Aldama aporta pruebas sobre supuestos amaños de adjudicaciones de obra pública
El empresario entrega en el Supremo una nota manuscrita de Koldo García sobre licitaciones a empresas de la trama

El empresario Víctor de Aldama este lunes a su salida del Tribunal Supremo. | Mariscal (EFE)
Víctor de Aldama vuelve a disparar contra el Gobierno. El empresario ha aportado pantallazos de Whatsapp y notas manuscritas de Koldo García sobre supuestas operaciones amañadas durante su declaración de este lunes en el Tribunal Supremo. De esa forma intenta demostrar la adjudicación de contratos de obra pública a las empresas de la trama y desmontar la tesis del exministro José Luis Ábalos, que el pasado jueves rechazó haber cobrado mordidas. Durante su declaración, de casi tres horas, ha confirmado las revelaciones que realizó en la Audiencia Nacional y que señalan a diferentes miembros del PSOE.
Las fuentes jurídicas consultadas por THE OBJECTIVE afirman que Aldama ha rebatido los argumentos de Ábalos, que la semana pasada negó ante el juez haber recibido comisiones y que adjudicara a empresas amigas. Durante su declaración descargó cualquier responsabilidad en su antiguo asesor, Koldo García, en quien afirmó haber delegado ciertas labores, como la búsqueda de mascarillas durante la pandemia. El comisionista de la trama también le ha apuntado a él directamente.
Las primeras acusaciones de Aldama apuntaron a Ábalos, al que acusa de cobrar comisiones a cambio de adjudicaciones públicas. El exministro lo negó el jueves, durante su declaración voluntaria en el Supremo. Un día antes, el actual titular de Transportes, Óscar Puente, aseguraba en el Congreso que 18 de las 37 obras que denunció el comisionista siguen sin licitar y que solo seis lo hicieron en la época del antiguo número tres del PSOE. Un informe elaborado por Adif también descarta irregularidades.
Aldama responde a Ábalos
En la documentación que aportó al Supremo, Aldama incluyó el contrato de alquiler con opción a compra de un piso que iba a traspasarle como garantía para que contratara a ciertas empresas, aunque no se ejecutó. El empresario ha mantenido la mayor en la declaración de este lunes, después de que Ábalos sostuviera que en ningún caso se trató de una contraprestación para adjudicar contratos a firmas amigas.
Aldama aseguró el jueves en el programa Horizonte de Cuatro que Ábalos «ha dicho lo que tenía que decir» y aseguró que le respondería en el Supremo. «Se van a poder desmontar un poco más las mentiras de este señor que, al final, se atribuyen a este Gobierno porque, no nos olvidemos, este señor era el número dos del presidente [Pedro] Sánchez». El comisionista de la trama también ha confirmado sus acusaciones sobre la entrega de 15.000 euros al secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán.

Otro sobre los que ha cargado tintas ha sido Carlos Moreno, el jefe de Gabinete de María Jesús Montero. Aldama ha detallado los encuentros que tuvo con el hombre de confianza de la ministra de Hacienda, que hasta hace apenas una semana negaba. La vicesecretaria general del PSOE llegó a asegurar que pondría «la mano en el fuego» por él porque trata de «una persona honorable» y un «magnífico servidor público». El comisionista de la trama Koldo ha asegurado que Moreno le pidió un piso como contrapartida por conseguir que la Agencia Tributaria evitara el embargo de una de sus empresas, Pilot Real Estate.
El comisionista desveló el 21 de noviembre que había pagado 650.000 euros al exministro, 250.000 por las comisiones de las mascarillas, y otros 300.000 euros a su asesor. También señaló al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que, según su versión, pidió verle para darle las gracias «por todo lo que estaba haciendo». Aldama explicó que dio 15.000 euros a Cerdán y otros 25.000 a Moreno, tesis en las que se ha mantenido. Unas acusaciones que llevó a los socialistas a interponer una demanda de conciliación previa a la querella.
La deuda de Pilot
Días después de que Aldama tirara de la manta y abandonara la prisión (donde se encontraba por el fraude de la trama hidrocarburos), Montero rechazó en el Senado sus acusaciones. Incluso aseguró que ponía «la mano en el fuego» tanto por Cerdán como por Moreno. «Compre pomada porque se va a quemar la mano por su jefe de Gabinete», le amenazó el comisionista en una entrevista en La W Radio Colombia. Las fuentes consultadas sostienen que el empresario tiene pruebas comprometedoras del hombre de confianza de la dirigente sevillana.
Moreno habría recibido la presunta mordida por hacerle «el favor» de aplazar un embargo de la empresa Pilot Real Estate, que debía casi un millón de euros a la Agencia Tributaria. «Antes de hacer ningún movimiento, él tiene que hablar con su jefa, que es la ministra Montero, y que, si ella autoriza, pues que hacen el movimiento», relató Aldama en la Audiencia Nacional. Meses más tarde, Koldo García le habría dicho en una comida que tendría que «tener un detalle con Carlos, que está buscando un piso y tal».
En la documentación que aportó al Supremo, Aldama indica que contactó con Moreno porque este le pidió que «le facilitara oportunidades de inmuebles» porque «quería adquirir uno con su pareja, comenzando una relación de interés». Para probarlo, el comisionista incluyó como prueba de la relación una tarjeta de visita del colaborador de Montero. No obstante, él mismo reconoce que nunca ofreció esa oportunidad.
El jefe de Gabinete de Montero habría cancelado una hipoteca el 21 de noviembre, el día que Aldama le señaló en la Audiencia Nacional. Como avanzó Vozpopuli, el inmueble se vendió el 23 de septiembre, solo dos semanas antes de que el comisionista fuese detenido por un presunto fraude de 182 millones de euros en el sector de los hidrocarburos, por el que pasó mes y medio en prisión. En marzo, Moreno se habría comprado un chalé en Cádiz con dinero «ajeno al matrimonio», según informó El Debate.