¿Alguna vez has oído hablar de Guccifer 2.0? Tras este alias se esconde el hacker presuntamente solitario que robó y filtró información de los correos electrónicos del Partido Demócrata en 2016, una circunstancia que favoreció claramente a la candidatura republicana de Donald Trump, que empleó estos datos como arma arrojadiza durante la campaña electoral con unos resultados que todos conocemos. En aquel momento, la noticia cayó como una losa en la formación de Hillary Clinton y varios medios publicaron que detrás del juego sucio de Trump estaba el Kremlin.