Abascal acusa a Guardiola de ser la candidata «tapada» de Sánchez en Extremadura
El líder de Vox tilda a la candidata del PP de «portavoz socialista» del presidente del Gobierno en la región

El presidente de Vox, Santiago Abascal, atiende a los medios en Badajoz (Extremadura).
Santiago Abascal ha entrado ya en la precampaña en Extremadura. El líder de Vox ha acudido hoy a Badajoz para cargar contra los candidatos del PSOE y del PP, tildándolos a ambos de aliados de Pedro Sánchez. Sobre el primero, Miguel Ángel Gallardo, ha asegurado que es un «insulto a los extremeños», por ser el «tipo que ha creado un puesto de trabajo falso para el hermanísimo» del presidente del Gobierno. Sobre María Guardiola, ha dicho que es la «portavoz socialista» en la región, la «candidata tapada» del jefe del Ejecutivo para «hacer avanzar la agenda socialista».
En concreto, Abascal ha asevereado que a Sánchez «no le importa perder con Gallardo porque espera poder aplicar las políticas socialistas» con Guardiola, a la que ha atribuido la condición de ser la «encargada de hacer avanzar la agenda socialista en Extremadura». «Es la portavoz de la invasión migratoria, del terrorismo climático y de la Agenda 2030, de las políticas de género y del feminismo extremo», ha abundado Abascal, que ha zanjado: «No hay más alternativa que Vox».
El discurso ha sido un preludio de la campaña de Vox en Extremadura, encargada en asemejar a PSOE y PP, cargar con dureza contra la candidata popular, a la que acusan de ser la artífice de la derrota electoral de la derecha en las últimas elecciones generales, y en la que Santiago Abascal se volcará especialmente ante el perfil bajo de su candidato, Óscar Fernandez, escogido en detrimento de Ángel Pelayo, apartado tras su pobre desempeño al interpelar a Pedro Sánchez en la comisión Koldo del Senado.
Tal y como adelantó THE OBJECTIVE, en Vox fían la campaña extremeña a la presencia de Abascal, que ya estuvo hace dos semanas en Plasencia. Este mismo lunes presenta a los candidatos para las elecciones autonómicas en un acto que tendrá lugar en el Hotel Las Lomas. En el partido insisten en que «lo importante es el proyecto, no los nombres», y en que «nadie es imprescindible». «Nuestra fortaleza», enfatizan, «es que defendemos el mismo mensaje en todos lados», en contraste con el Partido Popular.
En Vox desconfían de los candidatos estrella. Y esa desconfianza tiene un contexto. La única vez que el cartel electoral no llevaba la foto del líder del partido fue en Andalucía. Allí fue Macarena Olona la que protagonizó la campaña, y los resultados quedaron lejos de las expectativas. Además, Juan García-Gallardo, el último barón de Vox que consiguió cierto nivel de notoriedad, terminó enfrentado a la dirección nacional.
Aunque la crítica más recurrente a Vox es que se ha vaciado de capital humano y ha prescindido de algunas de sus figuras más mediáticas, lo cierto es que el partido se encuentra en un momento dulce en las encuestas, y ya oscila en torno a los 60 diputados a nivel nacional, el doble de los 33 que tiene ahora. Los sondeos apuntan que los de Abascal serían clave en Extremadura, donde podrían mantener o incluso mejorar sus cinco escaños, siendo de nuevo imprescindibles para gobernar.
