
El telescopio James Webb descubre un chorro protoestelar en los confines de la Vía Láctea
La morfología sugiere que la formación de la protoestrella ha sido un proceso altamente organizado
La morfología sugiere que la formación de la protoestrella ha sido un proceso altamente organizado
El hallazgo ayudará a comprender la naturaleza del campo magnético del último planeta del sistema solar
Gracias a la información recogida por estos inventos se han impulsado avances tecnológicos sin precedentes
Un equipo de astrofísicos han utilizado el Telescopio Espacial James Webb para estudiar agujeros negros
LHS 475 b tiene un 99% del diámetro de la Tierra y se encuentra relativamente cerca, a solo 41 años luz de distancia, en la constelación de Octans
Estos datos ayudarán a saber cómo es el planeta y permiten imaginar también cómo se verían sus nubes, divididas en parches
Los Pilares de la Creación, que se encuentran a una distancia de 6.500 años luz, fueron captados por primera vez en 1995 por el telescopio Hubble
Las tres columnas de esta formación están compuestas por gas y polvo interestelar fresco que a veces se ven semitransparentes en la luz del infrarrojo cercano
Las observaciones conjuntas de Webb y Hubble permitirán conocer la naturaleza de la superficie del asteroide, la cantidad de material expulsado por la colisión y la rapidez
También ha captado siete de las catorce lunas conocidas del planeta, incluida la más inusual de ellas, Tritón
La imagen de la nebulosa recuerda al hogar de una tarántula excavadora, forrado con su seda, según la describe la Agencia Espacial Europea (ESA)
Dos nuevas imágenes muestran objetos de hace más de 13.000 millones de años y ofrecen un campo de visión mucho más amplio que la primera imagen de campo profundo del Webb
La potente mirada infrarroja del Webb ha logrado también una instantánea detallada de dos galaxias compañeras más pequeñas con un telón de fondo de muchas otras galaxias
El James Webb se centrará en el estudio del universo primitivo, la evolución de las galaxias, el ciclo de vida de las estrellas y la existencia de otros mundos
El sistema podrá observar la luz de galaxias solo unos pocos cientos de millones de años después del Big Bang, lo que permitirá hacerse una idea de la formación de nuestro universo