AK-47, el arma que todos los combatientes quieren
Mozambique es la única nación que la tiene en su bandera, Zimbawe, Timor Oriental y la Guardia Revolucionaria de Irán, en sus escudos, Emir Kusturika le dedica una canción, Sadam Hussein tenía una de oro. El Automat Kaláshnikova de 1947 es el arma más vendida del mundo, la más imitada, la más fabricada y la que todo combatiente desea poseer y disparar, al menos una vez en la vida. Tanto es así, que se dice que los soldados americanos que combatían en Vietnam, abandonaban su rifle M16 y recogían los rifles AK-47 de los enemigos porque eran mucho más fiables y no se atascaban. En la actualidad los infantes de marina de EEUU llevan cargadores de AK-47 debido a lo común que es el arma.
Mozambique es la única nación que lo tiene en su bandera, Zimbawe, Timor Oriental y la Guardia Revolucionaria de Irán, en sus escudos, Emir Kusturika le dedica una canción, Sadam Hussein tenía uno de oro. El Automat Kaláshnikova de 1947 es el arma más vendida del mundo, el más imitada, el más fabricada y el que todo combatiente desea poseer y disparar, al menos una vez en la vida. Tanto es así, que se dice que los soldados americanos que combatían en Vietnam, abandonaban su rifle M16 y recogían los AK-47 de los enemigos porque eran mucho más fiables y no se atascaban. En la actualidad los infantes de marina de EEUU llevan cargadores de AK-47 debido a lo común que es el arma.
Pero el AK-47 es también el arma más mortífera del mundo. Aproximadamente 250.000 personas mueren cada año, según Amnistía Internacional, por balas de los Kalashnikov. No obstante, el propio Mijaíl Kaláshnikov nunca se reprochó a sí mismo la sangre derramada como consecuencia de su invento, argumentando que él creó este rifle para proteger a su patria. «Duermo bien. Los políticos son los culpables de no haber llegado a un acuerdo y recurrir a la violencia», dijo en 2007.
El AK-47, de 4,3 kilogramos de peso, sin contar la munición, es también una de las armas más extendidas por el mundo, y desde la propia compañía nos aseguran que se han producido más de 70 millones de rifles de asalto Kalashnikov de varias modificaciones.
Mijaíl Kaláshnikov, quien era un comandante de carros de combate durante la Segunda Guerra Mundial, comenzó su carrera como diseñador de armas después de sufrir una lesión en el hombro durante la Batalla de Briansk, ciudad rusa situada a 380 km al suroeste de Moscú. Durante su estancia en el hospital en 1942 escuchó a los soldados heridos quejarse de los rifles soviéticos y decidió inventar un arma nueva.
El primer fusil Kaláshnikov fue producido en 1947, y rápidamente se convirtió en el fusil de asalto estándar del Ejército de la Unión Soviética (URSS) y luego del Ejército ruso desde 1949, por lo que su creador fue galardonado con el Premio Stalin y la Orden de la Estrella Roja. Mijaíl Kaláshnikov escribió en sus memorias que «con un arma no se puede arar la tierra ni cultivar cereales, pero sin ella uno no podrá defender su tierra natal, ni proteger la patria y a su pueblo».
Pero el AK-47 no solo se fabrica en Rusia, son más de 30 los países que tienen los derechos de reproducción de este arma, entre ellos China, Israel, India, Egipto, Bulgaria y Nigeria, y más de 100 en los que sus Fuerzas Armadas, o al menos una parte de ellas, los utilizan.
Ni aun cubierta de arena o barro, sumergida bajo el agua o a 30 grados centígrados bajo cero, deja de disparar en torno a 600 balas por minuto. Esto la convierte en el arma más fiable del mundo. Su bajo costo de fabricación y de adquisición ha hecho que se convierta en el arma preferida de algunos ejércitos y de muchos grupos insurgentes y terroristas. Osama Ben Laden no podía separarse de su AK-47, al menos en sus comparecencias televisivas. Según algunos informes, fue EEUU el que le entregó al fundador de Al Qaeda su primer AK-47 para luchar contra los soviéticos en Afganistán.
