
La obstinada rebelión de George Orwell que persiste en el siglo XXI
“Rebelión en la granja” nos reencuentra con unas ansias paradójicas de un progreso que se jacta de aprender pero que sigue caminando hacia el abismo.

“Rebelión en la granja” nos reencuentra con unas ansias paradójicas de un progreso que se jacta de aprender pero que sigue caminando hacia el abismo.
Obama ha encontrado un nuevo punto débil en Putin y Venezuela y de paso quitarse de en medio un pequeño problema. Y en el Vedado la gente solo quiere comer y en el puerto que se siga oliendo a queroseno y así se puedan mover los camellos (autobuses públicos).

Explicar lo que pasa Venezuela a alguien que no ha tenido la vivencia de estos 15 años resulta complejo, porque como dice el dicho: Dios está en los detalles. Formalmente es vista por el mundo como una nación con un sólido sistema democrático,

Mientras leía unas declaraciones de Lula hablando bien del opositor venezolano Henrique Capriles y sugiriendo a Maduro la creación de un gobierno de coalición, noté como mi vello se erizaba.

Nadie daba ni un duro por la revolución estudiantil venezolana. Dos meses después, cada día, miles de jóvenes estudiantes, universitarios y sus familias protestan en Venezuela, en las calles desde Caracas a Táchira.

Uno de los delirios de Hugo Chávez en el proceso de instaurar la revolución bolivariana del siglo XXI (en minúsculas con deliberada intención) fue cambiar el huso horario de Venezuela y los nombres de instituciones.

Amnistía Internacional publicó un informe sobre las manifestaciones que se iniciaron en Venezuela desde el pasado mes de febrero y que han dejado un saldo de más de 30 fallecidos.

En Venezuela la protesta de la sociedad civil, liderada por valientes estudiantes ha desbordado los partidos políticos, pero no hay duda en que dos líderes opositores lograron que la calle despertará: Leopoldo López y María Corina Machado.

Van 36 días de protestas, unas 32 personas asesinadas y 1617 detenciones. Llevo días siguiendo los acontecimientos de Venezuela. Hablemos claro. Estamos ante una dictadura de izquierda, ¿acaso esas elecciones fueron normales y limpias?

Hay un silencio incómodo sobre Venezuela. No solamente el que sufren muchos venezolanos al ser acallados en las redes sociales y en las propias calles de su país. El silencio también resuena en el resto del mundo.

En 2007, la estación de televisión Radio Caracas Televisión (RCTV) fue cerrada por el Gobierno de Hugo Chávez como castigo por la su línea editorial en contra del régimen. Esto cambió el rumbo no sólo de los medios sino de la libertad de expresión del país

En 15 años parece que los únicos que han madurado en la sociedad venezolana son los que estaban en su tierna infancia cuando Hugo Chávez subió al poder. Se trata de los estudiantes.

Ningún análisis sobre las actuales protestas en Venezuela puede hacerse sin entender que la violencia y la mentira son una política de Estado. La dictadura sigue avanzando, quienes deben protegernos nos matan y la resistencia va aumentando.

Hay lugares que por su ubicación o recursos naturales son piezas de suma importancia geopolítica. Uno de ellos es Venezuela, cabe recordar que es el cuarto país productor de crudo del planeta y uno de los mayores en gas natural.

Venezuela es el quinto país productor de petróleo del mundo. Si, han leído bien, el quinto. Venezuela es un país fallido, una economía fallida, una sociedad facial. Casi década y media de movimiento Bolivariano ha transformado Venezuela en un erial.

Acabemos con la ignorancia internacional sobre el campeonato nacional en contra de los derechos humanos en Venezuela.

Decía Francisco Silvela que una de las mejores maneras de evitar la cursilería consiste en no seguir las modas sino de lejos. Pues en política internacional también conviene desconfiar de las tendencias.


“China está cerca” Eso decían muchos estudiantes radicales italianos en los años 60, cuando el país de la Revolución cultural era el referente de los jóvenes revolucionarios europeos decepcionados con el pragmatismo soviético
Hoy separan diferencias sociales abismales al campesino de los multimillonarios