Sumar quiere cambios en tres ministerios y quitar Obras Públicas a Transportes

Sumar, la coalición que lidera Yolanda Díaz, tiene un plan de remodelación del Gobierno que afectaría a los ministerios de Vivienda, Hacienda e Interior, además de una reformulación de las competencias de Transportes, que dirige Óscar Puente. Sumar quiere dividir en dos este ministerio y separar todo lo que tiene que ver con obra pública del resto de competencias, entregando la sección que se encarga de las licitaciones a una persona sin vínculos con el PSOE y el PP, tal y como ha podido saber THE OBJECTIVE. Los responsables de los otros ministerios señalados por Sumar son los socialistas Isabel Rodríguez, María Jesús Montero y Fernando Grande-Marlaska. Sumar ha exigido el martes una reunión urgente con los socialistas, que han contestado que propondrán un encuentro a lo largo de esta semana.

Yolanda Díaz sostuvo el pasado viernes que para superar la crisis derivada de los casos de corrupción es necesario un cambio radical («de arriba abajo», afirmó) en el organigrama del Ejecutivo. Sumar plantea una remodelación que sirva de trampolín para alejar las voces que hablan de fin de ciclo y encarar lo que queda de legislatura bajo una perspectiva de regeneración. Antes del verano, Sumar pidió a Sánchez acelerar en las reformas sociales para darle la vuelta a los escándalos de corrupción después de la detención de Santos Cerdán. Ahora, con José Luis Ábalos y Koldo García en Soto del Real, y después de las detenciones de la socialista Leire Díaz y del expresidente de la SEPI Vicente Fernández, entre otros, Sumar considera que debe subir la apuesta.

La formación de Díaz se muestra preocupada y «contrariada» por la respuesta de Sánchez a sus exigencias. El viernes, Díaz dijo que hacía falta reformular «radicalmente» el Gobierno. «Así no podemos seguir», afirmó en una entrevista en La Sexta. Según Díaz, «toca un cambio profundo en el equipo de Gobierno». «Es grave. Basta ya. El deterioro es mayúsculo. Es insoportable lo que vivimos: corrupción, puteros, machismo», reiteró la ministra de Trabajo y vicepresidenta.

Contratos públicos

El lunes, Ernest Urtasun reprochó a Sánchez tirar de «inmovilismo» y no darse cuenta de la gravedad de la crisis. La sensación de un líder del Gobierno atrincherado e incapaz de afrontar el problema de la corrupción, así como el de los presuntos casos de acoso que afectan a personas de su confianza, irrita a Sumar, que quiere hacer oír su voz, aunque de momento descarta romper con el Ejecutivo. Todos los socios de Díaz están alineados con la vicepresidenta en insistir estos cambios en el Gobierno. Así lo manifestó, por ejemplo, el diputado de Compromís Alberto Ibáñez, quien calificó de «recomendable» una remodelación del Ejecutivo ante la «gravedad» de la situación.

De momento, Sánchez solo contempla la sustitución de Pilar Alegría como portavoz y ministra de Educación. Alegría será la candidata del PSOE a las elecciones autonómicas de Aragón, cuyo presidente, Jorge Azcón, ha convocado para el próximo 8 de febrero. El presidente del Gobierno ha descartado hasta la fecha más sustituciones en el Ejecutivo, aunque queda pendiente la decisión sobre María Jesús Montero, candidata in pectore para las autonómicas andaluzas de junio.

La atención de Sumar se ha centrado justo en la figura de María Jesús Montero. El hecho de que un expresidente de la SEPI nombrado por Montero esté siendo investigado por presuntos amaños de contratos públicos en el marco de la trama de Santos Cerdán y la empresa Servinabar preocupa a los socios de los socialistas. Sumar asume que si los jueces piden a Montero comparecer como investigada en alguna ramificación de la trama, las posibilidades para el Gobierno de sobrevivir se reducen drásticamente. Por ello, los de Díaz piden rapidez en la respuesta del Gobierno.

«Actitud proactiva»

Este diario publicó la semana pasada que Sumar interpretaba que las últimas detenciones representaban un «cerco a Sánchez». Mientras, uno de los portavoces de la coalición, el miembro de Izquierda Unida Enrique Santiago, pedía a Sánchez adelantarse a los acontecimientos (algo que también subrayó Urtasun): «Le exigiría al PSOE que tuviera una actitud mucho más proactiva, porque no podemos estar todos los días con una nueva noticia. Que revisen todas las problemáticas que tengan dentro y que intenten adelantarse a los acontecimientos».

Sumar considera que hay que acelerar en los cambios ministeriales y acometerlos antes de que sea demasiado tarde. Entre las carteras debilitadas que deberían reformarse se encuentra la de Hacienda. En el caso de la Vivienda, varios socios de Sumar se centran en la socialista Isabel Rodríguez y en políticas más contundentes para topar los precios del alquiler e intentar resolver un problema considerado prioritario por los ciudadanos. Las fuentes parlamentarias de Sumar también incluyen en la ecuación al responsable del ministerio del Interior y, sobre todo, el departamento de Transportes.

José Luis Ábalos ejerció de ministro de Transportes en los años que investigan los jueces, aunque las pesquisas que afectan a Santos Cerdán extienden las sospechas más allá de ese periodo. Los investigadores quieren aclarar cuántos contratos públicos pudieron amañarse para favorecer a constructoras y empresas cercanas o vinculadas a miembros destacados del PSOE (dos ex secretarios de Organización). Así que Sumar sostiene que para limpiar ese ministerio se podría dividir el departamento en dos, separando lo que tiene que ver con obra pública de las demás competencias.

Sumar quiere entregar a una persona de prestigio, sin pertenencia política al PSOE o al PP, ese cargo, como prueba de que el Ejecutivo se ha tomado en serio la cuestión de la limpieza de las instituciones. Pero Sánchez se resiste. El lunes, el presidente dijo sentirse «orgulloso» de todos sus ministros, excluyendo así una remodelación a fondo del Ejecutivo Díaz. Puente, uno de los ministros señalados por las exigencias de regeneración de Sumar, también ha rechazado la opción de una crisis de Gobierno. Dijo que la remodelación «está fuera de lugar» y contestó a Díaz: «No sé si en la propuesta que hace la señora Díaz se incluyen los ministros de Sumar. No sé si también hay que remodelarlos a ellos».

Sumar insiste en su exigencia y pide un encuentro con los socialistas. «Estamos muy contrariados y muy preocupados porque nuestro socio de Gobierno parece totalmente paralizado, enredado en una situación interna que nos parece inaceptable», dijo Santiago el martes para expresar el malestar compartido por los socios de Sumar.