Absuelven al alcalde de Orense de maltrato por empujar a una manifestante: «Di al megáfono»
El juez sostiene que la agresión de Gonzalo Pérez Jácome no tuvo «la intensidad suficiente para ser considerada delictiva»
«Todos los ataques de la prensa, la oposición política y el establishment quedan de nuevo en evidencia». Con esa frase en Twitter ha comunicado el alcalde de Orense, Gonzalo Pérez Jácome, de Democracia Orensana, que ha sido absuelto por el Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad del delito leve de maltrato que le imputaban por empujar a una manifestante. El juez sostiene que la agresión no tuvo «la intensidad suficiente para ser considerada delictiva». La concentración tuvo lugar el pasado 3 de mayo, pero el regidor siempre defendió que él solo le dio al megáfono que portaba la mujer.
El instructor explica que absuelve al alcalde de Orense porque las partes no discuten lo sucedido. El incidente está recogido en una grabación, cuyo contenido no impugnaron. La sentencia, a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, concluye que la actuación del regidor es «una mera reacción al hecho de que la denunciante utilizase el megáfono a escasos centímetros de su cara».
Pérez Jácome siempre defendió esa tesis. El alcalde de Orense acusó a la manifestante de «intentar romperme el tímpano» cuando esta le acercó un megáfono a la cara. Sostiene que empujó a la mujer «en defensa propia». La agredida, que pertenece al sindicato Comisiones Obreras, protestaba en la plaza del Ayuntamiento junto a un grupo de compañeros por un conflicto del transporte urbano, pero a pesar de la agresión no sufrió lesiones, algo que ha pesado en la resolución.
Lesión auditiva
La Fiscalía pedía para el alcalde una multa de 300 euros, mientras que la acusación particular solicitaba 2.250 y una indemnización de 1.500 euros por un delito leve de maltrato de obra. El juez basa su conclusión en el hecho de que, después de propinar el empujón, el alcalde la sujetase durante varios segundos, por lo que asegura que «parece clara» su intención de evitar que pudiese «utilizar nuevamente el megáfono cerca de su cara».
La sentencia, contra la que cabe recurso, también indica que es «significativo» que después del empujón se iniciase una discusión entre ambos, en la que el alcalde «parece estar reprochándole alguna cosa, lo cual también es compatible con la versión de los hechos que ofreció en el acto de la vista».
En el juicio, el regidor afirmó que en ningún momento tuvo la intención de agredir o maltratar a la manifestante, sino «apartarla», pero que reaccionó de ese modo «por la utilización que realizó del megáfono, justo a escasos centímetros de su cara». E insiste: «Tenía temor a que le pudiese causar algún tipo de lesión auditiva».
El juez señala en la resolución que «bien es cierto que su reacción quizás sea un tanto desproporcionada», pero subraya que «en ningún momento alcanza la intensidad suficiente como para ser considerada delictiva». En el relato de hechos probados, el magistrado asegura que durante la concentración, el alcalde «tuvo la intención de dirigirse a los manifestantes empleando un megáfono que a tal efecto parecía poner a su disposición la denunciante».
Sin embargo, según la sentencia, «inmediatamente» se produce «un cambio de actitud» en el alcalde, «quien parece estar enfadándose, al tiempo que se dirige a la denunciante empleando la expresión no me toques, lo que provoca una reacción en la denunciante, quien se baja la mascarilla, toma el megáfono y a escasos centímetros de la cara del señor alcalde grita la expresión fala».
El fallo asegura que esa actitud provoca que el regidor «la empuje de forma brusca para, acto seguido, sujetar durante varios segundos a la denunciante, justo hasta el momento en el que varias personas se interponen entre ambos, iniciándose entonces una pequeña discusión entre ambos, concluyendo de este modo el incidente». El juicio estuvo presidido por el magistrado Leonardo Álvarez porque el titular, Luis Doval, se aportó porque su mujer es asesora de Pérez Jácome en el Ayuntamiento.
Investigación de la Fiscalía
La denunciante defendió en el juicio que el alcalde «me empujó, se me echó encima» cuando le acercó el megáfono que originó la disputa. La mujer afirmó que lo sucedido le afectó después, al sentirse «muy degradada como persona, nunca me pasó nada así en todos los años que llevo de sindicalista, se me dificultó todo, la concentración y la actividad que llevo, no solo en Orense, sino en Madrid. Aseguró que no quiso «provocar» al regidor, sino que «me pareció oportuno para rebajar el conflicto dirigirme a él».
No es la primera vez que Pérez Jácome está en el candelero judicial. En octubre de 2021 la Fiscalía se querelló contra él por supuesta malversación continuada de caudales públicos por unos gastos de 100.000 euros. Un año más tarde, el Ministerio Público solicitó el sobreseimiento de la causa.