La Autoridad de Fertilización y Embriología (HFEA) despejó con su permiso el último obstáculo para permitir la técnica para luchar contra enfermedades mitocondriales, «una primicia mundial» y un momento «histórico», en palabras de su presidenta, Sally Cheshire. «Es una decisión histórica y estoy segura de que los pacientes que esperan este tratamiento estarán realmente complacidos por lo que decidimos hoy», dijo la científica, según recoge la agencia AFP. En todo caso, añadió Cheshire, la técnica habrá que aplicarla con cautela.
La sanción del HFEA llega más de un año y medio después de que el Parlamento británico aprobara la ley, y los primeros niños nacidos a partir de tan innovadora técnica podrían nacer en 2017 en este país. Además de recibir el ADN normal de su madre y su padre, el niño tendrá también una pequeña cantidad de ADN mitocondrial sano de una mujer donante.