Temor en el PSOE a las filtraciones de Koldo y la entrada en prisión de Ábalos: «Va a cantar»

Del tridente corruptor Ábalos-Koldo-Cerdán, a quien teme el PSOE es al primero. La ex mano derecha de Pedro Sánchez acudirá el próximo jueves 27 al Tribunal Supremo a la vista reclamada por la Fiscalía y las acusaciones populares para revisar las medidas cautelares. La convicción predominante en Moncloa y Ferraz es que «Ábalos ingresará en prisión, hay pocas dudas» porque «no tiene sentido convocar la vista en caso contrario». Y esto nos lleva al estado de ánimo mayoritario en el Gobierno y el partido: el temor. Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE auguran que el ex secretario de Organización del PSOE y exministro de Transportes José Luis Ábalos es el eslabón más débil de la cadena, el más proclive a colaborar con la justicia para atenuar la pena de 24 años de prisión que pide para él la Fiscalía Anticorrupción.

«Es seguro que va a cantar porque está desesperado y ya no tiene nada que perder», deslizan estas fuentes socialistas en un clima de incertidumbre en el que son conscientes de que no controlan el relato informativo ni quién está detrás del mismo. Este lunes, las informaciones del diario El Español sobre la supuesta reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, en mayo de 2018, antes de la moción de censura, generaron un ambiente de cabreo e indefensión en Moncloa y Ferraz. Desde el Gobierno desmintieron la información de forma taxativa, si bien 24 horas antes habían declinado hacer comentarios al respecto: «El presidente del Gobierno nunca se ha visto con el señor Arnaldo Otegi».

Desde el partido, diferentes dirigentes consultados se preguntaban cuál era la fuente de la noticia, indicativo de la procedencia del fuego amigo que se cierne en estos momentos sobre el Gobierno y el PSOE. Que proceda de Ábalos, Koldo o Cerdán es relevante en la medida en que pueda anticipar un goteo de filtraciones de asuntos sensibles para el Ejecutivo, y convertirse en una amenaza. Diferentes fuentes socialistas y gubernamentales consultadas rechazan que el origen de la filtración haya sido Santos Cerdán, con quien todavía parecen mantener una línea de comunicación discreta.

Moncloa y Ferraz señalan a Koldo como filtrador

En Moncloa y Ferraz apuntan a Koldo García como el filtrador de una «noticia falsa». No en vano fue el propio Koldo García el que corroboró este lunes que condujo a Sánchez y Cerdán desde el aeropuerto de Bilbao a un caserío del País Vasco para reunirse con Otegi: «Lo que publica El Español es verdad». Las fuentes socialistas consultadas aseguran que «la información no encaja con la propia hemeroteca, fueron dos días desde la sentencia y Pedro no se movió de Ferraz con el equipo». Sin embargo, lo que más preocupa de la información es que sirva para anticipar otras cuya procedencia sea la misma. «Koldo fue colaborador de la Guardia Civil, de la unidad de información, y no ha cortado los lazos. Está mandando un aviso», destacan.

La advertencia de la mano derecha del ministro entre 2018 y 2021 es que puede revelar asuntos sensibles de las tripas del Gobierno y el partido en esos años, desde las primarias en 2017, cuyos avales custodió Koldo, hasta su llegada al Palacio de La Moncloa tras la moción de censura en 2018 o el propio Delcygate, del que Koldo dijo hace más de un año que no hablaría «ni muerto». Tras la petición del Ministerio público de 19 años de prisión para el que fuera el hombre para todo de Ábalos, la situación ha cambiado. Y la pena de siete años para Víctor de Aldama les muestra el camino de la colaboración con la Fiscalía para atenuar la sanción. A ojos del partido, «Koldo es capaz de cualquier cosa», como demostraron las grabaciones que el propio Koldo grabó durante años con Ábalos y Cerdán, lo que le aporta un halo inquietante, con una especial influencia sobre José Luis Ábalos, con quien parece haber invertido sus roles en la jerarquía que ambos ocupaban en el Gobierno.

Koldo y Ábalos «están sincronizados»

Algunas fuentes apuntan a que «las estrategias de Koldo y Ábalos están sincronizadas» y que el primero cuenta con material sensible del segundo que le permite controlar, e incluso dirigir a quien fuera su jefe. Precisamente por ello, estas fuentes dan cuenta del «estado de nerviosismo en el que se encuentra el exministro Ábalos, convencido de que el jueves puede ingresar en prisión». Ábalos dice ser víctima de un montaje político del que él es el chivo expiatorio. Marcan distancias con Santos Cerdán quien, a diferencia de Ábalos, «dejó el acta a sabiendas de que ingresaría en prisión, que abandonó su vida en Madrid y se mudó de casa», de vuelta a Milagro (Navarra), su localidad natal. A juicio del PSOE, «Santos es el gran perjudicado y el que ha sido más leal con el partido», en la medida en que no sólo no está filtrando información sensible, sino que «ni siquiera menciono al partido en su salida de Soto del Real el pasado miércoles en una forma de protegerlo», siguiendo la línea marcada por Ferraz de desvincular sus actuaciones del PSOE.

«Santos conoce bien la maquinaria del partido, que es muy fuerte, y no se quiere enfrentar a ella», sostienen estas fuentes, que marcan un claro contraste con Ábalos, que «critica abiertamente al partido y va a por todas, cegado por un odio profundo a Sánchez». Es precisamente esto lo que ha hecho cundir la inquietud interna en el partido, donde muchos advierten de las consecuencias que pueden tener los actuales errores del PSOE: «Ojo con dejar tirada a la gente. El partido se está equivocando dejando solo al único que ha demostrado cierta lealtad». No vaya a ser que el único al que cree tener controlado el núcleo duro de Sánchez acabe tirando de la manta para defender su inocencia, como dan por seguro que harán los otros dos miembros del núcleo corruptor.