«Las guerras comerciales en la historia han demostrado que no hay nunca un ganador y que sólo con la armonización arancelaria ganan todos»
No hay mucho margen para el optimismo pero el recuperado protagonismo de la Organización Mundial de Comercio (OMC) puede indicar que hay instituciones multilaterales que aún tienen un importante papel que jugar cuando las cosas se ponen verdaderamente feas.
Ellos, los cinco magníficos, victoriosos por haber finiquitado el 92% de los aranceles. Esa alianza trabajará en la macroeconomía y apenas descenderá a esos infiernos donde el uno es el sustento diario de tantos.