Negreira amenazó al Barça con desvelar el «escándalo» y las «irregularidades» arbitrales
El exvicepresidente de los árbitros trató que Bartomeu reconsiderara su decisión de romper las relaciones con su empresa y le emplazó a un encuentro confidencial
El exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) y exasesor arbitral del F.C. Barcelona, José María Enríquez Negreira, remitió al expresidente del club Josep María Bartomeu una misiva en la que amenazaba «sin miramientos» con revelar las «irregularidades» existentes entre ambos tras conocer que la dirección blaugrana planeaba romper el acuerdo con su empresa. El texto asegura que una vez sacadas a la luz las actuaciones entre ambos se daría un «escándalo» que no beneficiaría al equipo.
El burofax, que ha sido desvelado en exclusiva por el diario El Mundo, es la última entrega de las investigaciones que pesan sobre Negreira, a quien la Justicia vigila por cobrar al menos 1,6 millones de euros del Barça en sólo dos años por supuestas «asesorías arbitrales» a través de su empresa Dasnil 95, S.L, una serie de informes verbales que han despertado las sospechas de los equipos de LaLiga ante posibles beneficios para la entidad culé sobre el terreno de juego.
«Mi sorpresa y decepción ha sido mayúscula», arranca el remite recibido por Bartomeu, a quien reprocha que «después de todo este tiempo juntos» consideraba que la decisión del club catalán de cortar el acuerdo comercial entre ambas partes tras tantos años de relación suponía «un insulto personal absolutamente injustificado» a ojos del exárbitro.
Negreira amenazó con denunciar
El escrito salta de la decepción a la amenaza: «Tengo la firme intención de cursar denuncia ante los juzgados, lo que seguro acarreará consecuencias negativas. Hasta ahora no he iniciado esas actuaciones para, justamente, evitar graves consecuencias, albergando la esperanza de llegar a un debido entendimiento en relación con mi pretensión». A ello añade una puntilla que, visto con el paso de los años, refleja lo que fueron los años de Bartomeu al frente del Barça: «No creo que otro escándalo favorezca al club».
Negreira retorna al agravio sentido y señala que los presidentes y expresidentes que precedieron al entonces mandatario habían suscrito tantos acuerdos con él que consideraba que existía «respeto y decoro» en las relaciones entre ambos, algo que —con este gesto destinado a recortar gastos para rescatar la maltrecha economía blaugrana— ya no se produciría tras sentir que su meta era «pisotear impunemente» sus «intereses y derechos».
A pesar de estas tensas reclamaciones y de la posibilidad de acudir ante la Justicia si no se atienden sus demandas, el excolegiado tiende la mano al equipo para poder zanjar la disputa sin necesidad de mediadores en los tribunales: «A pesar de ello, y pese a estar en mi derecho de poner en conocimiento de la autoridad de forma pública todo aquello que conozco y puedo acreditar y que contextualiza perfectamente el escenario en el que me he movido y relacionado con usted y con los anteriores presidentes, no quiero dejar pasar la oportunidad de llegar a un acuerdo justo para ambas partes».
Para ello reclama al expresidente que organice una cita privada entre ambos, «absolutamente confidencial» y que «por el bien de todos» permita cerrar la disputa. «Quedo a la espera de que me convoque en tal sentido con carácter urgente. Caso contrario, entenderé que usted no sólo me obliga sino que me provoca para hacer cuanto esté en mi mano en defensa de mis intereses, sin miramientos», espeta.
«Escándalo», «irregularidades»
La misiva no deja lugar a la interpretación. El propio Negreira admite y asume que sus actividades con el F.C. Barcelona causarían un gran revuelo en el fútbol español —aunque afirma que el «trabajo y los servicios prestados para ustedes ha sido intachable, ni la CNA ni la RFEF podrán reprocharle nada en este sentido— y defiende que, aunque está dispuesto a ponerlas en conocimiento de la Justicia para defender sus intereses, no tiene «voluntad de dar publicidad a todas las irregularidades que he conocido y vivido de primera mano en relación con nadie del club».
El texto recuerda que Bartomeu y Rosell —vicepresidente y presidente del club durante una época— pactaron con él el mantener las relaciones comerciales entre ambas partes al menos hasta que finalizara la actual presidencia.
Por el momento los juzgados investigan a Negreira por los pagos recibidos durante tres años por el club catalán. A pesar de la polémica suscitada por las últimas investigaciones y las publicaciones en los diferentes medios de comunicación —como la que compartimos hoy en THE OBJECTIVE, que demuestra cómo un alto cargo del Gobierno avaló los informes arbitrales del Barça que se encuentran investigados—, LaLiga ha anunciado a través de su presidente, Javier Tebas, que no podrán sancionar al equipo al haber prescrito el delito.