Absuelven a los activistas que rociaron con pintura la fachada del Guggenheim de Bilbao
El objetivo de los miembros de ‘Futuro Vegetal’ era denunciar el proyecto de construcción de un museo en Urdaibai
Activista de Futuro Vegetal junto a la entrada del Museo Guggenheim. | Europa Press
La Audiencia Provincial de Vizcaya ha absuelto a dos activistas del grupo ecologista ‘Futuro Vegetal’, quienes habían sido previamente condenados a pagar una multa de 90 euros y 400 euros al Museo Guggenheim de Bilbao, tras una protesta en la que lanzaron pintura lavable en la entrada de la pinacoteca.
En febrero, los activistas Luna Lagos y Bilbo Bassaterra vaciaron un extintor lleno de pintura roja frente al museo, en señal de protesta por un proyecto de ampliación que afectaría la reserva natural de Urdaibai, en Busturialdea, Vizcaya. La acción buscaba llamar la atención sobre los posibles daños ambientales que podría causar dicha expansión.
La Audiencia de Vizcaya ha considerado el recurso presentado por los activistas, revocando la condena inicial. La sentencia ha destacado que el uso de pintura lavable no constituye un delito de daños, lo que ha resultado en la absolución de Lagos y Bassaterra. ‘Futuro Vegetal’ ha expresado que esta resolución reconoce la legitimidad de sus métodos de protesta pacífica y visual.
El Museo Guggenheim había denunciado a los activistas tras el incidente, argumentando daños a su propiedad. Sin embargo, la protesta tuvo un efecto notable, ya que días después, el controvertido proyecto de ampliación fue paralizado debido a su impacto ambiental evaluado.
Desde ‘Futuro Vegetal’, se ha valorado este fallo como un avance significativo para la causa ecologista. El grupo, que enfrenta varios procedimientos legales por acciones similares, ve en esta absolución un precedente importante para futuras protestas. Este caso subraya la creciente consideración del impacto ambiental en las decisiones judiciales y la defensa del activismo climático en el ámbito legal.
