La Fiscalía investiga al exlíder de Vox en Valencia por los contratos revelados por TO
El ministerio público incoa diligencias contra Juanma Badenas por cuatro presuntos delitos del Código Penal
Juanma Badenas, exlíder de Vox en Valencia. | Foto: EP
La Fiscalía Provincial de Valencia ha acordado incoar diligencias de investigación contra el exconcejal de Vox en el Ayuntamiento de Valencia Juan Manuel Badenas por los contratos gestionados desde la fundación municipal Valencia Activa a favor del Instituto Mediterráneo de Desarrollo Sostenible (Imedes), la empresa en la que es directivo Javier Cebrián, marido de la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, tal y como desveló THE OBJECTIVE.
Los portavoces municipales del PSOE valenciano, Borja Sanjuán, y de Compromís, Papi Robles, llevaron a la Justicia las informaciones de este periódico y ahora la Fiscalía ha determinado que los hechos denunciados, sin perjuicio de una ulterior calificación, «podrían ser constitutivos de un delito de prevaricación previsto en el art. 404, malversación del art. 432, negociaciones prohibidas a funcionarios públicos del art. 439 y falsedad documental de los arts. 395 y 395, todos ellos del Código Penal».
Por tanto, acuerda practicar «cuantas actuaciones sean necesarias» para determinar los hechos denunciados, «sin perjuicio de que a lo largo de la investigación las diligencias puedan ser asumidas por la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la criminalidad organizada».
Vox inhabilitó a Badenas por la adjudicación de unos contratos, por lo que actualmente está fuera del equipo de gobierno aunque se mantiene como concejal no adscrito. El exedil de Vox llegó a confesar el pasado 13 de marzo en una rueda de prensa que adjudicó un contrato antes de cerrarse los trámites del Portal de Contratación del Sector Público. «La conversación grabada se refiere al día 30 de julio del año 2024, exactamente seis días después de que el día 24 de julio de ese mismo año el Instituto Imedes fuera declarado adjudicatario en el expediente de Valencia Activa», aseguró ante los medios en su segunda comparecencia desde que estallase la polémica tras las exclusivas de THE OBJECTIVE.
Sin embargo, este argumento no se sostiene según los procedimientos de la contratación pública. La adjudicación no se produce en el momento en que se publican las puntuaciones de los aspirantes, sino tras un periodo obligatorio de diez días hábiles en el que la empresa con mayor puntuación debe presentar la documentación requerida y los licitadores que no resultan elegidos pueden impugnar el proceso. Todo ello está incluido en los artículos 150 y 151 de la ley de Contratos del Sector Público que se aprobó en 2017.
Cuando Badenas preguntó «¿Ya está adjudicado lo de Imedes?» a sus subordinados en la cita del 30 de julio, el procedimiento aún estaba en fase de alegaciones y revisión. Por lo tanto, no estaba concluida la adjudicación. Su impaciencia por cerrar la licitación antes de que el proceso hubiera concluido evidencia una irregularidad y revela su interés en que la consultora de Javier Cebrián, marido de Bernabé, se hiciera con el contrato sin más dilación.
No era la primera vez. Dos meses antes, Badenas ya había favorecido a Imedes al otorgarle a dedo la comunicación del Organismo Autónomo de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Valencia, un servicio que nunca había sido externalizado y que siempre había dependido directamente del gabinete de prensa del consistorio. Además, en marzo del año pasado bloqueó una primera licitación de la campaña de publicidad de la fundación Valencia Activa, con el fin de lanzar luego en julio el pliego amañado que garantizase la adjudicación a favor de Imedes, tal y como desveló este periódico.
La paralización de la primera de las licitaciones provocó un terremoto interno dentro de la concejalía de Badenas que se saldó con la dimisión de la entonces gerente de Valencia Activa, Isabel Rubio, quien a los pocos días fichó como directora general de Relaciones Institucionales de la alcaldesa, María José Catalá. Meses después se produjo el despido de la directora de Comunicación de la fundación por no validarla. En un audio desvelado por THE OBJECTIVE, el vicealcalde confesó que veía a la citada ‘dircom’ como un obstáculo para sus planes: «Hay que quitarla porque es una persona que está pasando la información a los otros», les advirtió a los directivos de la fundación con los que se reunió antes de las vacaciones de agosto. El despido se produjo a las pocas semanas.
Las grabaciones publicadas por TO
Otro giro de guion se ha producido con las grabaciones de este periódico. El pasado 5 de marzo reconocía la existencia de las mismas y anunciaba una querella por su difusión «ilegal». Es decir, admitía implícitamente el contenido de los audios. Luego, por contra, ha intentado desacreditarlos asegurando que podrían ser unos cortes de audio falsos. «Las grabaciones publicadas por THE OBJECTIVE son ilícitas y forman parte del mismo montaje, son parciales e incompletas, sacadas de contexto, si es que se trata de una grabación real y auténtica, cosa que yo mismo pongo en duda», dijo a mediados de marzo. Este diario cuenta con el audio completo de la reunión, que dura más de 37 minutos.
El intento de Badenas por desmarcarse de la polémica lo ha llevado a un callejón sin salida, en opinión de fuentes municipales. Si la grabación es «ilícita», como él mismo aseguró el 4 y 5 de marzo, significa que existe y es auténtica. Sin embargo, ahora pretende sembrar dudas sobre su veracidad, cayendo en un discurso que se anula a sí mismo. Pero las incoherencias no acaban ahí.
En su primera rueda de prensa a principios de marzo, Badenas no solo asumía la existencia de la grabación, sino que también admitía su participación en la conversación filtrada, en la que mostraba una evidente impaciencia por la adjudicación arbitraria de un contrato de Valencia Activa a Imedes. Favoreciendo, de este modo, a una empresa sin importar los principios de imparcialidad, transparencia e integridad que deben regir cualquier proceso de contratación pública. La transcripción de la conversación es reveladora:
— Badenas: «¿Ya está adjudicado lo de Imedes?»
— Directiva de Valencia Activa: «A Imedes ya se ha hecho la propuesta de adjudicación. Se ha requerido la documentación y ahora tenemos que firmar el contrato»
— Directivo de Valencia Activa: «Imedes… ¿Tú los conoces? Sí, yo los conozco. Nos han dicho que son socialistas»
— Badenas: «Precisamente por eso. Así no tengo ningún problema»
La forma en la que Badenas preguntaba ya anticipaba que el contrato sería para Imedes, como si el trámite fuera una simple formalidad, constatan las citadas fuentes. Saltándose cualquier principio de equidad, dejaba claro que la adjudicación estaba decidida de antemano y que su único criterio era la vinculación política de la empresa beneficiada.
La estabilidad en Valencia
Este vaivén de versiones no solo afecta a su credibilidad, sino que hunde aún más la estabilidad del Ayuntamiento de Valencia. Badenas, que intenta ahora presentarse como víctima de una conspiración, parece más bien el protagonista de un escándalo que amenaza con dinamitar el frágil equilibrio político municipal. Con su salida de Vox sin renunciar al acta, Badenas se ha convertido en un actor clave en el Ayuntamiento. Actualmente, el PP gobierna con 13 concejales y necesita apoyos externos para garantizar la gobernabilidad. La postura de Badenas y su pareja, la también exconcejal de Vox Cecilia Herrero, es determinante para las votaciones municipales.
Por su parte, María José Catalá insiste en que el problema es de Vox y no suyo, pero la realidad es que su gobierno pende de un hilo. Mientras tanto, desde la oposición, el PSPV ha exigido que la alcaldesa se someta a una cuestión de confianza y Compromís ha descartado, por el momento, una moción de censura.
