La trama Montoro compró empresas fantasma a un hombre ligado a Gürtel y a Aldama
Triguero constituye compañías sin actividad para venderlas a bajo precio en un corto periodo de tiempo

El exministro de Hacienda Cristóbal Montoro. | Ilustración de Alejandra Svriz
Los socios de Equipo Económico (EE) se repartieron 32,7 millones de euros entre 2008 y 2019. Los investigadores sostienen que el despacho que creó el exministro Cristóbal Montoro se valió de 16 empresas fantasma para cobrar el dinero que presuntamente recibió por influir en el Gobierno para que sus clientes obtuvieran beneficios fiscales y consiguieran modificaciones de leyes a su favor. Sus miembros compraron la mitad de esas sociedades instrumentales a Luis Miguel Triguero, el mismo empresario que creó las firmas con las que posteriormente hizo negocio la trama Gürtel, Víctor de Aldama o José María Ruiz Mateos.
Triguero constituye compañías sin actividad para venderlas a bajo precio en un corto periodo de tiempo. En términos mercantiles se denominan sociedades estantería o dormidas. Por cada operación consigue unos 2.000 euros. Sin embargo, en ocasiones terminan en manos de redes para blanquear dinero o para tejer un entramado de empresas superpuestas difícil de detectar por las autoridades. La venta de sociedades preconstituidas es legal en nuestro país, aunque la normativa obliga a los creadores a comunicar cualquier actividad delictiva al Sepblac.
La trama se valió de 16 sociedades que «carecen de medios personales o materiales» para «desviar fondos de la presunta actividad delictiva investigada». Los investigadores han detectado que adquirieron diferentes bienes inmuebles y movieron parte del dinero obtenido a países de fiscalidad laxa como Luxemburgo o Irlanda. Las firmas estaban dirigidas por personas de confianza de Montoro: el ex secretario de Estado de Presupuestos Ricardo Martínez Rico, Manuel Vicente Tutor Rodríguez, Francisco de Asís Piedras o Salvador Ruiz Gallud.
Socios de Montoro
Los documentos a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE constatan que ocho de las empresas que utilizó la trama Montoro para supuestamente ocultar los movimientos fueron creadas por Triguero. La primera de ellas, Turégano Corporate, se remonta a septiembre de 2008 y tenía como objeto las actividades inmobiliarias. Apenas tres meses más tarde, en diciembre, lo modificó. También cambió de administrador único, que pasó a ser Tutor, uno de los socios del despacho que creó Montoro en 2006.
Dos años más tarde, en octubre, Triguero constituyó La Rioja Corporate, que pasó a manos de Tutor en apenas tres meses. La empresa fue liquidada de forma voluntaria en 2017. El inicio de las operaciones de Plataforma de Soluciones Jurídicas, otra de las sociedades señaladas en el caso Montoro, se produjo en octubre de 2012. En enero del año siguiente se convirtió en administradora única Covadonga Gómez Garrido, una empleada de EE que aparece entre las 26 personas físicas y seis jurídicas investigadas por el Juzgado de Instrucción número 2 de Tarragona. El juez Rubén Rus levantó el secreto de sumario hace dos semanas, tras siete años de investigación.
El grueso de las sociedades que usó el despacho vinculado a Montoro para presuntamente desviar fondos las creó Triguero en 2015. Ese año se constituyó Global de Asesoramiento Financiero Tributario Económico Legal e Internacional, que apenas un mes después de comenzar a operar pasó a manos de Tutor, uno de los tres socios directores de EE imputados. La misma dinámica que siguió con Tutpim Inversiones y, un año más tarde, con South Marine Empresarial.
Otra de las empresas que habría utilizado la trama para desviar beneficios sería Econodos, fundada por Martínez Rico. No obstante, los datos consultados por este diario en el Registro Mercantil revelan que su administrador único es Falumar, otra sociedad instrumental creada por Triguero en septiembre de 2015. Apenas un mes más tarde este de su cargo y nombra administrador único al propio Martínez Rico. También cambió su objeto, que pasó de promoción inmobiliaria a sociedades holdings.
Empresas sin actividad
Los técnicos de Hacienda detectaron que Econodos ingresó 3,6 millones de euros. Les sorprendió que una empresa «sin activos afectos a la actividad y sin medios personales» pudiera «por sí sola» prestar los servicios por los que cobró de EE. La Agencia Tributaria concluyó que la actividad de Martínez Rico no había variado desde que se constituyó la firma, que facturaba exclusivamente al despacho investigado.
Triguero no está imputado en el caso Montoro, ya que no tiene ninguna responsabilidad en el uso que otras personas den a las sociedades que crea. Los datos recabados por este diario confirman que este empresario también constituyó hasta nueve firmas que posteriormente utilizó Aldama, investigado en varias causas de corrupción. Entre las empresas que le adquirió se encuentra Hot Wheels Ibérica, inscrita en el Registro Mercantil por Triguero en junio de 2022. El comisionista del caso Koldo se hizo con ella solo tres meses después. En la transacción participa uno de sus socios, César Moreno García.
De acuerdo con su objeto social, la empresa se dedica a la construcción y explotación de servicios de aseos privados, ubicados en edificios tanto públicos como privados. También se encarga de vender productos de parafarmacia, droguería, regalos y a la alimentación. Actividades que nada tienen que ver con las que figuraban en su creación, un holding de distintas filiales y la edificación de viviendas residenciales.
La relación entre Triguero y Aldama viene de atrás. El creador de las empresas fantasma traspasó Logística Comercial Montelimar en agosto de 2019 al comisionista y su socio Bernardo Castillo. Existe otra transacción entre ambos que data de noviembre de 2017. Entonces el Gobierno todavía estaba en manos del PP y Triguero cedió a Aldama la compañía Soum & Endell Investments, especializada en la promoción inmobiliaria
El creador de estas sociedades estuvo relacionado con distintas compañías que sirvieron para blanquear dinero a algunos miembros de la trama Gürtel, un caso de corrupción vinculado al PP que le costó el gobierno a Mariano Rajoy. El empresario constituyó, entre otras, Real Estate Equity, que luego utilizó Jacobo Gordon, socio del yerno de José María Aznar. El nombre de Triguero también estuvo ligado a otros escándalos como Malaya o el de la familia Ruiz Mateos, aunque nunca fue imputado por ninguna de ellas ya que su tarea está regulada por la ley de prevención del banqueo de capitales.