La Justicia catalana aplica la amnistía por primera vez: Buch y el exescolta de Puigdemont
El Tribunal Superior de Cataluña toma esta decisión tras deliberar este martes la aplicación de esta norma
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha acordado hoy aplicar por primera vez la amnistía a algunos condenados por el ‘procés’. Entre los perdonados están el exconseller de Interior Miquel Buch y a Lluís Escolà, el exescolta del expresidente catalán Carles Puigdemont, que se han beneficiado así de esta norma.
Así lo ha decidido la sala de apelaciones del alto tribunal catalán, que este martes se ha reunido para deliberar si aplicaba la ley de amnistía a varias causas vinculadas al ‘procés’. Entre ellas estaba la que condenó, por malversación y prevaricación, a cuatro años y medio de cárcel y 20 de inhabilitación a Buch, por fichar como asesor al exsargento de los Mossos Lluís E. para que siguiera prestando protección a Puigdemont tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución y su huida de España.
En el caso del exconseller, la Sala declara la extinción de su responsabilidad penal y de la responsabilidad civil derivada de sus actos, que quedan anuladas, y ha declarado de oficio las costas procesales. Además, la sentencia asegura que «de igual modo se cancelarán cuantos registros, anotaciones y antecedentes, incluidos los policiales, se hayan llevado a cabo exclusivamente en virtud de los actos expresamente amnistiados».
La sentencia, que condenaba a Buch a cuatro años y medio, también lo condenaba a nueve años y medio de inhabilitación por un delito de prevaricación y por el delito de malversación le imponía (además de la pena de prisión) otros 10 años y medio de inhabilitación.
A Escolà se le fijaba una inhabilitación de 10 años por un delito de malversación, –además de los cuatro años de cárcel–, y también fue condenado como cooperador necesario del delito de prevaricación, por el que la sentencia establecía una condena de nueve años de inhabilitación.
Entre Buch y Escolà tenían que indemnizar a la Generalitat con 52.712 euros, la misma cantidad que se dedicó a pagar los salarios de Escolà como asesor de la Conselleria de Interior. En la sentencia, los jueces consideraron probado que Escolà acompañó a Puigdemont hasta Bélgica y que encadenó bajas médicas, vacaciones y libranzas para escoltar al expresidente en su tiempo libre.
En julio de 2018, Escolà fue nombrado asesor de Buch, y la sentencia afirmaba que ambos eran «conscientes de que dicho nombramiento no tenía por objeto real, sino dar cobertura remuneratoria a la función de protección personal y de seguridad» para el expresidente.
En el juicio, celebrado en julio, la Fiscalía pidió una condena de seis años de prisión y 27 de inhabilitación para Buch y cuatro años y medio de cárcel y 23 de inhabilitación para Escolà, aunque las defensas reclamaron la absolución.