Abascal solo pactará con el PP si cambia las políticas progresistas «como un calcetín»
El líder de Vox asegura que su partido se presentará a los próximos comicios «para ganarlos»

Santiago Abascal en la entrevista en Servimedia. | Jorge Villa
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha señalado que su formación solo pactará con el Partido Popular tras las siguientes elecciones autonómicas y generales para «cambiar las políticas migratorias, las políticas verdes, las políticas fiscales, las políticas de género y para darle a todo la vuelta como un calcetín».
Así lo indicó Abascal en una entrevista en Servimedia, donde apuntó que las elecciones no están convocadas y «en principio» faltan dos años para ello, pero aseguró que está «muy de acuerdo» con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en que él también quiere «gobernar en solitario» y dejó claro que Vox se presentará a estos comicios «para ganarlos».
«Evidentemente», prosiguió, su partido «aceptará el veredicto de las urnas». Ante las declaraciones de Feijóo y otros dirigentes populares que dicen que van a gobernar en solitario y que con 150 escaños es suficiente, Abascal criticó que «de repente han inventado una nueva mayoría absoluta que no está en los 176, sino en los 150».
«Que se lo expliquen a los españoles», dijo Abascal, augurando que lo que pasará es que el PP «volverá a hacer lo mismo que en Bruselas: pactar con el PSOE». También consideró que los populares «van a recibir instrucciones de Bruselas y las van a acatar, como hicieron con el reparto de menores inmigrantes ilegales».
Si la gente «confía» en Vox en las próximas elecciones, en función de los pactos que tenga que hacer con otros partidos, podrá «hacer más o menos cosas». Lo que sí garantizó Abascal es que «nosotros no vamos a mentir sobre nuestras intenciones ni sobre nuestros pactos, ni vamos a contribuir a la mafia de Sánchez, ni a la estafa del PP».
Andalucía y Castilla y León
En relación con si Vox pedirá entrar en los gobiernos de Andalucía y Castilla y León en función de los resultados electorales, Abascal dejó claro que «a nosotros no nos van a volver a engañar» y que si Vox apuesta por llegar a un acuerdo será para «hacer políticas muy concretas». «¿Qué va a hacer el PP en las autonomías?», quiso saber.
En este sentido, aseguró que es «un misterio» porque ha visto al PP hacer «una cosa y la contraria». Se ha visto «que una señora en Madrid decía todo lo contrario de una señora en Extremadura», o que «unos se niegan a hacer pruebas de edad a los supuestos menores ilegales y otros aceptan hacerlas en Aragón».
Por ello, tildó al PP de «caja de sorpresas» e instó a preguntar a este partido qué es lo que hará. Lo que sí dijo es que si Vox forma parte de los gobiernos regionales va a ser para «cambiar las políticas migratorias, las políticas verdes, las políticas fiscales, las políticas de género y para darle a todo la vuelta como un calcetín».
Es decir, aclaró Abascal, que su partido defiende sus principios y si el PP, Juanma Moreno Bonilla, que «parece un socialista», o Alfonso Fernández Mañueco, que «estaba muy contento de que Vox ya no estuviera en los gobiernos», quieren un pacto con su formación «tendrán que cambiar sus posiciones». «A día de hoy, lo que parece es que quieren un pacto con el PSOE», añadió.
De hecho, destacó que si los populares no quieren «hacer eso», «que sigan haciendo lo mismo que han hecho hasta ahora con el PSOE, no con nosotros». Precisamente, afeó que Moreno diga que «añora al PSOE de siempre, que España necesita al PSOE», cuando lo que este país necesita es «liberarse después de un siglo PSOE, que ha hecho un daño extraordinario a los españoles».
Discurso del PP sobre inmigración
Tras el endurecimiento del discurso del PP en inmigración, Abascal aseguró que no se cree «nada» porque este partido es «responsable de esas políticas migratorias» y, además, «actúa al calor de las encuestas». «Debe andar mirando los ‘trackings’ de las encuestas y va modificando su posición», dijo.
A Feijóo, criticó, «le hemos escuchado decir una cosa y la contraria sobre inmigración en muy poco tiempo» y recordó que esto que está haciendo «ya lo hizo Casado, que según llegó prácticamente empezó a decir las mismas cosas que Vox y terminó en una moción de censura haciendo una intervención contra Vox más dura que la que había hecho contra el PSOE».
Por tanto, aseguró que no puede «confiar» en el PP, sobre todo porque los populares «todavía no han entonado el ‘mea culpa’ de asumir» que esas políticas migratorias, que «facilitan la llegada de una invasión migratoria», y las políticas que impiden «devolver con facilidad a los que entran ilegalmente», las «han creado ellos en el Congreso y en Bruselas».
En resumen, «los que nos han traído hasta aquí no pueden formar parte de la solución, salvo que cambien radicalmente y asuman sus culpas y responsabilidad». Incidió en que no se puede creer «las posiciones del PP», pero sí sus «hechos», y «los hechos son que nos hicieron salir de los gobiernos para asumir los compromisos en política migratoria con el PSOE y con Bruselas».
Auge de Vox
Sobre el crecimiento de Vox en las encuestas, con un 15% de intención de voto, según alguna de ellas, Abascal subrayó que «lo sorprendente es que no crezcamos más, pero todo llegará». Le sorprendió que su partido «ha sido demonizado durante 10 años, lo es con más intensidad cada día y, sin embargo, crece».
«Crecerá más el día que nuestras posiciones no sean directamente manipuladas o demonizadas», auguró Abascal, quien garantizó que él diría lo mismo, aunque su partido no creciera en las encuestas porque cree en lo que dice. En este punto, recordó que hace un año Vox abandonó los gobiernos en los que cogobernaba con el PP.
Lo hizo, continuó, para «no ser cómplice de la política migratoria» y «en todos los lugares decían que era el fin de Vox, un suicidio, un tiro en el pie, que ni siquiera había conseguido que todos los consejeros abandonaran los gobiernos», pero ha pasado un año y su formación «está en otra posición».
A su juicio, este crecimiento de Vox se debe a que los españoles «reconocen la autenticidad de un partido que está dispuesto a dejar el poder un año después de llegar a él para defender los principios y los compromisos electorales». «Eso no tiene precedentes. Eso, en contra de lo que decían los agoreros, es algo que se premia», ensalzó.
Jóvenes y referéndums
Además, explicó que «el 50% de los jóvenes de 18 a 20 apuesta por Vox, según las encuestas». Esto es algo «muy significativo» para Abascal, quien no sabe pronosticar cuál es el «techo» de su partido, lo que sí conoce son sus «límites y los límites de Vox». «Nosotros no vamos a traicionar ni lo que decimos ni a los españoles», sentenció.
Expuso que Vox «quiere crecer», pero quiere «crecer bien», «sin trampas, sin engañar y con una política clara». Los españoles, lamentó, «llevan mucho tiempo sin saber lo que votan, votan listas y luego esos partidos van a Bruselas, hacen de su capa un sayo y aplican unas políticas migratorias, verdes, de género en las que son socios PP y PSOE que la gente no ha votado».
Al respecto, afeó que a los españoles no se les ha consultado en referéndum sobre «ningún asunto importante en los últimos años» y eso que «ha habido muchos asuntos importantes que exigían que se nos preguntara». «No ha habido referéndum consultivo sobre prácticamente nada y eso indica cómo han secuestrado la voluntad de los españoles», concluyó.