The Objective
Política

El Gobierno destina fondos europeos a un curso universitario de Pedagogía Antifascista

La Universidad de León pretende que los profesores «prevengan el auge del neofascismo» en las aulas

El Gobierno destina fondos europeos a un curso universitario de Pedagogía Antifascista

Imagen del curso.

La Universidad de León ha puesto en marcha un curso universitario en Pedagogía Antifascista, destinado a docentes de entre 25 y 64 años, para «facilitar al profesorado en activo y del futuro el conocimiento y el análisis crítico del neofascismo con el fin de promover una sociedad más justa y tolerante». Se pretende así fomentar una «educación antifascista ante los discursos de odio». La polémica iniciativa ha sido financiada por el Gobierno de España a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que incluye partidas para universidades, con el fin de promover la modernización de infraestructuras o programas de formación. También está costeada por la Consejería de Educación de las Cortes de Castilla y León.

La universidad leonesa ha decidido anunciar el curso en sus redes sociales. «¿Sabías que el auge del neofascismo preocupa cada vez más en los centros educativos?», comienza el vídeo promocional, que añade: «El profesorado se enfrenta a esta realidad sin formación ni recursos suficientes. Es por ello que la Universidad de León ha creado esta microcredencial, que ofrece estrategias fundamentadas y herramientas prácticas que permiten afrontar estas situaciones en el aula». El cursillo, según se anuncia, «fomenta una educación democrática, inclusiva e intercultural», e insta a los interesados a «formar parte del cambio educativo que nuestra sociedad necesita».

El plan de estudios se centra en «facilitar al profesorado en activo y del futuro profesorado el conocimiento y el análisis crítico del neofascismo con el fin de promover una sociedad más justa y tolerante», así como «dotar al profesorado en activo y al futuro profesorado de herramientas pedagógicas para trabajar en todas las materias escolares una educación antifascista ante los discursos de odio». También en promover en el profesorado «habilidades y estrategias pedagógicas que mejoren el aprendizaje en valores, mediante una educación crítica y comprometida con los derechos humanos y el bien común, y que prevengan el crecimiento y auge del neofascismo».

El curso se imparte online y consta de cuatro bloques: qué es el neofascismo; neofacismo y educación; pedagogía antifascista; y propuesta didáctica de pedagogía antifascista. Entre los docentes se encuentran Enrique Javier Díez Gutiérrez y Mauro Jarquín Ramírez, coautores de No pasarán: Por qué la extrema derecha quiere controlar la educación pública y qué hacer para defenderla. La tesis del libro es precisamente que la educación pública debe ser un pilar de «resistencia antifascista», y llama a constituir un «frente antifascista educativo» que eduque en la laicidad, el feminismo y el antirracismo.

La aparición del microcrédito universitario, financiado por el Gobierno con fondos europeos, es oportuna, pues coincide con la preocupación del Ejecutivo de Pedro Sánchez por la pérdida del voto joven. De un tiempo a esta parte, distintos sondeos evidencian que Vox es ya la fuerza más votada entre los jóvenes de 18 a 24 años. También coincide con el empeño de Moncloa de acabar con la proliferación de universidades privadas, endureciendo los criterios para su creación.

Críticas

Esta última circunstancia no ha pasado inadvertida para los usuarios de X, muy críticos con la Universidad de León. «Dice Pedro Sánchez que quiere cerrar las universidades privadas porque son chiringuitos educativos, luego en la pública te encuentras cursos de mierda como este», ha censurado el abogado Miguel Raposo. Por otro lado, el economista Manuel Llamas ha apuntado: «Esta basura existe. Luego se extrañarán de que haya cada vez más jóvenes que opten por la universidad privada». Como estos, centenares de comentarios que han inundado las redes sociales.

«El principal problema de gran parte de las universidades públicas españolas NO es de financiación, es de incentivos desalineados de quienes las integran y su propósito: formar ciudadanos competentes y contribuir al progreso social y económico», ha denunciado el ingeniero industrial Jon González, que ha criticado con sorna cómo las universidades públicas se quejan de no tener financiación para «poder formar mejor y a más alumnos», y luego destinan fondos públicos a este tipo de iniciativas.

Los usuarios también han criticado que no exista un grado en antimarxismo, y han señalado, en este sentido, que la actual rectora de la universidad, Nuria González Álvarez, viajó a la República Popular China meses después de ser elegida para estrechar lazos con universidades de ese país. «Alega impulsar una ‘educación democrática’ pero sin criticar el comunismo. Esta trampa ya se vio hace muchos años: la utilizó un dictador llamado Stalin», ha expuesto Elentir, autor del blog Contando Estrelas.

Publicidad