ADIF pagó un sobrecoste de 20.000 euros por el contrato de Jésica en Ineco
La empresa pública de infraestructuras ferroviarias abonó casi 60.000 euros por su labor como administrativa

Jésica Rodríguez, la expareja de José Luis Ábalos que trabajó en Ineco. | Ilustración de Alejandra Svriz
Ineco hizo caja con los servicios de Jésica Rodríguez. La empresa pública de ingeniería consiguió un beneficio de 20.372 euros gracias a la estudiante de Odontología, que durante dos años estuvo adscrita a sendos proyectos de ADIF. El administrador de infraestructuras ferroviarias pagó por su labor como administrativa 59.616 euros, según la documentación a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. No obstante, la expareja de José Luis Ábalos tuvo un coste de solo 39.272 euros para el ente que entonces presidía Carmen Librero. La joven reveló el pasado febrero al juez del Tribunal Supremo que investiga al exministro que cobraba sin acudir a trabajar.
Jésica Rodríguez trabajó en Ineco desde marzo de 2019 a febrero de 2021. Durante ese tiempo estuvo adscrita a Presidencia de ADIF, por lo que dependía directamente de Isabel Pardo de Vera. El juez del caso Koldo en la Audiencia Nacional ha imputado este martes a Pardo de Vera por presuntos delitos de caudales públicos y tráfico de influencias. Sostiene que tuvo una participación «decisiva» en la contratación de la joven. Los últimos informes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil desvelaron contactos con Koldo García para fichar a la expareja de Ábalos.
En el periodo que Jésica Rodríguez trabajó para Ineco, el ente cobraba 3.280 euros al mes por ceder a uno de sus administrativos con menos de diez años de experiencia. Las fuentes consultadas por este diario explican que, cuando se trataba de otra empresa pública, se hacía un considerable descuento. ADIF pagó 2.484 euros al mes por la asistencia técnica de las personas de esa categoría que participaron en los dos proyectos a los que estuvo vinculada la joven.
La nómina de Jésica
El administrador de infraestructuras ferroviarias abonó en total 59.516 euros por los 24 meses que Jésica Rodríguez permaneció ligada a la compañía. La cifra supera en 20.372 euros el montante que Ineco destinó a la joven: 39.244. Una cantidad que no iba íntegra al bolsillo de la expareja de Ábalos, a la que llegaban 1.173 euros de los 1.635 brutos que aparecían en su nómina mensual. El resto servía para sufragar seguros sociales y diversos impuestos.
La propia Jésica Rodríguez se quejó de sus emolumentos ante el hermano de Koldo, Joseba García, que según los investigadores era su responsable en Ineco y la persona que rellenaba sus partes de trabajo. En una conversación de WhatsApp intervenida por la UCO en abril de 2020, la joven señala que le han bajado el sueldo porque «al hacerme indefinida me habrán subido el IRPF». Su interlocutor le confirma que no se trata de un error, a lo que la joven contesta: «Pues nada… yo seré mil euros ya. Mileurista (…) Estos rojos comunistas que se llevan nuestros dineros».
Carmen Librero afirmó el pasado lunes en la comisión de investigación del caso Koldo en el Senado que desconocía quién era el responsable de la joven en Ineco y cuánto cobraba. «He leído que eran como 900 euros», señaló. El senador del PP Juan José Sanz Vitorio le requirió si sabía cuánto se facturaba por ella, algo que dijo no recordar. El dirigente popular le explicó que rozaba los 3.600 euros, aunque esa es la cantidad que reclama la empresa pública desde principios de 2023 por ceder administrativos con menos de diez años de experiencia.
Sanz Vitorio preguntó a Librero si la empresa de ingeniería era rentable. «Ineco, como medio propio de la Administración, no puede tener una rentabilidad financiera, solamente puede recuperar los intereses de su activo», respondió la compareciente. El senador del PP, en tono de mofa, aseguró que «con tres o cuatro casos como el de Jésica Rodríguez es muy rentable, porque no tiene desgaste de material ni despacho». La joven aseguró en sede judicial que cobraba sin ir a trabajar.

El salto a Tragsatec
Para contrarrestar esa afirmación, Ineco acreditó al Supremo que Jésica Rodríguez trabajó 3.684 horas en dos proyectos de ADIF. El grueso de ese tiempo se reparte entre 2019 y 2020. El último ficha 1.860 horas. El año anterior alcanzó las 1.514 horas, unas 300 menos. El menor volumen de trabajo corresponde a 2021, cuando apenas registra 308 horas, ya que la expareja de Ábalos acabó su contrato con la empresa de ingeniería el 28 de febrero. Aunque su intención era continuar, acabó dando el salto a Tragsatec.
Sanz Vitorio criticó el pasado lunes en el Senado la «falta de procedimiento» en las contrataciones de Ineco. Carmen Librero reconoció que cuando ficharon a Jésica Rodríguez no era necesaria la publicación de vacantes para contratos laborales ni se exigía más de un candidato para el puesto. Como avanzó este diario, entre el 1 de enero y el 31 de mayo de 2019, el semestre en el que se contrató a la expareja de Ábalos, se fichó a 39 personas y solo 17 pasaron algún filtro. Esto es, el 43% del total.
Los mensajes intervenidos por la UCO revelan que Pardo de Vera se involucró personalmente en la contratación de Jésica Rodríguez en Ineco. De hecho, se intercambió con Koldo García una serie de mensajes relativas a la entrevista de trabajo de la joven, cuyo contacto de teléfono incluso facilitó. La expresidenta de ADIF también se inmiscuyó en la extensión de su contrato, algo que finalmente no se produjo.
Jésica Rodríguez preguntó a Koldo García en noviembre de 2020 por su renovación. El asesor respondió escuetamente: «Febrero». Sin embargo, días más tarde la expresidenta de ADIF avisó al hombre de confianza de Ábalos para comunicarle que esta no era viable. No obstante, le indicó que la joven ya había hablado con Ignacio Zaldívar, entonces director de gestión administrativa de ADIF y responsable de los proyectos en los que estuvo contratada, que le propuso dar el salto a Tragsatec. La Audiencia Nacional también le ha llamado como testigo para que explique la contratación de la entonces estudiante de Odontología.