The Objective
Política

Podemos aprovecha el choque de Díaz con Ábalos para insinuar que ella conocía la trama

Sumar cree que las acusaciones de Ábalos sobre la residencia oficial de Yolanda Díaz «no tendrán recorrido»

Podemos aprovecha el choque de Díaz con Ábalos para insinuar que ella conocía la trama

José Luis Ábalos con Yolanda Díaz en el Congreso de los Diputados. | EP

El choque entre el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha servido a Podemos para preguntar, o al menos insinuar, si la líder de Sumar estaba al tanto de lo que ocurría con la trama de las mascarillas. Horas antes de ingresar en la cárcel, Ábalos acusó a la ministra de Trabajo de haber alojado en su residencia institucional a «otras personas sin derecho a ello». El ministro hizo esas insinuaciones después de que Díaz le tachara de «golfo» por haber sido responsable de «tropelías muy gordas». Tras el ataque, Díaz contestó que Ábalos tiene «la oportunidad de explicar ante la Justicia lo que estaba haciendo él en pandemia». Una alusión a la trama de la compra de mascarillas durante la pandemia que sirve a Podemos para preguntar si Yolanda Díaz «sabía» lo que estaba ocurriendo.

La vicepresidenta segunda asegura su total desconocimiento sobre la trama de las mascarillas, investigada por el Tribunal Supremo y en la que se ha decretado prisión provisional sin fianza para el exministro y su mano derecha, Koldo García. El nombre de Díaz salió por primera vez en los documentos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil hace un mes. Un informe de la UCO mencionó a la ministra respecto a las certificaciones que servían a las empresas de la trama para vender las mascarillas. «Se me olvidó decirte que la ministra de trabajo me dijo que mañana estará la certificación de las mascarillas de Canarias», escribió Ábalos a Koldo García, que entonces intentaba vender el material sanitario en Canarias.

El mensaje se rubricó el 24 de agosto de 2020 y, según se desprende del mismo, las certificaciones fueron esenciales para la operación comercial. Sumar siempre ha defendido que Díaz no tuvo ningún vínculo con la presunta trama corrupta. En el caso concreto de esos mensajes, las fuentes consultadas sostenían que Ábalos y Koldo no son fuentes creíbles, y quisieron desligar a la ministra de todo tipo de especulaciones sobre su participación en la trama.

Polémica del piso «sin recorrido»

Yolanda Díaz logró que la mención en los informes de la UCO no derivara en una petición oficial de explicaciones hasta que el propio Ábalos la volvió a involucrar, culpándola de ignorar la «presunción de inocencia» y de llamarle «golfo». El pasado miércoles, el exministro escribió: «Antes de llamarme ‘golfo’, señora vicepresidenta y ministra de Trabajo, mejor sería que recordara qué papel jugó cada uno durante la pandemia de covid-19. No sé cuál fue el suyo, pero sí sé cuál fue el mío […] Y ya que nos ponemos tan estupendos, quizás usted nos debería aclarar si la vivienda asignada para los ministros y ministras, y sus familias podía ser usada por otras personas sin derecho a ello».

La respuesta de Díaz no tardó en llegar. «Es público y notorio que en pandemia yo vivía con el entonces mi esposo y con mi hija; y es público y notorio que, en pandemia, cinco mujeres nos dejamos la piel en el Ministerio de Trabajo para salvar a empresas y trabajadores. Esto es lo que hemos hecho en pandemia», afirmó este jueves Díaz.

Al igual que con el informe de la UCO, también en este caso, Sumar trata de disminuir el impacto de las declaraciones de Ábalos. El partido limita el acceso a la residencia oficial de la ministra -un inmueble situado en el Paseo de la Castellana con una superficie de 443 metros cuadrados, el más grande de todos los pisos oficiales- a miembros del equipo de la ministra. Es decir, a asesores y otros integrantes de su gabinete, y lo enmarca en algo habitual. Habla de «gente de confianza» de la ministra, y cree que la «polémica no tendrá recorrido». La cuestión, añade Sumar, tendría impacto solo si Díaz alojase en el domicilio a alguien «de forma permanente». Y ataca a Ábalos, quien «tiene que tragarse lo que le digan» por su papel en la trama. «Yolanda llama a Ábalos golfo porque es un golfo».

¿La ministra sabía?

En definitiva, Sumar considera que la polémica sobre la residencia oficial de la ministra no tiene recorrido. Pero Podemos quieren aprovechar el rifirrafe para preguntar si Díaz estaba al tanto o no las operaciones de la trama. El hecho de que la ministra afirmara que Ábalos tiene «la oportunidad de explicar ante la Justicia lo que estaba haciendo él en pandemia» lleva a los morados a suponer que Díaz sabe más de lo que dice. Y así lo van rebotando los afines al partido morado, que suele actuar bajo las directrices marcadas por la dirección. La pregunta repetida es: «¿Lo sabía?».

Podemos aprovecha el choque entre la líder de Sumar y el exministro para cuestionar el papel de Díaz en la venta de las mascarillas. Aunque Sumar rechaza todo tipo de alusiones y considera que ninguna de las declaraciones del ministro pueden afectar a Díaz, ni siquiera aquellas inherentes al uso de su residencia oficial. Díaz es y sigue siendo, en palabras de estas fuentes, el principal rostro y referente del espacio político de la izquierda alternativa al PSOE, y reiteran su intención de representar a la coalición en las próximas elecciones generales. Unos comicios que, después de la derrota parlamentaria sobre el techo de gasto y la detención de Ábalos y Koldo de este jueves, insisten en que se pueden adelantar.

Publicidad