Alarma en el Instituto Catalán por la Paz: crece el apoyo de los jóvenes a subir el gasto militar
Los varones de hasta 25 años son los que menos creen que el cambio climático se deba a la actividad humana

Grupo de militares. | TO
Cataluña está mutando. En este periódico se han publicado varios sondeos que reflejan que los jóvenes de Cataluña son los que más usan el castellano o quienes reniegan más de las políticas feministas que han dominado en los últimos años. Todo ello preocupa a las instituciones de la región, y en la conversación pública catalana se aborda de forma recurrente la idea de que hay una «derechización» de los jóvenes por culpa de las redes sociales.
El Instituto Catalán Internacional por la Paz (ICIP) ha publicado un sondeo para analizar las percepciones respecto a la seguridad, la convivencia y la polarización política, entre otras cuestiones. Uno de los puntos más destacados es que los jóvenes de 18 a 24 años son los más partidarios de incrementar el gasto militar, mientras que las generaciones mayores apuestan en mayor medida por invertir en «cooperación internacional».
El 24% de jóvenes de esta franja de edad eligen aumentar el «gasto militar» como principal actuación para garantizar la seguridad. Y el 33% dividiría este desembolso en partes iguales en ambos conceptos. Si bien hay más que se inclinan por la cooperación (el 42%), se trata del porcentaje más bajo respecto al resto de franjas de edad. Un tercio, además, considera que el Gobierno central debe aumentar dicho gasto.
Los mayores de 65 años, los más reticentes
Entre los adultos de 25 a 34 años, el 48% se inclina por reforzar la cooperación internacional como actuación preferente para mantener la seguridad global, mientras que solo el 16% opta por el aumento del gasto en defensa. Lo mismo ocurre entre los que tienen entre 35 y 49 años: solo el 16% está a favor de subir el gasto militar, frente al 47% que prefiere la cooperación.

Los adultos de 50 a 64 años y los de 65 años y más, son las dos cohortes de edad más reticentes a incrementar el gasto en defensa. El 14% y el 9% de los encuestados, respectivamente, respaldan esta medida. En cambio, un 54% de los adultos de 50 a 64 años se decantan por la cooperación, y un 64% de los que tienen 65 años o más.
En paralelo, también se observa, respecto al sondeo de 2023, que el «apoyo al gasto militar ha ido en aumento» en la población catalana. Si entonces el 62% creía que este gasto era «excesivo», ahora ha caído a más de la mitad: el 30% considera que es excesivo.
Rechazo del feminismo
Este estudio, elaborado por el politólogo Toni Rodon y el periodista Roger Tugas, también refleja otras tendencias de la población catalana. Por ejemplo, el 58% defiende que la llegada de inmigrantes es buena para la economía y un 57% rechaza que su forma de vida esté en peligro por la llegada de inmigrantes. No obstante, cerca de la mitad de catalanes cree que la población inmigrante delinque más que la autóctona.
Los jóvenes de 18 a 24 años también son más los que desconfían de la democracia. Cuatro de cada diez expresan dudas o están en desacuerdo con que el sistema democrático sea preferible. Asimismo, el 60% considera que el feminismo perjudica las relaciones entre hombres y mujeres y el 30% considera que la llamada violencia de género es un invento de la ideología feminista.
Los varones menores de 25 años también son los que menos creen que el cambio climático se deba a la actividad humana (18%), atribuyéndolo a procesos naturales. Esto contrasta con una mayoría de la población (el 61%) que considera que responde sobre todo o únicamente a la «actividad humana». Los autores del informe concluyen que estas «actitudes» de los jóvenes son «preocupantes».
