Condenado a 15 años por violar a una menor haciéndole creer que iba a darle trabajo
Tendrá que indemnizar con 30.156 euros a la adolescente y cumplir diez años de libertad vigilada al salir de prisión
Fachada del Tribunal Supremo | Carlos Luján (Europa Press)
El Tribunal Supremo ha confirmado una condena de 15 años de prisión a un hombre por violar a una joven de 15 años, a quien recogió en una estación de tren de Barcelona haciéndola creer que iba a darle trabajo como empleada de hogar.
La Sala de lo Penal ha dictado una sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, que rechaza el recurso del condenado contra la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que ratificó aquella de la Audiencia de Barcelona por un delito de agresión sexual a menor de 16 años y otro leve de apropiación indebida.
Además de la pena de prisión, el Supremo confirma la prohibición de comunicarse o acercarse a la víctima durante diez años, así como otros diez años de libertad vigilada al cumplir condena y 30.156 euros de indemnización a la joven.
Los hechos ocurrieron en agosto de 2016 cuando el condenado contactó a través de la web milanuncios.com con la menor, que entonces tenía 15 años, con el pretexto del anuncio que la chica había publicado buscando trabajo como empleada de hogar.
Así las cosas, creyendo y confiando la menor en todo momento que el condenado le estaba ofreciendo trabajo, accedió a mantener una entrevista con él el 14 de agosto. Ella acudió a la estación de tren, donde el condenado la recogió en su coche y le comentó que tenían que desplazarse a otra localidad donde residía la pareja de ancianos interesada en contratar sus servicios.
Sin embargo, cuando iban por la carretera, el hombre estacionó el coche en un descampado, sin edificaciones, activó el seguro de las puertas que cerró y en tono intimidatorio le dijo a la menor: «O me la chupas o te mato», mientras la agarraba con fuerza por la cabeza. Acto seguido, colocó a la menor en el asiento del copiloto y la violó, tras lo cual echó del coche a la chica, empujándola con violencia, y huyó del lugar no sin apropiarse de los objetos de la menor, entre ellos el DNI y la tarjeta de la Seguridad Social.
La víctima, que denunció ese mismo día, sufrió un estrés postraumático que requirió atención psicológica y psiquiátrica durante unos meses y esta vivencia tan traumática ha repercutido en el ámbito sexual «afectando a relaciones consentidas posteriores así como en su vida cotidiana, al tener miedo a salir sola».
En su recurso, el condenado insistió, como había hecho ya en el juicio, en un trastorno mental que padece como consecuencia de un accidente deportivo y que debido a ello no recuerda nada. Pero el Supremo subraya que los forenses «hicieron constar que lo recordaba todo y que las capacidades cognitivas y colectivas están totalmente conservadas y ha tenido relaciones extraconyugales con otras mujeres».
