Los conservadores de Theresa May han ganado las elecciones británicas de este jueves, según los sondeos a pie de urna difundidos al cierre de los colegios electorales, pero perdieron la mayoría absoluta que exigían para negociar el Brexit. Puedes seguir los resultados y acontecimientos de las elecciones en Further LIVE.
Los principales dirigentes políticos del Reino Unido han acudido a primeras horas de la mañana a votar en las elecciones generales empañadas por el terrorismo yihadista y en medio de fuertes medidas de seguridad.
Los rivales políticos de la primera ministra de Reino Unido, Theresa May, han criticado su ausencia en el debate de este miércoles, llevado a cabo en la televisión pública británica, a siete días vista de las elecciones generales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha conseguido uno de los mayores triunfos de su corto mandato cuando los conservadores han retomado la hegemonía del Tribunal Supremo, una victoria política que permitirá al magnate tomar aire y olvidar por un momento las polémicas que le rodean.
La notificación oficial por parte de Reino Unido a sus todavía socios de la Unión Europea de abandonar el bloque, ha puesto en marcha este miércoles un mecanismo hasta ahora desconocido en la historia de la UE
Sinn Féin, antiguo brazo político del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA), se ha quedado a tan sólo 1.168 votos de la victoria, que habría sido histórica, en las elecciones autonómicas en Irlanda del Norte. El ascenso del partido republicano, que roza por primera vez el 28% del voto en el Ulster, les permiten colocarse a un solo diputado (27 frente a 28) del Partido Unionista Democrático (DUP), que pierde poder e influencia.c
La IV Asamblea de Ciudadanos se ha saldado con la definición de un partido que adolece de un estilo más sólido en su retórica que en su práctica. Y de enormes diferencias según qué regiones: el Ciudadanos de Andalucía y el de Cataluña son dos partidos distintos. Al contrario de lo que sucedía en UPyD, quien pudo ser su socio y terminó de enemigo, Ciudadanos es un partido fuerte en el liderazgo y débil en el peso de su ideario. ¿Por tesis? No: por los nombres que lo defendían, o defienden. Con frecuencia desencantados de uno y otro partido mayoritario que más que convicciones en el cambio y en el atractivo modo del pragmatismo idealista de la nueva formación vieron la oportunidad de destacar y hacer carrera política en un lugar en donde los puestos relevantes los adjudicaban a medida que los candidatos iban llegando. Si no, reitero, que pregunten en Andalucía, donde Juan Marín, predispuesto al pacto con el poder de Susana Díaz antes que al complicado ejercicio de oposición, prometía consejerías a antiguos simpatizantes del Partido Popular. Simpatizantes que vieron una oportunidad única. Y que ahí están.
Los medios locales registran una participación masiva y el principal candidato de los reformistas, Mohammed-Reza Aref, se ha mostrado confiado en que «finalmente se podría dar fin a los 12 años de la línea dura». Sin embargo, las autoridades no quieren testigos. A diferencia de las elecciones anteriores, los periodistas han confirmado que tienen vetado el acceso a los centros de votación, y han denunciado la existencia de explicaciones confusas por parte del Ministerio de Guía Islámica.