La irrupción de Bob Pop rompe en dos a los Comunes pese al apoyo de Colau a Pisarello
La irrupción del crítico convierte la opción de Gerardo Pisarello en la del ‘establishment’ frente al segmento radical

Yolanda Díaz con Bob Pop en un acto en Madrid. | EP
Las primarias que los Comunes, la marca catalana que en 2023 confluyó en la coalición de Sumar, celebrarán el próximo año para decidir su candidato a la alcaldía de Barcelona amenazan con desembocar en un choque interno. Por un lado se halla la opción oficialista, representada por el diputado Gerardo Pisarello y respaldada por Ada Colau, que debería ser la favorita. Por el otro, la opción rompedora, identificada en el outsider Bob Pop, el escritor y crítico televisivo que ha irrumpido en los equilibrios internos del partido. El nombre de Bob Pop —pseudónimo de Roberto Enríquez— como candidato a las primarias se recibió en un primer momento con algo de humor. Con el paso del tiempo, y ante lo que parece ser una decisión definitiva, la tensión va en aumento. Los segmentos más radicales de los Comunes, en efecto, apostarían por el crítico televisivo en contra del candidato oficialista.
Pisarello es el candidato a la alcaldía de Barcelona que todos consideraban más viable para sustituir a Colau en las municipales de 2027. La exregidora dejó todos los cargos tras perder el bastón de mando de la ciudad condal. Dijo que se dedicaría al activismo y a la política internacional como embajadora internacional de la marca de los Comunes. Tras embarcarse en la Global Sumud Flotilla que desafió a Israel en el pasado mes de septiembre, se especuló sobre una vuelta de Colau a la política activa: como candidata a la alcaldía o posible cabeza de lista de Sumar por Barcelona. Sin embargo, Colau desmintió recientemente cualquier tipo de regreso a la primera línea política.
Esta situación ha removido por dentro a los Comunes. Mientras que en Madrid los sectores más cercanos a Yolanda Díaz aplaudían la decisión de Colau, tal y como desveló este diario, la renuncia a la alcaldía de Barcelona ha reavivado el debate —todavía incipiente— sobre su sucesión. Pisarello dio a entender su predisposición a participar en el proceso de primarias que se abrirá el próximo año. Se habló de la posibilidad de que Jaume Asens, exdiputado en las Cortes y ahora eurodiputado, pudiera estar interesado en disputarle la candidatura. Pero nadie contaba en Bob Pop, que ahora se erige como referencia de los sectores más radicales de los Comunes, muy sensibles a los temas LGTBI y a cuestiones de nuevo urbanismo y políticas sociales más escoradas a la izquierda.
El ‘ejemplo’ de Nueva York
Bob Pop es una figura muy conocida por su proyección mediática, y ese aspecto está siendo valorado positivamente por los sectores de los Comunes que empiezan a calentar su candidatura. El crítico televisivo aboga por nuevas políticas que mejoren la accesibilidad urbana de Barcelona, además de políticas activas para la inclusión de los inmigrantes (incluso aquellos en situación administrativa irregular). Sus partidarios recuerdan la influencia que puede ejercer en el ámbito de la comunidad LGTBI de Barcelona, que podría aportar un importante granero de votos.

Los más favorables a la candidatura de Bob Pop llegan a compararlo con Zohran Mamdani, el nuevo alcalde de Nueva York, que ganó contra pronóstico y con una receta política rompedora. Su candidatura se convierte, además, en un problema para Pisarello, al que de repente se asocia a una apuesta del establishment del partido frente a un perfil rompedor y más irreverente. Pisarello goza del apoyo del sector más institucional de la formación, y según aseguran fuentes de los Comunes, también de Ada Colau, que se habría decantado por él para evitar una guerra de sucesión interna. Oficialmente la exalcaldesa no ha tomado partido, y los partidarios de Bob Pop confían en que acabe apostando por la neutralidad o por decantarse incluso por el crítico televisivo.
Lo cierto es que a un año de las primarias, los Comunes corren peligro de afrontar un proceso electoral interno en el que las diferentes familias choquen entre ellas. Y, sobre todo, en el que la nomenklatura de la formación se quede en minoría ante la opción rupturista e inesperada de Bob Pop. En 2023, cuando se celebraron las últimas elecciones municipales, Bob Pop se mostró partidario de la candidatura de Ada Colau. La exregidora rebotó en las redes sociales un vídeo de apoyo del crítico televisivo, a quien apodó «mi querido Bob Pop». Entonces, el crítico se sumó a la lista electoral de Colau, aunque en un puesto bajo en la lista. Su apoyo fue, por lo tanto, simbólico. Esta vez parece estar decidido en dar el paso y escalar todos los peldaños de la formación hasta convertirse en candidato oficial.
