Infidelity Leaks
Era tan sólo cuestión de tiempo que un caramelo tan goloso como dejar en paños menores a millones de infieles con una doble vida se hiciera realidad. Se abrió la caja de Pandora que contenía los datos personales de todos los usuarios que – ¡ingenuos ellos!- habían facilitado por propia voluntad. Desconfiaron de la huella de su smartphone pero confiaron sus datos a una web de infidelidades que ha resultado ser tan discreta como el coro de Sálvame.