El sindicato de Vox se plantea convocar una huelga general contra el Gobierno de Sánchez
Solidaridad critica a UGT y CCOO por su parón por Palestina, y estudia uno por la pérdida de poder adquisitivo

El secretario general de Solidaridad, Jordi de la Fuente, frente a la sede de CCOO en Barcelona. | Vox
Solidaridad estudia la posibilidad de convocar una huelga general contra el Gobierno de Pedro Sánchez. El sindicato nacido al calor de Vox considera que la convocatoria de CGT, UGT y CCOO para este pasado miércoles por el «fin del genocidio en Gaza» ha sido «ilegal» y una «cortina de humo» para tapar los casos de corrupción que rodean al Ejecutivo socialista. Por eso está midiendo sus fuerzas para un futurible paro general que denuncie el empobrecimiento que ha sufrido la clase trabajadora en estas dos últimas legislaturas. Así lo confirma su secretario general, Jordi de la Fuente, en conversación con THE OBJECTIVE: «Hay motivos económicos y laborales de sobra, pero vamos a ver si encontramos el momento propicio para un paro que tenga un efecto real sobre las condiciones laborales de los trabajadores en España».
¿Cuáles serían esos motivos? Según explica De la Fuente, el punto que resume todo es la «regresión» económica que experimenta nuestro país: «Nos hemos empobrecido a niveles de hace más de 20 años. Nuestro poder adquisitivo real está por detrás del que teníamos en 2006 o 2007, y, sin embargo, nuestros dirigentes nos dicen que España va como un cohete. Tenemos generaciones de españoles que por primera vez viven peor que sus padres y sus abuelos. Eso antes era inconcebible».
No sería la primera vez. Solidaridad ya convocó en 2023 una huelga general contra la ley de amnistía, la única reclamada contra Sánchez desde que es presidente del Gobierno, en 2018. Los sindicatos mayoritarios convocaron en su día cuatro contra Felipe González, una contra Aznar, otra contra Zapatero y dos contra Rajoy. Ahora, convertidos en socios de facto del Ejecutivo, llevan siete años sin movilizarse, aunque han amenazado con una huelga general si no se suben los salarios de los funcionarios.
«Llevamos varios años de un señor anclado en el poder con un coste político, económico, moral y social, pero aquí no se ha movido absolutamente nadie», denuncia el secretario general de solidaridad, criticando a UGT y CCOO: «No se han movido por la precariedad laboral, por el troceo de los contratos, por los fijos discontinuos que son parados encubiertos, por el alza de los precios de la vivienda… Pero ahora se manifiestan por Gaza porque les va muy bien tener una cortina de humo ideológica que tape todas las vergüenzas de este Gobierno que, al fin y al cabo, es el que paga las subvenciones».
Este miércoles, un grupo de representantes de Solidaridad acudió a las sedes de UGT y CCOO en Barcelona a pedirles explicaciones por la huelga general, que a su juicio es «ilegal» y podría volverse en contra de los trabajadores que participen, sufriendo sanciones por parte de sus empleadores. Según Jordi de la Fuente, los sindicalistas han reaccionado cerrando las puertas de su sede, insultándoles desde los balcones y dedicándoles peinetas. «Éramos solo 15 y queríamos hablar, pero se han acongojado», relata entre risas. En otra ocasión, acudieron a la sede madrileña de UGT disfrazados de crustáceos a modo de protesta contra los «come-gambas» sindicalistas.
Una huelga «ilegal»
Solidaridad considera que la huelga general de este miércoles ha sido un fiasco, aunque ha generado molestias a los trabajadores. «Por lo general, la jornada ha transcurrido con normalidad, pero ha habido piquetes y un boicot activo en las vías de transporte, y eso sí que se ha notado. Es una estrategia muy clásica de la izquierda, boicotear y fastidiar, pero solo fastidian al que tiene que ir a trabajar o al que tiene que ir por necesidad a los servicios públicos. ¿Qué pasa si alguien tiene que ir al Hospital por una urgencia?», reflexiona el secretario general de Solidaridad.
El sindicato cree también que la huelga ha sido ilegal por «motivos políticos», y esto chocaría con el artículo 28.2 de la Constitución, con arreglo al cual se han dictado sentencias que han generado jurisprudencia. «Si alguien lo denuncia, puede que ser que la sentencia diga que es ilegal. En este caso, el empresario estaría facultado para sancionar a los trabajadores», explica el líder de Solidaridad, que a priori no denunciará porque «no vamos a ir en contra de ningún trabajador, sea de la ideología que sea».
La huelga general que Solidaridad convocó a finales de 2023 estaba motivada por la ley de amnistía, pero fue declarada legal por su componente laboral, ya que hacía alusión a los efectos que esta tendría sobre los trabajadores. No tuvo una gran adhesión, pero Solidaridad estudia ahora si existe el caldo de cultivo para que una tenga éxito en el futuro.