La juez tumba una maniobra de la Fiscalía que buscaba eximir a Cerdán de falso testimonio

La Justicia seguirá investigando a Santos Cerdán por falso testimonio. La titular del Juzgado de Instrucción número 24 de Madrid, Lidia Montaño, ha desestimado el recurso de reforma que presentó la Fiscalía para evitar que continúen las pesquisas contra el ex secretario de Organización del PSOE. Hazte Oír se querelló contra él por «mentir» el pasado abril durante su comparecencia en la comisión de investigación del caso Koldo en el Senado. Volvió este miércoles, aunque esta vez se acogió a su derecho a no declarar. La magistrada señala en el auto al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE que concurren «los elementos objetivos y subjetivos […] que se denuncian y que hace necesario continuar con la tramitación de la causa».

«Los hechos que se incluyen en la querella presentan, prima facie, características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal», señala Montaño. La magistrada recuerda en su escrito que el delito de falso testimonio está recogido en el artículo 502.3 del Código Penal y puede conllevar condenas que oscilan entre los seis meses y un año de prisión o una multa económica de 12 a 24 meses.

La magistrada considera que, en esta fase procesal, no pueden atenderse las alegaciones de la Fiscalía y procede a iniciar las pesquisas sobre el testimonio de Cerdán en sede parlamentaria. «No se trataba en las preguntas y respuestas que resalta el querellante, de opiniones o interpretaciones del compareciente sobre una resolución judicial o un acontecimiento […] Las preguntas y las respuestas están íntimamente relacionadas con el objeto de la comisión de investigación, no son manifestaciones políticas o divagaciones genéricas», insiste Montaño.

Un «derecho constitucional» de Cerdán

«Las preguntas eran claras y las respuestas del querellado también fueron claras. No a todas las preguntas. Y según mantiene el querellante, el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil revelaría lo contrario», insiste la juez. La Fiscalía alegó en su recurso que, según la jurisprudencia del Tribunal Supremo, «la persona que testifica en un juicio sabiendo que más adelante será investigada no comete delito de falso testimonio si miente para defenderse de la futura imputación».

El escrito firmado por la fiscal Sandra Ramos el pasado 31 de octubre defiende que Cerdán poseería «un derecho constitucional a no declarar contra sí mismo y a no confesarse culpable, siempre y cuando el objetivo de su falsedad sea exclusivamente su autodefensa, toda vez que en caso contrario se violaría el derecho a la presunción de inocencia». La representante del Ministerio Público insiste en que el Supremo interpreta la mentira como «una estrategia legítima frente a una futura imputación».

«Exigir la veracidad del testigo en una situación que le compromete penalmente sería forzarle a renunciar a su derecho a defenderse y a la presunción de inocencia, que deben tener primacía», insiste la Fiscalía en su recurso. En su opinión, la persona a la que se convoca a declarar «no puede encontrarse en peor posición ante los tribunales de justicia, de manera que como manifestación de su derecho de defensa tendrá derecho a guardar silencio y a no declarar contra sí mismo». Sin embargo, Hazte Oír defiende que lo que hizo Cerdán fue mentir directamente.

El ex secretario de Organización del PSOE fue imputado por presuntos cobros de mordidas a cambio de amaños en adjudicaciones de obra pública en junio, dos meses después de su intervención en el Senado. Incluso pasó 142 días en prisión preventiva. La asociación que preside Ignacio Arsuaga se querelló ese mismo mes contra él al entender que cometió un delito de falso testimonio en su primera intervención en la comisión de investigación del caso Koldo en el Senado.

Contactos con Koldo

A Hazte Oír le chirrió que el ex secretario de Organización del PSOE «solo» habló «dos o tres veces» con Koldo García y que no hizo negocios con él. También aseguró que no conocía al comisionista de las mascarillas, Víctor de Aldama. Una versión contraria a lo que acreditarían los informes de la UCO, que vieron la luz tras la primera comparencia de Cerdán en el Senado. Su relación con el antiguo asesor de Ábalos quedaría constatada en los audios que este grabó de las conversaciones que mantuvieron y que han resultado clave para involucrar al dirigente navarro en la presunta red de corrupción.

Montaño admitió a trámite la querella de la asociación el pasado octubre al considerar que Cerdán «habría faltado sustancialmente a la verdad». La magistrado aseguró en el auto que apreciaba una «desviación entre la narrativa integrada por lo conocido o percibido por el compareciente y la realidad material o fenomenológica por la que se le cuestiona resulta irreductible, patente, manifiesta, incompatible».

La juez sostiene que Cerdán habría dado instrucciones a Koldo García para beneficiar a determinadas empresas y habría tenido relación empresarial directa o indirectamente con él a través de terceros, empresa o sociedad interpuesta. Los investigadores otorgan al ex secretario de Organización del PSOE un papel relevante en la trama que supuestamente cobraba mordidas a cambio de amaños en las adjudicaciones de obra pública.