El 'socio' del novio de Ayuso rompe con él y cambia de abogado tras la apertura de juicio
Niederer busca desmarcarse de la estrategia judicial de González Amador, ambos acusados de cuatro delitos

Niederer realiza un selfie acompañado de González Amador durante una visita a Costa de Marfil en 2021.
Maximiliano Niederer cambia de abogado para desmarcarse de la estrategia judicial de Alberto González Amador. El empresario mexicano ha designado al penalista Alejandro Guerra Medina para defenderle en el juicio que enfrenta por los delitos contra la Hacienda pública, falsedad documental, delito continuado contable y pertenencia a organización criminal. Los mismos que se le imputan al novio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. El letrado se encuentra procesado por presunto blanqueo de capitales en el juicio contra el narco Sito Miñanco.
La pareja de Ayuso se sentará en el banquillo por un presunto fraude de 350.951 euros a Hacienda y servirse de una trama de facturas falsas. Los investigadores consideran a Niederer «colaborador necesario» de los delitos fiscales de González Amador. Supuestamente, sería el nexo entre las compañías que emitieron las mayores facturas falsas que habría utilizado el principal imputado. La juez Carmen Rodríguez Medel acordó el pasado 22 de septiembre enviarles a juicio junto a otros tres cómplices: David Herrera y los hermanos Agustín y José Miguel Carrillo.
La Fiscalía y la Abogacía del Estado piden tres años y nueve meses de cárcel para el novio de Ayuso y Niederer, pero las acusaciones elevan la pena a cinco años. Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE señalan que, inicialmente, el empresario mexicano fio su estrategia de defensa a la línea marcada por los abogados de González Amador, que durante el proceso entonó el mea culpa y eximió de toda culpa a su presunto colaborador.
Fichaje de Guerra Medina
Niederer cambió de opinión al conocer el auto de apertura de juicio oral, que le atribuía los mismos delitos que al principal investigado. Las fuentes consultadas explican que el empresario mexicano se convenció entonces de apartarse de la estrategia de defensa del novio de Ayuso por si este vertía responsabilidades sobre él. Una decisión que, según diversos juristas, puede perjudicar a González Amador.
El empresario mexicano se decidió por contratar a Guerra Medina, que esta misma semana anunció la buena nueva en sus redes sociales. El propio letrado ha reconocido su fichaje en una conversación telefónica con THE OBJECTIVE. Sin embargo, este diario ha tratado sin éxito de ponerse en contacto con el socio de González Amador. El nuevo abogado de Niederer está procesado en el juicio a Sito Miñanco, ya visto para sentencia, por un delito de blanqueo de capitales.
La juez de la Audiencia Nacional María Tardón sostiene que Guerra Medina y otros abogados «diseñaron y confeccionaron documentos con el objeto de simular que otro de los procesados había vendido letras de cambio días antes de la aprehensión y las presentaron en el expediente sancionador a sabiendas de su falsedad y de que las operaciones de compraventa eran ficticias, con el objeto de recuperar el dinero intervenido y ocultar que el mismo procedía del narcotráfico».
El novio de Ayuso fue procesado el pasado 28 de agosto por dos presuntos delitos de fraude fiscal en concurso con otro de falsedad en documento mercantil. La juez Inmaculada Iglesias, que solicitó la jubilación voluntaria, tomó la decisión contra González Amador por la presunta relación a un supuesto fraude fiscal cometido en 2020 y 2021. Entre los otros cuatro procesados se encuentra Niederer, con un papel mucho más relevante que los tres vecinos de un pueblo de Sevilla.
Facturas falsas
Niederer se habría encargado de las mayores facturas falsas con las que Maxwell Cremona se desgravó servicios inexistentes. Entre ellas, una de 620.000 euros que emitió a finales de 2020 la mexicana MKE Manufacturing SA, empresa en la que el empresario mexicano fue representante. También otra de 922.000 euros que emitió en 2021 Gayani Ltd., de Costa de Marfil, país que visitó ese mismo año junto a González Amador.
El Ministerio Público tuvo que pedir que localizaran a Niederer al no constarle que hubiese facilitado un domicilio. En el juzgado reza que en marzo de 2022, poco antes de que la Agencia Tributaria abriera la inspección, comunicó que residía en un apartahotel en el madrileño barrio de Salamanca. Según avanzó eldiario.es, tras ser localizado y entrevistado, Hacienda concluyó que Niederer no había presentado declaración alguna en España.
El empresario mexicano aseguró a la Agencia Tributaria que «vivía de préstamos de familiares y amigos. En los años 2019, 2020 y 2021, sus ingresos procedían de su madre, que estaba en México». Con estos datos, Hacienda concluyó que se trataba «de un posible testaferro». El socio del novio de Ayuso figura como residente fiscal en España desde agosto de 2010, según consta en la base de datos de Hacienda.
Niederer aparece como administrador único de dos empresas que, según la documentación en poder de este diario, nunca han presentado cuentas: Niederer Consulting Group, creada en 2017 y que aparece inactiva, y Hilocorp Intl, constituida en 2018. La sede de ambas se establece en la calle Orense de Madrid, donde la Agencia Tributaria envió una citación para que se personara durante la inspección.