Andrea, expareja de Ábalos, dice que Sánchez lo sabía todo: «¡Ya está bien de tanto mentir!»
La mujer asegura que grabó en 2024 a Santos Cerdán ofreciendo prebendas a Ábalos si dejaba el escaño

Andrea de la Torre y José Luis Ábalos.
Andrea de la Torre, la expareja de José Luis Ábalos, ha tirado de la manta. La mujer, visiblemente despechada tras conocer el caso de Anaís, ha hablado con el programa ‘Diario de la Noche’ de Telemadrid y ha asegurado que Sánchez “lo sabía todo”, en relación a las presuntas mordidas de la trama de Ábalos, Koldo y Santos Cerdán. “Ya está bien de tanto mentir”, sentencia la mujer.
“Este Gobierno no ha sido contundente con nada, ha sido cómplice”, ha afirmado De la Torre, que mantuvo una relación sentimental y compartió techo con el exministro de Transportes. “Las conversaciones que han tenido Koldo, Ábalos y Santos sobre mordidas y tal, las han tenido de la manera más cuidada posible y por supuesto sin una chica joven delante, aunque fuese su pareja”.
Sin embargo, la mujer asegura que fue testigo y grabó un encuentro entre Cerdán y Ábalos en casa de este. “Santos Cerdán cuando vino a casa, bueno, vino de parte de Moncloa. Se sientan en el salón y yo me quedo en la puerta escuchando la conversación que estaban teniendo José Luis y Santos”.
“Aparte de escucharla, tuvimos una corazonada y dejamos un dispositivo grabando. Escuché también después la grabación y ha sido todo tal cual lo ha publicado El Mundo“. De la Torre asegura lo que ya desveló el citado diario: “Le ofrecieron [a Ábalos] el coste de su defensa, le ofrecieron tres contratos en empresas, en consultoras que están vinculadas a Pepe Blanco, algo de una columna y presencia en tertulias”.
Y se pregunta: “¿No es llamativo que le quieran tener tan cuidadito? Sánchez ya lo sabía todo. Le gusta mucho a José Luis decir que no. Claro que lo sabe. Lo sabe y lo sé yo porque vino este de Moncloa y me lo contó. Ya está bien de tanto mentir”.
Y llegó Anaís
En otro de los audios, Andrea habla de que ella y el exministro planearon ir a vivir al extranjero «cuando se solucione todo». Esta idea quedaría descartada por ella cuando vio las fotos de Anaís, la mujer que trató de sacar un disco duro de la vivienda de Ábalos. «Y ver a esa mujer completamente… despatarrada, abierta de piernas…», afirma De la Torre al borde de las lágrimas en uno de los audios difundidos por Telemadrid.
Ella reprocha al exministro que si se tratase de una modelo iría con la ropa puesta: «Le digo: ‘José Luis, ¿me vas a decir de verdad?’, digo, que las modelos se hacen los books con la ropa puesta. Se visten, que pueden ser fotos así más subidas de tono, pero no esas». Confiesa que cuando ve que Anaís es «actriz porno», «ya se le cae toda la gran mentira sola», apunta antes de señalar que se ha dado cuenta de que «me ha mentido muchísimo».
Pensamientos suicidas de Ábalos
La joven cuenta que Ábalos le insinuó incluso con ideas suicidas. «Se me venía a la cabeza lo de Miguel Blesa, que se pegó un tiro en el pecho, y José Luis me venía con esas cosas, porque nunca hemos dejado de hablar», confiesa.
De la Torre señala que a pesar de haber terminado la relación de noviazgo, no había perdido el contacto con el exministro. La joven asegura que apenas semanas antes del registro, Ábalos le confesó que estaba enamorado de ella: «Siempre hemos mantenido el contacto… una de las ultimas veces me abrazó, me dijo que me quería, que después de haber estado tiempo separados se había dado cuenta de lo mucho que me quiere, que como no me va a querer con lo gilipollas que soy», cuenta.
Andrea dice que en los discos duros de Ábalos hay conversaciones con miembros del Gobierno “de un interés público y general tremendo”. Según su relato, Ábalos tenía “muchísimos discos duros” y que siempre fue conocido por guardar todo en memorias digitales.
“Ya sabíamos todos por la prensa, y yo desde antes, que lo guardaba todo”, ha declarado, subrayando que, aunque mucha gente se burle de ello, es cierto que ha recibido ofertas para escribir sus memorias. Además, ha añadido que en esos archivos se encuentran conversaciones con miembros del Gobierno de un «interés público y general tremendo”.