Según Michael Hodges, autor del libro AK-47: La historia del arma del pueblo, el número de kalashnikovs en el mundo podría ascender a 200 millones. Un kalashnikov cada 35 personas. Se siguen fabricando de forma legítima en más de 30 países, con China como principal fabricante y el mercado internacional como destino. Pero las armas fabricadas legalmente pueden transformarse rápidamente en contrabando ilegal. El principal mercado de exportación de China son los estados africanos, donde muchas veces terminan en el mercado negro porque los soldados mal pagados las venden, o porque algunos estados las emplean para armar con ellas a fuerzas rebeldes de otros países.
El AK-47 entró en el Libro Guinness de los Récords como el arma más extendida en el mundo, con más de 100 millones de rifles en uso.
Tan demandada es el arma, y tan bien se conserva con el paso de los años, que a día de hoy sigue estando presente en los mostradores de las principales ferias de Defensa del mundo, como Idex, la más importante del sector en Oriente Próximo. Kalashnikov Corporation no duda en presentarla en sociedad allá donde va, acompañada de sus «hermanas» más modernas o incluso de otras armas de la compañía con fines deportivos y no militares. Y es que no en vano hay que recordar que son muchas las Fuerzas Armadas de esta región las que utilizan el AK-47, como el ejército sirio, el jordano o el iraquí, entre otros.
La corporación Kalashnikov ha comunicado que ha lanzado un plan de contrataciones para aumentar un 30% su fuerza laboral debido al creciente aumento de pedidos de exportación. En concreto, este plan contempla contratar 1.700 personas que se incorporarán a la actual plantilla de 6.500 trabajadores.
Es tan fácil disparar este rifle que hasta los niños podrían hacerlo, y de hecho, por desgracia, lo hacen. No es difícil ver imágenes de niños en Siria, Yemen, Palestina o Somalia, por citar solo algunos, empuñando un AK-47. En Rusia, todavía se siguen realizando campamentos militares de verano en los que los niños son instruidos en el manejo de este arma, y en Estados Unidos, muchos padres llevan a sus hijos a campos de tiro para practicar con este u otros rifles similares. Según un reciente estudio de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), publicado por Pediatrics el 19 de junio de 2017, en EEUU, cada día mueren o resultan heridos cerca de 19 menores por armas de fuego.
El comercio de armas
En España están prohibidas este tipo de armas, que se consideran de guerra. En nuestro país existen a día de hoy 10,4 armas de fuego por cada 100 personas, según los datos de la Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, en un ranking mundial que lideran Estados Unidos (88,8) y Suiza (45,7). Pero no se puede adquirir ningún tipo de arma automática, de esas que, como establece la ley desde 1993, se recargan “automáticamente después de cada disparo y con las que es posible efectuar varios disparos sucesivos mientras permanezca accionado el disparador”. El AK-47 no solo se considera arma de guerra por su automatismo, sino también por el calibre de munición que utiliza: 7,62 milímetros. Y la ley establece también que están prohibidas las “armas de fuego o sistemas de armas de fuego de calibre inferior a 20 milímetros cuyos calibres sean considerados por el Ministerio de Defensa como de guerra”.
El principal flujo de AK-47 de contrabando hacia Europa central proviene de los países balcánicos que formaban la antigua Yugoslavia y Albania. Otro de los principales campos de adquisición de armamento es la Darknet, donde los usuarios comparten información y contenidos digitales de manera privada y es posible adquirir de manera ilegal drogas, armas y pornografía infantil.
El bajo coste de fabricación siempre ha sido una de las ventajas más importantes del AK-47. El precio promedio global del rifle de asalto se estimó en 534 dólares en 2005, según el economista de la Universidad de Oxford Phillip Killicoat. Aunque en los países africanos el precio del AK-47 es, en promedio, unos 200 dólares más barato.