir notoriedad, pero la culpa de permitirlo es del medio que le da cobertura a esta mentira, a este engaño y a esta argucia. Lo que me faltaba es que me endosaran también una historia con este ser».
Expresiones «vejatorias»
Tal y como informó THE OBJECTIVE, la ley trans establece que se puedan imponer multas de 150.000 euros si se niega el acceso a vestuarios a personas transgénero. Entre las infracciones leves, sancionadas con multas de 200 a 2.000 euros, se incluye «utilizar o emitir expresiones vejatorias» contra las personas trans (que puede abarcar el no referirse a alguien con arreglo a su identidad sentida) o «no facilitar la labor o negarse parcialmente a colaborar con la acción investigadora de los servicios de inspección en el cumplimiento de los mandatos de esta ley». También causar «daños o deslucimiento» a bienes pertenecientes a personas LGTBI por razón de su identidad, así como a centros, monumentos o placas conmemorativas del colectivo.
Como infracción grave se califica «la no retirada de las expresiones vejatorias contenidas en sitios web o redes sociales por parte de la persona prestadora de un servicio de la sociedad de la información, una vez tenga conocimiento efectivo del uso de estas expresiones».
La abogada Paula Fraga explica en conversación con este periódico que el hecho de que «le esté cuestionando la identidad de género» le puede acarrear una «sanción administrativa». De hecho, Valeri Cuéllar ya ha reaccionado a las palabras de Ábalos y ha afirmado que estudia denunciarle por un delito de odio.
Ábalos apoyó la ‘ley trans’
La aprobación definitiva de la Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTB, la llamada ley trans, fue aprobada el 16 de febrero de 2023 en el Congreso con 191 votos a favor. Entre ellos, los del grupo socialista. En ese momento Ábalos todavía no se había ido al grupo mixto y mantuvo la disciplina de voto.
En contra, votaron Vox, Bildu, UPN y Pablo Cambronero (Cs), con 60 votos. Hubo también 61 abstenciones, del Partido Popular, PRC, Foro y la socialista Carmen Calvo que, como representante del feminismo autodenominado clásico, se posicionó en contra de dicha ley.