Llega a Madrid el autocine más grande de Europa
Películas en 3D, en versión original con subtítulos, sin subtítulos, en blanco y negro… en la actualidad tenemos un sinfín de opciones para ver una película en el cine. En pocos días, Madrid contará con una más: el autocine. El primer autocine de la capital española abrirá sus puertas el próximo 24 de febrero, fecha en la que podremos disfrutar de una buena sesión de cine desde nuestro coche, o incluso desde nuestra moto.
Películas en 3D, en versión original con subtítulos, sin subtítulos, en blanco y negro… en la actualidad tenemos un sinfín de opciones para ver una película en el cine. En pocos días, Madrid contará con una más: el autocine. El primer autocine de la capital española abrirá sus puertas el próximo 24 de febrero, fecha en la que podremos disfrutar de una buena sesión de cine desde nuestro coche, o incluso desde nuestra moto.
Para completar el ambiente americano que se respirará en este autocine, la primera película que emitirá en su pantalla, de 250 metros cuadrados, será el clásico Grease, que estará en cartelera hasta el día 2 de marzo. A partir de ahí y hasta el 9 del mismo mes, los espectadores podrán disfrutar de unas palomitas, o incluso de una hamburguesa, mientras ven Logan desde la comodidad de sus coches.
El Autocine Madrid RACE está situado en el distrito de Chamartín-Fuencarral, cerca del Paseo de la Castellana, y es el más grande de Europa. En un espacio de 25.000 metros cuadrados, cuenta con 350 plazas de aparcamiento y con una zona de butacas con capacidad para 100 personas, aunque esta solo estará disponible durante los meses de verano. Además, un auténtico diner americano y algunos food trucks ofrecerán la posibilidad de hacer que una noche de cine se convierta en mucho más.
Puede parecer difícil que los 350 coches escuchen la película con la misma calidad de sonido, pero en realidad es muy sencillo: el autocine utilizará una emisora de radio FM para que cada espectador reciba el sonido en su vehículo con la mejor calidad. Además, también cuenta con grandes altavoces que permitirán a aquellos que salgan del coche para ver la película desde el área gastronómica, o simplemente para estirar las piernas, no perderse ni un segundo de lo que ocurra en la gran pantalla.
El motor de los coches podrá estar encendido en caso de que los espectadores quieran encender la calefacción o el aire acondicionado, pero siempre con cuidado de no encender las luces, y los coches de mayor tamaño deberán aparcar en las últimas filas o los laterales. Y, aunque no suele ocurrir, en el caso de que algún vehículo se quedara sin batería, el autocine cuenta con arrancadores de emergencia. Así lo único de lo que habrá que preocuparse es de relajarse y disfrutar de la velada. Además, para los que tienen perro, dejarlo solo en casa tampoco será una preocupación, porque también serán bienvenidos en el autocine.
El precio de la entrada para disfrutar de los clásicos y estrenos que formarán su cartelera varía según la cantidad de personas que ocupe el coche. Habrá que pagar una entrada de 1 euro por vehículo, a la que se sumarán seis euros por cada adulto y cuatro por cada niño. Así, por ejemplo, una entrada para dos adultos que llegan en un coche costaría 13 euros.
Este proyecto, creado por cuatro jóvenes emprendedores, pretende ser mucho más que un cine. Quieren cubrir un hueco en el mundo del ocio y el entretenimiento en Madrid. Por tanto, no solo proyectará películas, sino que además se podrán ver en su pantalla míticos conciertos de grandes bandas o incluso se podrán organizar eventos privados de diferentes tipos.
Este formato, que en Estados Unidos se convirtió en el favorito de las parejas durante los años 50, no es algo nuevo en nuestro país. El primer autocine en España abrió en 1959, y actualmente existen siete que aún están en funcionamiento: en Valencia, Denia, Alicante, Gijón, Ribadesella, Torrelavega y Getxo. Y a partir del viernes 24, el octavo autocine español abrirá en Madrid para darnos la oportunidad de sentirnos por unas horas como Sandy y Danny en sus primeras citas, rodeados de un ambiente al más puro estilo de Grease.