Más de 34.000 rohingyas han sido forzados a huir debido a las operaciones militares de la ciudad de Rajine, según la ONU. Al menos 86 personas han muerto en estas operaciones militares, que comenzaron tras el ataque de militantes armados a la frontera de la ciudad de Maungdaw. Además, el director general del Ministerio de Asuntos Exteriores de Myanmar, Kyaw Zaya, ha reconocido a Reuters que 2.415 de sus ciudadanos se encuentran en Bangladés. “Si no tomamos medidas, la gente puede morirse de hambre, si no son asesinados con balas”, afirman en la carta enviada la ONU.
El grupo que ha emitido la protesta está compuesto, además de por ganadores de un Nobel, por políticos y activistas, entre ellos Malala Yousafzai y el Arzobispo de Sudáfrica, Desmond Tutu. Aseguran que Aung San Suu Kyi, líder de facto del país y ganadora también de un premio Nobel, “no ha tomado ninguna medida para asegurar los completos e igualitarios derechos de ciudadanía de los Rohingyas”.