El traslado de Brahim Ghali al hospital fue coordinado por un hombre de paisano
Así se desprende de un oficio policial en el que se recoge el testimonio de los tres sanitarios que atendieron al líder del Polisario
Los sanitarios que atendieron al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, a su llegada a España han revelado la participación en el recibimiento de una persona uniformada con el uniforme el Ejército del Aire «posiblemente con rango de oficial» y otra persona de paisano que era la que «parecía dirigir» al militar.
Así se desprende de un oficio policial, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se recoge el testimonio de los tres sanitarios que atendieron a Ghali a su llegada a la Base Aérea de Zaragoza la noche del 18 de abril de 2021, y que le trasladaron en el vehículo medicalizado hasta el Hospital San Pedro de Logroño.
La Jefatura Superior de La Rioja responde así a una petición del titular del Juzgado de Instrucción Número 7 de Zaragoza, el juez Rafael Lasala, quien investiga la entrada en España del político saharaui toda vez que ingresó al país sin pasar por controles de frontera ni de documentación.
En una comunicación incluida en el oficio que incluye información relativa al traslado, y emitida por el Servicio Riojano de Salud, se desprende la identidad del paciente, que se identificó como Mohamed Apdellall. Se trata de una identidad distinta a su nombre real, Brahim Ghali, o al que utilizó para registrar su llegada al Hospital de Logroño: Mohamed Benbatouche.
Es la declaración del conductor la que revela que a los sanitarios que integraban la ambulancia les fue requerida su documentación personal por parte del militar. El hombre de paisano, por su parte, «dio las directrices para ubicar» el vehículo «en la pista del aeropuerto y coordinar el traspaso desde el avión».
De su testimonio también se deduce que Ghali viajó en la ambulancia junto a su hijo y a un médico «los cuales se identificaron de forma verbal». Preguntado sobre si mantuvieron contacto con el entonces jefe de gabinete de Exteriores y actual investigado en la causa, Camilo Villarino, el técnico dijo desconocer quién era esa persona.
Entregó al militar «un documento que no leyó»
La declaración de otra de la enfermera aporta más información con respecto a las personas que habrían recibido a Ghali aquella noche. La sanitaria relata que mantuvo una «breve conversación» con el supuesto militar descrito anteriormente, al que entregó «un documento que no leyó» y que le había facilitado «la persona que manifestó ser el médico personal» de Ghali.
Aquella noche, la sanitaria también «observó otra persona que se encontraba vestida de paisano y que abandonó el lugar a los pocos minutos».
La tercera integrante de la ambulancia, la médico, corroboró en su testimonio que en el vehículo viajaron, además del paciente, una persona que manifestó ser sanitario y otra persona que se identificó como el hijo de Ghali. «Todos ellos hicieron sus identificaciones de forma verbal sin mostrar documento acreditativo», recoge el oficio.
En este contexto, descartó que ella o alguno de sus compañeros mantuviesen contacto con Villarino o con alguna otra persona de las citadas anteriormente.
Se trata del relato facilitado en dependencias policiales por las tres personas que se personaron en ambulancia al aeropuerto de Zaragoza pasadas las 19.00 horas del 18 de abril. Fue unas horas más tarde, a las 22.04, cuando el traslado se dio por concluido y Ghali ingresó en la Unidad de Medicina Intensiva, «donde se encontraban esperando su llegada».
No se revisó el pasaporte
Las autoridades españolas no revisaron la documentación que portaba el líder polisario a su llegada a la Base Aérea de Zaragoza antes de ser trasladado en ambulancia al Hospital San Pedro de Logroño.
La exministra de Asuntos Exteriores Arancha González Laya dijo en su declaración en sede judicial el pasado mes de octubre que las autoridades argelinas le avisaron que Ghali portaba un pasaporte diplomático argelino.
Aseguró que «habiéndose anunciado quién iba a venir y con el código de Schengen en la mano» desde su Ministerio entendieron que la «entrada podía tener lugar como tuvo lugar, es decir, sin que se controlase el documento de acceso». «¿Hicimos nosotros averiguaciones sobre si esta persona tenía algún tipo de limitación para la entrada en el territorio Schegen? No, señoría, no lo hicimos», señaló.
La exministra aseguró que el 14 de abril –cuatro días antes de la llegada de Ghali– recibió una primera llamada de Argelia para pedir a España que acogiera al líder polisario por razones «humanitarias».
La Policía no recibió comunicación
Por su parte, tanto el director adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional, José Ángel González Jiménez, como el comisario general de Información de la Policía Nacional, Eugenio Pereiro Blanco, aseguraron ante el juez que no recibieron comunicación oficial de la llega de Ghali a España.
El DAO señaló que no informó a sus superiores porque la información que manejaba gracias a un informante era inconcreta, ya que le alertaron de que aterrizaría en Zaragoza un líder del Frente Polisario, pero no le precisaron de quién se trataba. En concreto, fue Pereiro el que le comunicó por teléfono que había recibido un chivatazo de una fuente confidencial sobre la posible llegada a España de un político sarahaui.