La UCO señala que la testigo que llevó el dinero de Ferraz hacía de 'mula' entre Aldama y Rivas
Carmen Pano relató en exclusiva a THE OBJECTIVE cómo trasladó una suma de 90.000 euros a la sede del PSOE
Carmen Pano, la testigo de TO.
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil corrobora el papel de Carmen Pano en la trama relacionada con los hidrocarburos, una de las piezas clave del caso que ha revelado información comprometedora acerca de las gestiones llevadas a cabo por varios implicados en un intento de obtener beneficios a través de la manipulación de licencias de operadora de combustible. En su informe, la UCO confirma que Pano, que previamente relató en exclusiva para THE OBJECTIVE cómo trasladó una suma de 90.000 euros a la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), desempeñaba una función crucial como intermediaria entre Víctor de Aldama, comisionista implicado en la trama, y su socio, Claudio Rivas, empresario vinculado al sector de los hidrocarburos.
Según las investigaciones de la Guardia Civil, Carmen Pano actuaba como una especie de mula que facilitaba los pagos entre Rivas y Aldama, es decir, transportaba el dinero de un lado a otro, sin estar directamente involucrada en las negociaciones de alto nivel, pero asegurándose de que los fondos llegaran a su destino. Esto se confirma mediante el análisis de los teléfonos móviles incautados durante la investigación, cuyos mensajes demuestran que la empresaria era utilizada como vehículo para realizar los pagos a Aldama por parte de Rivas, siempre en el contexto de la obtención de una licencia de operadora para la empresa Villafuel SL. «Los mensajes pondrían de manifiesto que desde el entorno de Claudio (Rivas) se habría producido un pago a Aldama por medio de Carmen Pano», remarca el informe de la Guardia Civil.
La relación entre los pagos y la licencia de operadora es fundamental para entender la trama, ya que la licencia permitía a Villafuel SL actuar en el mercado de hidrocarburos sin tener que pagar el IVA, lo que representaba un beneficio económico significativo. A través de un sistema de ventas en el que se compraba combustible sin el gravamen de IVA y se vendía añadiendo el impuesto correspondiente, los implicados en el fraude lograban un enriquecimiento de hasta el 21% sobre el precio de la transacción comercial. Así lograron defraudar 182 millones de euros.
La función de cada uno en la trama de los hidrocarburos era la siguiente: Claudio Rivas puso el dinero; Aldama hizo de nexo con Koldo García y José Luis Ábalos, y estos últimos –a cambio de una comisión– facilitaron que el Gobierno les concediera una licencia de operadora. Tal y como publicó este medio y ha corroborado la UCO, las negociaciones en torno a la obtención de la licencia de operadora para Villafuel SL comenzaron en septiembre de 2020, cuando Aldama y otros miembros del entramado se reunieron en un encuentro que tuvo lugar en el despacho del «nexo corruptor» en la calle Alfonso XII de Madrid.
En esa reunión estuvo presente Koldo García, quien, según las investigaciones, actuó como intermediario entre los comisionistas y el Gobierno. La función del entonces asesor de José Luis Ábalos consistía en poner en contacto a los implicados con los ministerios que tenían la capacidad de conceder las licencias. Esto incluía el Ministerio de Industria, dirigido por Reyes Maroto, y el Ministerio para la Transición Ecológica, encabezado por Teresa Ribera.
Los pagos en metálicos
Koldo García se comprometió a «echarles una mano» mediando con los dos ministerios responsables de conceder las licencias pero, a cambio, «eso iba a costar algo». En total, solicitaron 600.000 euros y un chalé para Ábalos en la urbanización La Alcaidesa, en Cádiz. Los fondos se fueron entregando en varias cantidades en consonancia con las gestiones que iban realizando el exministro de Transporte y su asesor con el Ejecutivo. En octubre se hicieron dos entregas de 45.000 euros cada una en la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid. Estos pagos, como indica la UCO en su informe, fueron fundamentales para asegurar que las gestiones con el Gobierno continuaran avanzando y que los implicados pudieran obtener lo que buscaban: la concesión de la licencia que les permitiría operar en el mercado de los hidrocarburos de forma ilegal y obtener ganancias a través de la manipulación fiscal.
Unas semanas antes de que Koldo gestionara un encuentro con el entonces jefe de gabinete de Reyes Maroto, Juan Ignacio Díaz Bidart, en la sede del Ministerio de Industria, se produjo otra entrega, tal y como confirma la UCO en un informe. «Estos mensajes pondrían de manifiesto que desde el entorno de Claudio se habría producido un pago a Aldama por medio de Carmen Pano en virtud de la consecución de la entrevista solicitada. Este extremo se vería confirmado cuando el día anterior, 27 de diciembre de 2020 a las 23.34 horas, Aldama preguntaba a Leonor a qué hora iba a ir su madre, a lo que Leonor contestaba que Carmen llamaría a Aldama por la mañana, entendiéndose la mañana del 28. A continuación, añadía ‘Que en cuanto tenga lo que tiene que tener se va para tu oficina‘».
Así, añade el citado informe: «La relación causa-efecto entre las gestiones solicitadas por Aldama y las contrapartidas obtenidas por Koldo y Ábalos, se aprecia en este caso aún más evidente. Ábalos disfrutó de una vivienda, en este escrito referida como «la casa de La Alcaidesa», que guarda una vinculación directa con las adjudicaciones públicas a Soluciones de Gestión y con las gestiones de habilitación como operadora a la empresa Villafuel». Y concluye: «Aldama habría aprovechado el interés de Claudio en obtener el título de operador, consiguiendo que éste corriera con los gastos derivados de su adquisición».
La implicación de Carmen Pano como intermediaria en la trama de los hidrocarburos fue clave para el flujo de dinero entre los diferentes actores del caso. A través de su rol como mula de pagos, permitió que las gestiones de Aldama con los ministerios, y la posterior obtención de licencias, se llevaran a cabo con la financiación necesaria. El análisis de los teléfonos móviles y los mensajes incautados ha proporcionado detalles precisos sobre cómo se realizaron los pagos y cómo se vinculaban a las gestiones de miembros del Gobierno.
