Madrid acoge la mayor colección robótica de Europa
¡Bienvenidos, humanos! Estamos en The Place. Un lugar donde ocurre eso que llamáis futuro y es presente. Donde vais a poder tocar, experimentar y vivir nuevas experiencias con eso que los humanos llamáis avances tecnológicos y no son más que mis amigos con los que comparto mi hogar.
¡Bienvenidos, humanos! «Estamos en The Place. Un lugar donde ocurre eso que llamáis futuro y es presente. Donde vais a poder tocar, experimentar y vivir nuevas experiencias con eso que los humanos llamáis avances tecnológicos y no son más que mis amigos con los que comparto mi hogar». Pepper no necesita presentaciones porque lleva años haciéndolas. Blanco, reluciente y con unos inmensos ojos sonrientes habla en el escenario sobre The Place, el lugar en el que va a pasar los próximos años. Él y los 400 robots humanoides más que han convertido una planta baja de un edificio al lado de la Castellana en la mayor colección robótica de Europa.
Los robots se mueven a sus anchas por los los 700 metros cuadrados que el ecosistema de formación y emprendimiento de The Valley ha puesto a disposición del futuro. La mayoría de ellos sabe dar la bienvenida, hacer presentaciones, dar horarios, saludar y reaccionar a los gestos humanos. Además, también están lo que Pepper presenta como sus amigos, entre ellos los protagonistas de Star Wars, R2-D2 y BB-8 a tamaño real, y cientos de robots más de Casual Robots. Ojos digitales saltones, blancos o negros, metalizados y que saben español, inglés y chino. Porque muchos han vivido fuera de nuestras fronteras.
Pero estos seres con inteligencia artificial no son los únicos que viven en The Place. Este espacio, que ha inaugurado este miércoles The Valley, se ha convertido en un nido de tecnologías disruptivas: decenas de gafas de realidad virtual y realidad aumentada, que te trasladan a conducir un coche Tesla, a un concierto de One Direction, a la construcción de un puente, a una isla privada en la que, gracias a una cabina, puedes sentir el calor y el olor a coco. Hogares y tiendas conectadas donde puedas controlar todo desde un dispositivo, que con solo un sensor te comparen desde móviles a botellas de vino. Una pared digital e interactiva formada por 18 televisores de 55 pulgadas que se desdoblan para poder acoger simultáneamente a más de 80 personas hablando, escuchando y compartiendo. La tienen igual, solo que un poco más grande, en Oxford, cuenta a The Objective Víctor Sánchez, CEO de Mashme, los creadores de esta pantalla.
Son tecnologías disruptivas porque pueden hacernos cambiar de paradigma. Los smartphones fueron disruptivos porque se han convertido en un eje central de nuestra sociedad y de nuestra vida cotidiana. ¿Qué va a pasar entonces con la realidad virtual y aumentada, el machine learning o el hogar conectado? ¿Están aquí para quedarse? No tienen ninguna duda de esto, Arantxa Sasiambarrena, CEO en The Valley y Juan Luis Moreno, director académico del ecosistema.
«El cambio se está produciendo a una velocidad desconocida y necesitamos un lugar donde prepararnos para adaptarnos. Necesitamos un lugar donde debatir: ¿qué va a pasar cuándo crezca el número de robots? ¿Cuál es el modelo al que vamos? ¿Vamos a implantar una renta mínima? Necesitamos un sitio donde explorar esa tecnología con ejemplos reales y un lugar donde podamos trabajar la nueva cultura de empresa», dice Moreno. Por todas esas razones han creado The Place. Aunque en un principio, este espacio está pensado como un lugar de formación y orientación para empresas que busquen modernizarse e innovar, en 2018 estará abierta para cualquier ciudadano que quiera visitar y probar sus tecnologías.
El 70% de los españoles sitúa a España a la cola de la innovación. Es más, el 67% cree que, de no implantar las nuevas tendencias tecnológicas en los próximos años, las empresas españolas se quedarán atrás y perderán total competitividad, señalan en The Valley. Pero, Moreno cree que esto puede cambiar: «La innovación es una habilidad que se puede aprender».
«Humanos, despertad. Sino no podremos ser parte de este nuevo mundo en el que tenemos que estar todos juntos: humanos y robots». Palabra de Pepper.