El 'controller' de Tragsatec confirma que recibió un 'email' para que dejara de controlar a Jésica
Bote ha explicado en el Senado que la expareja de Ábalos no fichó mientras estuvo contratada en la empresa pública

Sergio Bote durante su comparecencia de este martes en el Senado. | The Objective
«Hay un tal Sergio Bote que está molestando a Jésica Rodríguez. Decidle que pare». El controller financiero y de personal de Tragsatec ha confirmado este martes en la comisión de investigación del caso Koldo en el Senado que recibió un correo electrónico para que dejara de presionar a la joven. Bote ha explicado que el email se lo rebotó su superior, Caridad Martín, y que había sido enviado por el cliente, ADIF. El compareciente también ha señalado que la expareja de José Luis Ábalos no fichó durante los seis meses que estuvo contratada en la empresa pública, algo que no había visto durante sus 18 años en la compañía.
Bote ha reconocido que desconoce si el remitente del correo fue Ignacio Zaldívar, responsable del proyecto de ADIF al que estaba adscrito Jésica Rodríguez. Lo borró porque nunca pensó que llegaría a tener la importancia que ha tenido: «Si llego a saber que va a suceder esto lo guardo en oro». El compareciente ha negado que se encargaba de controlar los partes horarios de los trabajadores de Tragsatec. Su cometido, ha insistido, era vigilar que se rellenaban los partes de imputación de actividad a final de mes para reclamar el pago.
El controller ha señalado que advirtió por email a Jésica Rodríguez de que no había rellenado los partes mensuales de marzo y abril. A partir de mayo comenzaron a aparecer cumplimentados, aunque no ha descartado que pudiera haberlo hecho un tercero. De hecho, el primer mes lo hizo Virginia Barbancho, como reconoció el pasado viernes la responsable técnico del proyecto al que estaba adscrita la expareja de Ábalos.
Los partes de Jésica
La senadora de UPN María del Mar Caballero le ha preguntado si es algo habitual que no se rellenen esos partes mensuales, a lo que Bote ha respondido afirmativamente. «Sí, hay muchas variables. Hay gente que está en el campo sin cobertura, de vacaciones… Pero el responsable del equipo sabe dónde se encuentra». El compareciente ha señalado que le saltaron las alarmas cuando vio que Jésica Rodríguez no lo cumplimentó dos meses consecutivos.
Bote recibió el email a mediados de mayo de 2021, cuando Jésica Rodríguez llevaba más de dos meses trabajando en Tragsatec. El compareciente ha insistido en que puso el asunto en conocimiento de su superior, Caridad Martín, aunque de forma verbal. La gerente del proyecto pasó un día antes por la comisión, donde señaló unas «serie de anomalías» en la contratación de la joven, incluyendo el cambio en los requisitos para el puesto. No obstante, dijo no recordar el correo electrónico, del que no hay evidencia documental.
«Puedo garantizar de manera rotunda que ese email se recibió», ha subrayado Bote. El compareciente ha relatado que a pesar de recibir a partir de mayo los partes mensuales de actividad, puede asegurar que Jésica Rodríguez nunca fichó. El portavoz del PP, Gerardo Camps, le ha reprochado que no advirtiera a sus superiores porque si los partes de imputación de costes están completos y no los laborales, existe «una anomalía».
El que fuese controller de Tragsatec durante la etapa en la que estuvo contratada Jésica Rodríguez (desde junio del año pasado se desempeña como asesor del Gabinete de Presidencia), ha sostenido que no fallaron los sistemas de control. En su opinión, no se hizo caso a los avisos: «Recursos Humanos manda correos a los gerentes con las anomalías. Maneras de identificarlo las teníamos».
La propuesta de Zaldívar
La expareja de Ábalos relató el pasado 27 de febrero en el Supremo que estuvo contratada en dos entes públicos, pero que cobraba sin ir a trabajar. Entre marzo de 2019 y febrero de 2021 formó parte de la plantilla de Ineco. Saltó a Tragsatec en marzo, apenas unos días después de finalizar su relación contractual con la empresa pública de ingeniería vinculada al Ministerio de Transportes. La joven permaneció seis meses en su nuevo destino. Durante todo el tiempo estuvo adscrita a la Presidencia de ADIF, por lo que dependía directamente de Isabel Pardo de Vera.
Los mensajes intervenidos por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil revelan que Pardo de Vera se involucró personalmente en la contratación de Jésica Rodríguez en Ineco. De hecho, se intercambió con Koldo García una serie de mensajes relativas a la entrevista de trabajo de la joven. La entonces presidenta de ADIF también se inmiscuyó en la renovación del contrato. Informó al asesor ministerial de Ábalos que no parecía viable, pero que la joven ya había hablado con Zaldívar, director de gestión administrativa de ADIF, para proponerle que continuara seis meses a través de Tragsatec.
Esta empresa pública ofertó en diciembre de 2020 diez puestos de trabajo temporales como administrativo. Al proceso concurrieron 929 personas en cuatro ventanas. A la vacante que logró la expareja de Ábalos se presentaron 177 aspirantes, pero solo nueve cumplían los requisitos y superaron la fase de valoración de méritos. Jésica Rodríguez consiguió el puesto en la segunda vacante, tras obtener la segunda mejor nota, un total de 52 puntos.
«Es la evidencia de un sistema corrompido en el que los principios de mérito, capacidad y transparencia han sido suplantados por redes de influencia. No hablamos de errores, sino de plazas diseñadas a medida», ha concluido el popular Camps. Bote ha insistido que él comunicó lo que sucedía a sus responsables y que no podía hacer más. Antes de acabar la sesión, el compareciente ha leído un mensaje de apoyo a los 27.000 empleados del Grupo Tragsa.