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La extraña relación previa entre Aldama y el ex 'número dos' de Puertos del Estado

El comisionista de la ‘trama Koldo’ le pidió información relacionada con una empresa de fertilizantes

La extraña relación previa entre Aldama y el ex ‘número dos’ de Puertos del Estado

Álvaro Sánchez Manzanares.

La relación entre Álvaro Sánchez Manzanares, exsecretario general de Puertos del Estado, y el comisionista Víctor de Aldama comenzó antes de la pandemia, según la declaración que el exdirectivo hizo este miércoles ante el juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno. Manzanares explicó que conoció a Aldama «unos meses antes» del inicio de la crisis sanitaria. En su testimonio, el ex alto cargo, quien tiene una estrecha relación con el exministro de Transportes José Luis Ábalos, señaló que el primer contacto con Aldama se produjo cuando este le pidió información relacionada con una empresa de fertilizantes. Sin embargo, Manzanares no ha ofrecido mayores detalles sobre la naturaleza de esta relación.

A lo largo del interrogatorio, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 dirigió su atención a los contratos firmados durante la pandemia, específicamente aquellos vinculados a la adquisición de mascarillas. En el centro de la investigación se encuentra la empresa Soluciones de Gestión. Esta empresa es clave en el caso, ya que los contratos suscritos con ella son el núcleo de las sospechas sobre irregularidades.

Álvaro Sánchez Manzanares, que ha testificado en calidad de investigado, no ha tardado en señalar indirectamente al exministro Ábalos durante su declaración. Aunque Manzanares se cuidó de no implicarlo directamente, dejó entrever que la decisión de contratar con la empresa Soluciones de Gestión fue tomada bajo las órdenes de sus superiores en el Ministerio de Transportes, que en aquel momento estaba bajo la dirección de José Luis Ábalos. Según el relato de Manzanares, la contratación de Soluciones de Gestión para la compra de mascarillas durante la pandemia no fue una decisión aislada o autónoma por su parte, sino que respondía a instrucciones que provenían de niveles superiores en la cadena jerárquica.

Por otro lado, también se le ha preguntado por su relación con el exasesor de Ábalos, Koldo García, y según las fuentes habría dicho que le conoció en esa época, que tuvo un papel importante en la gestión de esos contratos y que tenía protagonismo.

Sobre Aldama, Sánchez Manzanares ha indicado que desconocía qué papel tenía, pero ha defendido que mantenía correos electrónicos con ambos porque eran personas implicadas en la gestión de la compra de mascarillas y entendía que tenía que reportarles también.

En la declaración de este miércoles han estado presentes tanto las defensas de los investigados como las acusaciones populares, entre las que se encuentra Hazte Oír, el partido político Vox, Liberum o Iustitia Europa.

La UCO estrecha el cerco

Por otro lado, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, encargada de la investigación del caso Koldo, ha elaborado un detallado informe que será remitido próximamente a la Fiscalía Anticorrupción y que incluye una serie de pruebas que implicarían al exministro José Luis Ábalos en una supuesta trama de corrupción. Según pudo saber este periódico, dicho informe demuestra de manera clara la participación de Ábalos en el «cobro de comisiones».

Los agentes de la Guardia Civil involucrados en el caso no albergan dudas acerca de la gravedad de las pruebas reunidas, tal y como ha adelantado THE OBJECTIVE. De hecho, consideran que el contenido del documento es lo suficientemente sólido como para justificar que se eleve una exposición razonada ante el Tribunal Supremo, solicitando formalmente la imputación del que fuera número tres del PSOE y ministro de Transportes del Gobierno de Pedro Sánchez.

Las mismas fuentes subrayan que el informe de la UCO, por su nivel de detalle, proporciona indicios suficientes para sustentar esa solicitud ante el Alto Tribunal, ya que supuestamente demuestra «con pruebas» cómo determinadas empresas pagaron mordidas a Ábalos a cambio de favores del ministro.

El cerco, pues, se estrecha sobre José Luis Ábalos, conocido entre algunos de los involucrados en el caso Koldo como el «súper jefe», según los mensajes que los investigadores presuntamente han interceptado en el marco de la investigación. Este nuevo informe, que involucra directamente al exministro de Transportes, ha sido elaborado tras un minucioso análisis del material incautado durante todas las entradas y registros practicados en febrero de este año, cuando estalló la operación.

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