El Gobierno crea el 'observatorio público' 363 de España: «Nadie controla el sindiós»
La ministra Mónica Garcia presenta el Observatorio para la Prevención del Tabaquismo, que se suma a una profusa lista

El ministro de Asuntos Exteriores y Unión Europea, José Manuel Albares; la ministra Portavoz, Pilar Alegría y la ministra de Sanidad, Mónica García, durante una rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. | Europa Press
Observatorio contra el Fraude y la Corrupción Sanitaria, Observatorio de Salud de las Mujeres, Observatorio de Igualdad, Observatorio de Infancia, Observatorio de Derechos Digitales, Observatorio Permanente del Mercado de los Servicios Portuarios, Observatorio del Flamenco, Observatorio de Emancipación, Observatorio Canario del Cambio Climático, Observatorio del Agua, Observatorio Ibérico de la Minería… De un tiempo a esta parte, afloran sin control en España los observatorios públicos. El último, anunciado este martes por la ministra de Sanidad, Mónica García: el Observatorio para la Prevención del Tabaquismo. Con este, ya son 363.
El encargado de contarlos ha sido Jaime Gómez-Obregón, un ingeniero español conocido por su activismo en favor de la transparencia política en la contratación del sector público, que creó el Observatorio de los Observatorios Públicos de España cuando cayó en la cuenta de que «nadie parece estar controlando el sindiós de los observatorios públicos», en marzo de 2024. En aquella fecha, García acababa de anunciar la creación del Observatorio contra el Fraude y la Corrupción Sanitaria.
Desde entonces, con tono irónico y con el ánimo de fiscalizar a las administraciones públicas, Gómez-Obregón ha ido actualizando esta lista, que no ha dejado de engrosarse. En ella anidan observatorios de lo más rocambolescos. El favorito del autor es el Observatorio de la Muerte, de la Generalidad de Cataluña, nacido «para conocer las formas de morir en Cataluña», pero no se quedan atrás el Observatorio de la Lusofonía Valentín Paz Andrade, nacido para «reforzar los lazos entre Galicia y el mundo lusófono», o el Observatorio sobre el Brexit de Castilla-La Mancha.
Potencia mundial en Observatorios
Todos estos centenares de observatorios, de dependencia estatal o autonómica, cuentan con trabajadores asociados y con fondos derivados para la observación, el análisis y la generación de propuestas. El pasado mes de febrero, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el Observatorio de Derechos Digitales, aseverando que contaría con más de 360 expertos del ámbito económico, jurídico y tecnológico dedicados a la «lucha contra la desinformación y el fraude online, la promoción de la equidad y la inclusión digital, y la regulación ética de la inteligencia artificial y la neurotecnología».
Como dice con sorna Gómez-Obregón, «¡Somos una potencia mundial en Observatorios!». Hay Observatorios del paisaje -nótese lo pertinente del nombre- en Cataluña, Andalucía y Canarias. El de la Comunidad de Murcia cuenta con la especificidad, además, de serlo del «paisaje mediterráneo». Hay también un Observatorio del Ferrocarril, un Observatorio de Brecha Digital, uno de Convivencia, otro de Residuos, y varias decenas, en varias denominaciones y distintos niveles administrativos, de observatorios sobre Violencia de Género o -rara vez- Violencia Doméstica.
La violencia de género es sin duda el tema recurrente de los Observatorios, junto con el cambio climático, al cual hay destinado uno en Aragón, Valencia, Canarias o Tenerife (amén del estatal). No les anda a la zaga la temática LGTB: hay un Observatorio Vasco LGTBIQ+ y un Observatorio Madrileño contra la LGTBI-fobia, como lo hay en Valencia, La Coruña o Castilla-La Mancha. Como son pocos, la ministra Mónica García ha anunciado la creación del Observatorio para la Prevención del Tabaquismo, con el objetivo de «reforzar la gobernanza y la evaluación en la lucha contra el tabaquismo».
Observatorios ‘fantasma’
La mayoría de estos observatorios, anunciados a bombo y platillo, terminan convirtiéndose en observatorios fantasma. Sirva como ejemplo el Observatorio de Igualdad de Género en el ámbito de la Cultura, que se creó en febrero de 2019 como parte del acuerdo de Gobierno entre PSOE y Podemos, y que, tal y como informó este medio, sólo desarrolló tres proyectos en sus cinco primeros años por un importe total de 600.000 euros. En los últimos dos años no ha registrado actividad.
En otros casos, se convierten en argumentos de autoridad que el Gobierno utiliza para reforzar sus propias tesis, como sucede con el Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (Oberaxe), cuyos informes utiliza el Ejecutivo regularmente para alertar de los «discursos de odio» relacionados con la inmigración en redes sociales.
Hasta el momento, el Observatorio de los Observatorios de España, creado en 2024, es el único que puede presumir -y lo hace- de haber sido «constituido con cero euros de tus impuestos». En caso de recibir financiación, Jaime Gómez-Obregón promete poner en la página web «un texto random generado con ChatGPT lleno de palabras molonas en consuñol como sinergia, cambio de paradigma, enfoque holístico, disruptivo, poner en valor, apuesta firme, hoja de ruta, resiliencia…».