El salvaje jardín del Edén de Rihanna
Tras el lanzamiento de su colección de lencería Savage X el pasado mes de mayo, Rihanna debutó con su línea de inspiración tropical en la Semana de la Moda de Nueva York este miércoles.
Bienvenido a la jungla. Tras el lanzamiento de su colección de lencería Savage X el pasado mes de mayo, Rihanna debutó con su línea de inspiración tropical en la Semana de la Moda de Nueva York este miércoles. De esta forma, después de haberse tomado un descanso sobre los escenarios, la cantante de ‘S & M’ apareció con una presentación realmente impresionante y enriquecedora poniendo punto y final así a la semana más importante de la moda en Nueva York con un desfile convertido en un auténtico show digno de ver.
Sobre la pasarela, las modelos más relevantes de la actualidad, como Gigi y Bella Hadid y Joan Smalls, junto a toda una diversidad de rostros, pieles y tallas que han presentado las delicadas piezas de la firma en un intento de defender la inclusión y la diversidad.
Así, Rihanna ha dejado claro cuáles son los estándares de belleza en el siglo XXI, y es que la lencería sexy es para todos, porque nadie debería encontrar límites para sentirse así en base a un canon concreto y excluyente. De esta forma, se pudo ver sobre el escenario modelos de diferentes etnias, modelos curvy, de diferentes alturas y, la gran sorpresa del desfile, dos modelos embarazadas. Una de ellas, Slick Woods, de 22 años, que lució un conjunto de una sola pieza, cubrepezones, medias con bordados y taconazos. Un conjunto bastante alejado de la ropa interior sexy orientada a mujeres embarazadas.
Otra de las modelos embarazadas fue una bailarina, que realizó una pequeña actuación durante el desfile, convertido en un auténtico show. La modelo mostró un body transparente color crema con encaje y transparencias también de una sola pieza, con flores y unos guantes con bordados en negro.
Todo esto, en un ambiente inspirado en la naturaleza, ambientado en un almacén de Brooklyn Navy Yard, que comenzó en la más absoluta oscuridad y que poco a poco fue iluminándose mostrando una suerte de oasis repleto de flores, plantas alrededor de una estructura metálica en forma de cúpula.
«Quiero que la gente use Savage X y piense: ‘soy una mala perra'». Quiero que las mujeres sean dueñas de su belleza», confesaba Rihanna en una entrevista para Vogue.
Rihanna, quien ganó 36 millones de dólares en 2016, es una de las figuras más influyentes en la cultura pop en la actualidad, muy admirada por su riesgo y espontaneidad. Tal es su influencia que cuando apareció en la portada de la revista británica Vogue en agosto, consiguió que las cejas finas volviesen a estar de moda. Además, su colaboración en 2016 con Puma generó para la marca deportiva mil millones de dólares.
Savage X es la forma de monetizar todo su potencial. Además, los productos de la marca están disponibles en una gran variedad de tallas que van, en el caso de los sujetadores, desde la talla 80A a la talla 115D, y de la XS a la 3XL en las braguitas.