Acusan a Robles de incumplir la ley de memoria por la tumba de Milans del Bosch en el Alcázar
Una asociación registra una protesta ante Defensa por indicios de prevaricación administrativa de la ministra

Cripta del Alcázar de Toledo en la que está enterrado el teniente general Milans del Bosch. | Foto: Museo del Ejército
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha registrado una protesta formal dirigida a la ministra de Defensa, Margarita Robles, en la que se queja de que la responsable del ministerio ha hecho «caso omiso» de la Ley de Memoria Democrática «que le obliga a tomar una serie de medidas que está incumpliendo desde hace treinta y cuatro meses», sobre todo en el caso del teniente general golpista Jaime Milans del Bosch, enterrado en la cripta de los defensores del Alcázar de Toledo.
La ARMH inició la exhumación científica de desaparecidos por la represión franquista en el año 2000 y ahora acusa a Robles de prevaricación administrativa tres años después de la aprobación de la ley de memoria. «En el texto legislativo se explicita que los militares golpistas no pueden recibir honor alguno, ni tratamientos especiales, por parte de las administraciones públicas. Pero a pesar del dictado de la ley, el Ministerio de Defensa la incumple de manera permanente y reiterada en casos como el de Jaime Milans del Bosch, golpista en 1936 y en 1981, que continúa enterrado en el Alcázar de Toledo con honores y recursos de un Estado Democrático», subraya esta asociación presidida por Emilio Silva, presidente de la ARMH.
A juicio de este último, es «muy grave» que el mismo Gobierno que «ha redactado una ley y ha promovido su aprobación parlamentaria, la incumple demostrando su falta de voluntad política». En este sentido, la asociación hace hincapié en que si el Ejecutivo de Pedro Sánchez «no cumple la ley de memoria democrática no puede confrontar con las comunidades autónomas que también la incumplen».
La ARMH ha exigido al Ministerio de Defensa que «deje de prevaricar con el incumplimiento» de la normativa y «lleve a cabo sus obligaciones que tiene con respeto a la aplicación de los valores democráticos y al respeto que merecen las víctimas de la dictadura franquista».
Asimismo, la asociación ha reclamado por derecho de acceso a la información pública documentación de las gestiones que el Ministerio de Defensa ha llevado a cabo para cumplir con la Ley de Memoria Democrática. Y en especial, «aquellas dirigidas a que el cuerpo del dos veces golpista Jaime Milán del Bosch salga del Alcázar de Toledo, así como con el resto de militares franquistas que se encuentran enterrados con honores que no merecen por parte de un Gobierno democrático».
«Es incomprensible que continúen desaparecidos miles de hombres y mujeres que defendieron la democracia tratando de frenar un golpe de Estado en 1936 y que los golpistas y constructores de una sangrienta y terrible dictadura sigan enterrados con honores y recursos públicos. Por mucho que se conmemoren cincuenta años de España en libertad, hay miles de familias que no han tenido la libertad de enterrar donde decidan a sus seres queridos y siguen sin verdad, sin justicia y sin reparación», concluye Silva en un comunicado.
La sala de la Guerra Civil, aún cerrada
Precisamente, en el mismo Alcázar de Toledo, parte de la exposición permanente del Museo del Ejército dedicada a la Guerra Civil continúa cerrada al público tres años después del incendio que afectó al edificio. A pesar de que la mayoría de las salas fueron reabiertas el pasado 24 de marzo, este apartado permanece clausurado y sin fecha prevista de reapertura. Aquel incendio, provocado por un fallo en dos cuadros eléctricos del séptimo piso del histórico edificio –sede del museo– obligó a cerrar varias zonas del recorrido expositivo en junio de 2022.
La reapertura fue presidida por el general de Ejército y jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), Amador Enseñat y Berea, en un acto institucional celebrado el pasado mes de marzo. Sin embargo, la sección dedicada a la Guerra Civil –incluida en la sala de ‘El siglo XX’– junto a la de ‘La Restauración Monárquica 1874-1923’ no han sido recuperadas aún.
Según una respuesta oficial del Ministerio de Defensa, a través del Ejército de Tierra y remitida al Portal de Transparencia –a la que accedió THE OBJECTIVE–, “por el momento, no es posible dar una fecha exacta” para su reapertura. En el mismo escrito, explican que “las vitrinas se vieron afectadas por el hollín y hubo que proceder a su retirada”, motivo por el cual el área permanece en proceso de restauración. El departamento asegura que esta parte de la exposición volverá a abrir “en cuanto los trabajos de rediseño de las salas afectadas por el incendio estén finalizados”.
El Museo del Ejército ocupa actualmente cuatro plantas del Alcázar de Toledo y alberga más de 4.000 piezas en su exposición permanente, consolidándose como un referente en la conservación y difusión del patrimonio militar español. Su origen se remonta a la fusión de varios museos militares creados entre los siglos XIX y XX, siendo el de Artillería e Ingenieros su núcleo fundacional.
Aunque ya en 1929 se planteó la creación de un museo único que reuniera todas estas colecciones, no fue hasta la Segunda República, en 1932, cuando se fundó oficialmente el Museo Histórico Militar, con secciones dedicadas a las distintas armas y cuerpos del Ejército. Tras la Guerra Civil, la institución adoptó una nueva estructura que se consolidó en su antigua sede del Palacio del Buen Retiro, hasta su traslado definitivo a Toledo.