Begoña Gómez designó abogado la misma mañana en que la denunciaron ante la Justicia
La esposa de Sánchez presentó un poder especial para elegir letrado sin que se hubiesen abierto aún diligencias
Begoña Gómez designó abogado apenas unas horas después de que Manos Limpias interpusiera una denuncia contra ella. La esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó un poder especial para designar como letrado al exministro socialista Antonio Camacho a las 14.13 horas del 9 de abril, cuando el sindicato acababa de iniciar el pleito y sin que ni siquiera el juez Juan Carlos Peinado hubiese abierto diligencias de investigación, según consta en la documentación del sumario (secreto hasta el pasado lunes) al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.
El sindicato liderado por Miguel Bernad se personó en los Juzgados de Plaza de Castilla el 9 de abril, como evidencia el sello de registro de entrada del documento al que ha tenido acceso este diario. Según las fuentes consultadas, la denuncia se presentó entre las 10 y las 11 horas. Manos Limpias decidió acudir presencialmente ante los juzgados de Instrucción de Madrid ante «la inacción» de la Fiscalía para perseguir de oficio los hechos presuntamente delictivos desvelados por los medios de comunicación.
La denuncia de Manos Limpias se presenta a las 12.15 horas del 9 de abril, pero no se registra hasta el 15 de abril a las 12.37 horas. Se reparte al juzgado ese mismo día a las 12.57 horas, según ha podido comprobar THE OBJECTIVE en el registro de la Consejería de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid. Sin embargo, el mismo 9 de abril a las 14.13 horas se notificó telemáticamente el certificado de apoderamiento apud-acta por el que se otorgan los poderes de representación de Begoña Gómez a Camacho.
Camacho fue secretario de Estado de Seguridad y después ministro del Interior durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. No obstante, en ese momento solo se había registrado la denuncia, que todavía no había iniciado el procedimiento habitual: ni se había repartido por decanato ni se habían abierto diligencias. Para eso hubo que esperar siete días más, cuando el juez Peinado firma un auto que inicia las pesquisas.
Según indican fuentes judiciales, es materialmente imposible que Gómez pudiera haber recibido la notificación de la denuncia aquella misma mañana, por lo que si designó abogado pudo tratarse de una mera coincidencia o de que recibió algún tipo de chivatazo desde los juzgados y, acto seguido, decidió otorgar poderes a un letrado por lo que pudiera pasar.
Begoña Gómez, investigada
Begoña Gómez adquirió desde el inicio de la investigación la condición procesal de investigada, lo que antes se conocía como imputada. Un escenario que, tras muchos dimes y diretes, se ha conocido este martes, tras revelarse el sumario. La esposa del presidente está acusada de presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias. El magistrado ordenó que así se le notificara. La información llegó a La Moncloa el 24 de abril: se personó a las 15.43 horas y, poco después, a las 19.09 horas, Sánchez publicaba en sus redes su famosa «carta a la ciudadanía» en la que anunció que se tomaba un periodo de reflexión.
Solo unos días antes de la denuncia de Manos Limpias, el 5 de abril, Hazte Oír denunció a Begoña Gómez ante la Fiscalía. El ingreso tuvo lugar el día 8, pero el Ministerio Público no da traslado al informe hasta el 11. Esta asociación también llevó el caso de la esposa del presidente ante la Fiscalía Europea en esos días. En el escrito que registró la asociación figura una relación de informaciones publicadas en medios de comunicación en los que se relacionan los fondos públicos europeos con las adjudicaciones que recibió del ente público Red.es un empresario después de que la esposa de Sánchez firmara cartas de recomendación a su favor.
El empresario en cuestión es Carlos Barrabés, la persona que habría presentado a Begoña Gómez al CEO de Globalia, Javier Hidalgo, y creó la cátedra que dirige en la Universidad Complutense de Madrid. Barrabés está citado a declarar ante el juez Peinado en calidad de testigo el 7 de junio, dos días antes de que se celebren las elecciones europeas. Sin embargo, Camacho ha solicitado al juez que instruye el caso que suspenda temporalmente las declaraciones previstas para ese día y el anterior porque le coincide con un juicio en la Audiencia Nacional, aunque «no ha aportado ni una sola prueba documental que ratifique la imposibilidad de asistir a la cita».
Sin respuesta de la Fiscalía
«Esta acción legal que comunicamos es la primera de una serie de medidas que serán anunciadas en los próximos días», advirtió el portavoz de Hazte Oír, Miguel Tomás. «Ante las extrañas circunstancias que envuelven dicho proceso y al, como se ha publicado, haber conexión con fondos públicos europeos, la asociación cívica ha decidido dar un paso hacia adelante y poner tales hechos en conocimiento de las autoridades pertinentes», apuntó en un comunicado.
La asociación nunca recibió respuesta por parte del Ministerio Público. Las fuentes consultadas sospechan que «esto pudo propiciar que Begoña Gómez tuviese conocimiento de posibles causas judiciales y se mantuviese en alerta». Añaden que «resulta, cuanto menos sorprendente que, en la misma mañana en la que se registra la denuncia, sin haber sido ni siquiera sometida a reparto, ya esté presentado el poder para pelitos por parte denunciado». En España, concluyen, «los juzgados no operan con esa inaudita rapidez».
No fue hasta el 16 de abril cuando el juez Juan Carlos Peinado abrió diligencias contra Begoña Gómez por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias y la imputó. El magistrado ordenó que así se notificara a la esposa de Pedro Sánchez, según se desprende del sumario que ha estado bajo secreto hasta este lunes, aunque presuntamente la esposa del presidente del Gobierno podría haber tenido conocimiento previo dado que presentó el certificado apud-acta el mismo día en que fue denunciada.
«Carta a la ciudadanía»
Unos días más tarde, el 24 de abril, Sánchez publicó en redes sociales su famosa «carta a la ciudadanía», en la que anunció que se tomaba un periodo de reflexión de cinco días para decidir si seguía en el cargo. La misma jornada en la que el abogado de Gómez firma el escrito de personación, de lo que se infiere que el dirigente socialista sabía de la imputación de su pareja. Tras unas jornadas de expectación y una concentración de simpatizantes llegados desde todos los rincones de España ante la sede del PSOE en Ferraz, el presidente reveló que seguía «con más fuerza» y anunció que tomaría medidas contra la desinformación.
En su famosa misiva, Sánchez afirmaba que su mujer había sido víctima de «un ataque sin precedentes» a propósito de la causa abierta contra Begoña Gómez tras una denuncia de Manos Limpias. «Es tan grave y tan burdo que necesito parar y reflexionar con mi esposa», expuso entonces el jefe del Ejecutivo. En el texto añadía que decidiría en cinco días si «continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor». Finalmente, aludió al apoyo recibido por parte de sus fieles en las jornadas posteriores para continuar en la Moncloa, poniendo fin así a una crisis institucional inédita tras mantener en vilo al país durante esos cinco días. No obstante, el presidente ocultó que sabía que su esposa estaba imputada tras esa denuncia.