«Esta noche tuve la oportunidad de hablar con el presidente electo Donald Trump para discutir los recientes informes de los medios sobre nuestra reunión informativa del viernes pasado», informó Clapper. Los responsables de inteligencia presentaron la semana pasada a Trump, así como al presidente saliente Barack Obama, un resumen de dos páginas relacionado con un supuesto informe de los servicios de inteligencia rusos sobre Trump, del que se hicieron eco varios medios de Estados Unidos, como la CNN o The New York Times, entre otros. «Le expresé mi profunda consternación por la filtración que ha estado apareciendo en la prensa, y ambos coincidimos en que eran corrosivas y dañinas para nuestra seguridad nacional», dice la nota. Sobre la autoría, Clapper dice que «hice hincapié en que este documento no es un producto de la inteligencia de EEUU».
Un furioso Trump había calificado de «falsas» la informaciones y criticó a las agencias de inteligencia de haberlas filtrado, además de negarse a contestar a las preguntas del periodista de la CNN al que acusó de falsear las noticias para perjudicarle. Este jueves, Trump ha publicado un tuit en el que confirma que «James Clapper me llamó ayer para denunciar el falso y ficticio informe que está circulando ilegalmente. Hechos falsos, inventados. ¡Qué lástima!».
Las tensiones entre Trump y los servicios de inteligencia de EEUU tienen su origen en un informe del mes pasado en el que se acusaba al gobierno de Vladimir Putin de haber interferido en las elecciones presidenciales de noviembre para beneficiar al magnate republicano. Trump arremetió ya entonces contra los servicios de inteligencia a los que acusó de incompetentes, si resultaba cierta la información y que provocó un mayor distanciamiento en las relaciones entre la Administración Obama y el Kremlin.