La fiscal investigada por la filtración del novio de Ayuso tenía anotaciones de «Begoña Gómez»
González Amador quiere conocer la fecha en que se designó fiscal para el caso de la esposa del presidente del Gobierno
El nombre de Begoña Gómez aparece en la agenda de la fiscal jefe de Madrid durante los días claves de la filtración por la que le investiga el Tribunal Supremo. Así lo certifica una nota que encontraron los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil durante el registro del despacho de Pilar Rodríguez el pasado 30 de octubre. Ella y su jefe, Álvaro García Ortiz, están imputados por un presunto delito de revelación de secretos. La denuncia partió del novio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Tras las últimas revelaciones, Alberto González Amador ha solicitado al juez nuevas diligencias, entre ellas ampliar la fecha del volcado de sus teléfonos y conocer la fecha en que se designó fiscal para el caso de la esposa de Pedro Sánchez.
En un escrito al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, González Amador pide al magistrado que requiera a la UCO información de las líneas telefónicas usadas por Rodríguez, García Ortiz y su lugarteniente en la Fiscalía General del Estado, Diego Villafañe, al que pide imputar. Una reclamación que ya realizó el pasado 12 de diciembre sin éxito. La defensa del novio de Ayuso vuelve a la carga tras las declaraciones de los testigos y después de que se haya levantado el secreto de las actuaciones, que han destapado que la imputada tenía en su agenda anotaciones sobre Begoña Gómez, investigada por cuatro delitos.
Los agentes de la UCO que registraron el despacho de Rodríguez incluyeron en el acta de entrada un post-it incluido en su agenda en los días clave de la filtración. Se trataba de una nota manuscrita en el que se leía: «Restaurante Manuel Becerra, Begoña Gómez». El nombre coincide con el de la esposa del presidente del Gobierno, aunque no hay constancia de que Rodríguez y ella se vieran en el citado local.
El fiscal del caso Begoña Gómez
«Por parte de Dña. Pilar Rodríguez Fernández se quiere precisar en este acto que el post-it adherido al documento número 1 en el que aparece anotado Restaurante Manuel Becerra y debajo una línea el nombre de Begoña Gómez Fernández se trata de un apunte a fin de interesar a los fiscales instructores que en la primera anotación se refiere a que debe darme cuenta de una incidencia en el restaurante que fallecieron varias personas y la segunda anotación a fin de que le dieran cuenta del procedimiento en el que estaba inmersa la señora Begoña Gómez», especifica el acta de la UCO.
González Amador reclama al juez que requiera a la Fiscalía Provincial de Madrid la fecha en la que fue designado el fiscal del procedimiento que sigue el Juzgado de Instrucción número 41 contra Begoña Gómez desde el pasado 16 abril. También pide conocer su identidad, así como una copia del decreto o resolución. Cabe destacar que Rodríguez sería la superior directa de este miembro del Ministerio Público.
El objetivo de la defensa del novio de Ayuso es determinar si Rodríguez pudo haber tenido algún trato de favor con la esposa del presidente del Gobierno, ya que un mes antes de que se le imputara «no podía existir fiscal que diera cuenta del procedimiento, por no existir tal procedimiento». El escrito señala que, por tanto, las manifestaciones de la fiscal jefe de Madrid «serían falsas».
Rodríguez y García Ortiz están siendo investigados por el Supremo por la filtración de datos privados del novio de Ayuso. Un fiscal del Alto tribunal denunció que vio al fiscal general «revisando» su teléfono el pasado 30 de octubre, mientras los agentes de la Guardia Civil registraban la sede del Ministerio Público. La explicación que ofreció la Fiscalía es que los datos se eliminan de forma periódica: se hace un borrado cíclico del contenido de los dispositivos por razones de seguridad.
Recuperar los mensajes
El volcado del teléfono de García Ortiz reveló que existían «cero mensajes» en su terminal entre el 8 y el 14 de marzo, los días clave en los que habría tenido lugar la filtración de datos del novio de Ayuso. Un informe de la Guardia Civil demuestra que se borraron, ya que el análisis de otros terminales incautados constata que existieron conversaciones con diferentes subordinados, entre ellos Rodríguez. El juez solicitó el pasado martes a los agentes que traten de recuperar esos mensajes.
En un informe posterior, la UCO determinó que García Ortiz habría cambiado de teléfono móvil el pasado 23 de octubre, como sugerían los fiscales consultados por este diario como motivo de que no aparecieran sus mensajes. Esa fecha coincide con la semana en la que el Supremo imputó al fiscal general por una presunta revelación de secretos. La Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF), que ejerce la acusación popular en la causa, solicitó al juez diligencias para saber si el imputado había renovado su terminal tras la filtración.