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Política

Vox abrirá una oficina en Barcelona para atender a los atacados por usar castellano

La formación conservadora pretende asesorar a particulares y comercios que sean amenazados por los separatistas

Vox abrirá una oficina en Barcelona para atender a los atacados por usar castellano

El portavoz de Vox Barcelona, Gonzalo de Oro Pulido, en rueda de prensa. | Vox

Ante los lamentables hechos ocurridos en los últimos días en Barcelona, donde una heladería argentina, Helados Dellaostia, ha sido objeto de ataques en redes y actos vandálicos por no atender en catalán, Vox ha anunciado un paquete de medidas para «defender la libertad de los ciudadanos frente a la intimidación y la extorsión». La más llamativa de todas ellas es la apertura «en los próximos meses» de una oficina de apoyo y asesoramiento legal para todas aquellas personas que sufran ataques o sean amenazadas por utilizar el español en la Ciudad Condal.

Fuentes de la formación precisan a THE OBJECTIVE que la idea es «crear un órgano que escuche, asesore y dé apoyo a los amenazados» por radicales separatistas, de modo que «ninguno se sienta solo como hasta ahora», ya que «hemos normalizado que en una parte de España no puedas rotular en español y eso tiene que cambiar porque los talibanes de la lengua van a más: ahora ya se sienten impunes y directamente señalan, vandalizan y amenazan». «Queremos que cualquier persona o comercio tenga a quien acudir cuando ocurre algo así», zanjan desde Vox, que irá dando forma al proyecto a lo largo de las próximas semanas para «cubrir al máximo a los perjudicados».

La asociación constitucionalista Impulso Ciudadano registró en 2023 un total de 175 episodios de violencia política en Cataluña, todos atribuidos a grupos separatistas, con actos como acosos, escraches, injurias, daños a bienes, agresiones físicas y discursos hispanófobos. En 2022, reportaron 155 incidentes, de los cuales el 98,7% fueron cometidos por sectores secesionistas. Aunque no hay cifras relativas a 2024 y 2025, los casos de acosos se siguen sucediendo con una frecuencia preocupante.

De hecho, en los últimos meses una especie de comandos ciudadanos independentistas se han dedicado a visitar comercios para informar a sus propietarios de que tanto los rótulos como el servicio a los clientes han de ser en catalán. Son particulares dirigidos por Plataforma per la Llengua, la misma plataforma que, con Quim Torra como presidente, obtuvo un permiso de la Generalitat de Cataluña para infiltrar a sus miembros como espías en los colegios para ver en qué idioma hablaban los niños durante el recreo y establecer luego mecanismos para obligarles a hablar en catalán.

Es también la misma plataforma que, lejos de solidarizarse con los heladeros que han sido atacados esta semana, ha celebrado la «necesaria resiliencia ciudadana» contra «actitudes catalanófobas» de los vándalos, y ofreciéndose a aportar «asesoramiento a las víctimas», en referencia a las personas que no sean atendidas en catalán, a través de su servicio de quejas y consultas.

La heladería vandalizada

La heladería Dellaostia amaneció el martes con una pintada que rezaba «fascistas de mierda», acompañada de pegatinas y carteles que acusaban al establecimiento de tener una postura «anticatalanista» y «discriminatoria» respecto al catalán. En los carteles, ya retirados, se podía leer: «Este local no respeta el catalán» o «el turismo mata la ciudad». Esto, a pesar de que el establecimiento cuenta con un texto de varios párrafos en catalán en uno de sus costados.

El vandalismo contra el establecimiento se produjo después de que Guillem Roma, un consejero de ERC en el distrito de Gràcia, denunciara que un trabajador del establecimiento había «vejado» a su pareja tras hablarle en catalán al pedir un helado durante la Fiesta Mayor de Gracia. Según Roca, el trabajador le dijo a su pareja que era «una maleducada» por hablar en catalán porque «estamos en el Reino de España». «Si va a las reseñas del comercio en Google verá que hay más quejas al respecto», dijo en su cuenta de la red social X. La vandalización sucedió a los dos días.

Vox toma medidas

El portavoz de Vox Barcelona, Gonzalo de Oro, ha señalado que «Barcelona debe ser un ejemplo en el respeto de sus vecinos y sus derechos, independientemente de la lengua que utilicenNo vamos a parar hasta garantizar la libertad plena de uso del español y del catalán, frente a la imposición y la cobardía de quienes callan ante los ataques».

Por otro lado, el portavoz de Vox Cataluña, Joan Garriga, ha lamentado «otro ejemplo más de la persecución y el odio al español en nuestra tierra»: «El separatista Guillem Roma, concejal de ERC, señala a una heladería porque su trabajadora recién llegada no entiende «Gelat de maduixa» (helado de fresa) y entidades subvencionadas ejecutan la acción represiva amenazando y vandalizando la heladería. Frente a su odio, nuestro amor por la libertad y bilingüismo. Lo pagarán y ganaremos».

Además de la apertura de esta oficina, Vox exigirá al Ayuntamiento de Barcelona, liderado por Jaume Collboni, que se persone como acusación popular en los procesos judiciales abiertos contra los responsables de los ataques y en defensa de los comerciantes. También solicitará la creación de una Comisión Extraordinaria para «condenar estos hechos, exigir el respeto a ambas lenguas oficiales y poner fin al trato de ciudadanos de segunda que sufren los hispanohablantes en la ciudad».




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