Archivada la querella contra el alcalde de Soria por ir en papamóvil y bendecir con una escobilla
La Audiencia «no advierte intención de ofender, herir o perturbar los sentimientos religiosos»

El secretario general electo del PSOE en Castilla y León y alcalde de Soria, Carlos Martínez | C. Serrano (Europa Press)
La Audiencia de Soria ha decidido archivar la querella presentada por Abogados Cristianos contra el secretario general electo del PSOE en Castilla y León y alcalde de Soria, Carlos Martínez, por participar en un desfile festivo a bordo de lo que simulaba ser un ‘papamóvil’ y repartir «bendiciones» con una escobilla de baño.
La Audiencia da la razón a la Fiscalía que había presentado ante este órgano un recurso de apelación en el que pedía el archivo de las actuaciones que había iniciado la magistrada del Juzgado de Instrucción 4 de Soria, una petición a la que se había sumado la defensa del alcalde.
Por su parte, Abogados Cristianos consideraba que estos hechos eran constitutivos de un delito de escarnio y contra los sentimientos religiosos. Según han informado a EFE fuentes judiciales, la Audiencia considera que no existe ningún indicio de que se haya producido un delito y da por cerrada la causa. No obstante cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo en el plazo de 5 días.
En el auto, al que ha tenido acceso EFE, la Audiencia indica que «no se advierte nada que apunte a una intención de ofender, herir o perturbar los sentimientos religiosos» y recuerda que «tampoco se desarrolla en un lugar destinado a culto ni se interrumpe servicio alguno».
Y añade: «No negamos que la pretensión de la parte que pretende constituirse como querellantes se hayan sentido sinceramente ofendidos. Sin embargo, lo que debemos rechazar aquí es que la conducta enjuiciada sea objetivamente ofensiva, al menos en el sentido reforzado que exige el tipo penal».
Los hechos se remontan a mediados del mes de agosto, en medio de las fiestas de la localidad de Tardelcuende a las que Martínez asistió como invitado y fue captado en un vídeo en el que aparecía subido en el techo de un vehículo bendiciendo a los vecinos con una escobilla de baño.
El vídeo generó duras críticas de la oposición que incluso llegó a pedir su dimisión, calificando su actuación como «intolerable e indignante». El alcalde de Soria pidió disculpas por lo sucedido, dijo que no quiso ofender a nadie y aseguró que fue multado por la Guardia Civil con una sanción administrativa de 100 euros, que ya fue abonada.