La asociación cultural Soy de la Cuesta arranca un plan de choque para relanzar las ventas en la feria literaria de la Cuesta de Moyano, amenazada de olvido por la situación actual. Los autores Rosa Montero, Eloy Tizón, Almudena Sánchez, Javier Sierra, Javier Santamarta y Carlos del Amor ejercen allí de libreros por un día, y nos recomiendan el libro perfecto para acariciar el ánimo pandémico.
Una mujer con sombrero se acerca a una de las casetas de la Cuesta de Moyano y se encuentra con Carlos del Amor, periodista y escritor, como dependiente. “Yo le atiendo, señora, que hoy soy yo el librero, estoy de becario”, dice él con guasa. Y sí, se celebra el Día de las Librerías y los escritores Rosa Montero, Eloy Tizón, Almudena Sánchez, Javier Sierra, Javier Santamarta y el propio Del Amor saltan al otro lado del mostrador de las casetas de esta mítica feria del libro para recomendar lecturas a los clientes que por allí pasan.
Es la primera de las iniciativas que ha lanzado la asociación Soy de la Cuesta en colaboración con la Consejería de Cultura del Ayuntamiento de Madrid, y que tiene por objetivo impulsar las ventas de este enclave literario de un siglo de antigüedad: “Desde que empezó el confinamiento nos pusimos a trabajar en este plan de choque para que la Cuesta de Moyano no dejara de vender y para que la pandemia no le diera el puntapié definitivo”, dice la presidenta de la agrupación cultural, Lara Sánchez que es, además, la nieta del fallecido Pepe Berchi, decano de los libreros de Moyano. Ella tiene claro que no volverá a vivir el “esplendor” que dice haber conocido en el lugar, un tiempo dorado que también recuerda bien Hugo Prestel, librero de la caseta 17, de la que estuvo al frente su abuelo desde el año 1945: “En su época, mi abuelo trabajaba con seis ayudantes, y había tanta afluencia de público que, para reponer los libros del tenderete de la calle, de lo que nosotros llamamos el tablero, se tiraban los libros por encima del público, porque no se podía ni siquiera pasar”.
La añoranza de esos tiempos contrasta con los datos de las ventas de este año, que socavan el ánimo de los libreros pues, según su presidenta actual, Carolina Méndez, estas “han disminuido entre un 50 y un 80 por ciento”. El virus ha estragado la tradición de acudir a Moyano a comprar todo tipo de obras, a pesar de que en la Cuesta, como recuerda Carolina, la variedad está servida: “Hay mucha gente que cree que solo trabajamos con libro viejo, y aquí lo hay, pero también libro nuevo, libro de segunda mano que a lo mejor se ha publicado hace solo dos o tres años, tenemos también infantil, cómic, hay algún incunable, hasta primeras ediciones de Machado… Aquí puedes encontrar de todo, y eso no lo hay en ninguna parte”, dice con orgullo y fe en que la pendiente de esta célebre feria pueda aliviarse con esta y otras iniciativas que la asociación va a llevar a cabo. Tomen nota de cuáles.
La primera de ellas se celebrará en diciembre y rendirá homenaje al centenario de la muerte de Benito Pérez Galdós y al próximo centenario del fallecimiento de Emilia Pardo Bazán. Un actor interpretará a Pardo Bazán y una actriz a Pérez Galdós y, así, con los papeles cambiados, leerán en la caseta 22 de la Cuesta las tórridas y divertidas epístolas que a lo largo de toda su relación se enviaron los amantes, y de las que les dejamos apenas un bocado exquisito: “Pánfilo de mi corazón: rabio también por echarte encima la vista y los brazos y el cuerpote todo. Te aplastaré. Después hablaremos dulcemente de literatura y de la Academia y de tonterías. ¡Pero antes morderé tu carrillito!”.
En la misma caseta se celebrará también, ya en 2021, un encuentro entre famosos escritores (cuyos nombres la presidenta de Soy de la Cuesta aún no desvela) y la presentación del mapa de Moyano como Km 0 literario, un plano en el que los grandes eventos y personajes de la Literatura de Madrid confluyen en la empinada calle, y al que han dado vida el escritor Andrés Trapiello y el ilustrador Fernando Vicente.
Todo, con el deseo de que los lectores sigan remontando este repecho centenario en busca del libro que se convierta en su compañía perfecta. Nosotros les hemos preguntado a cada uno de los autores que han ejercido de libreros por un día cuál nos recomiendan, y lo hemos hecho con una única premisa: que los títulos acaricien un poco el ánimo en este también escarpado 2020. Les presentamos, una por una, sus sugerencias.
Rosa Montero
Dioses contra microbios, de Alejandro Gándara.
“Un libro original y fascinante que acaba de salir. Es una mezcla de diario muy personal del confinamiento con referencias a la cultura griega como origen de nuestro pensamiento. Un libro precioso que puede, además, darnos armas para digerir la pandemia”.
Eloy Tizón
Irene y el aire, de Alberto Olmos.
“Es una novela en la que un futuro padre cuenta las vicisitudes del embarazo de su pareja, todo el ciclo con las dificultades que se presentan y hasta el parto. Tiene momentos muy divertidos, muy graciosos, y también pensamientos muy lucidos mezclados con otros pasajes un poco más dramáticos. Se trata de una novela breve que yo personalmente me bebí, porque me parece que narrativamente está muy bien resuelta, muy bien armada. Creo le puede resultar muy placentera a cualquier lector”.
Almudena Sánchez
Estamos en el borde, de Carolina Lamarche.
“Se trata de un libro de relatos que habla sobre el ser humano y su relación con los animales, y resulta muy inspirador. Yo lo leí durante el confinamiento en el mes de marzo y me ayudó, me hizo pasarlo bien… Ya había bastante terror fuera como para encontrar más en la lectura. Este es un libro amable, con una parte tierna. Y creo que la ternura es lo más importante: mientras exista este sentimiento, sobreviviremos”.
Javier Sierra
Aquitania, de Eva García Sáenz de Urturi.
“Si lo que buscas es tener un estado de ánimo más fuerte, valorarte como mujer si eres mujer lectora y comprender que el papel de las mujeres ha sido fundamental en la Historia, te puedes acercar a este último premio Planeta, donde se cuenta la historia de Leonor de Aquitania, una mujer completamente llena de misterio y fascinante”.
Carlos del amor
Recuerdo de Picasso, de Roberto Otero.
“Ya que estoy en una caseta artística, os recomiendo este libro que, aparte de curiosidades del genio malagueño, tiene también fotos no muy conocidas de él. Es un repaso a la figura de uno de los mayores genios de nuestra cultura, el emperador del arte del siglo XX. Con este ejemplar adquieres Literatura porque, aunque se trate de la biografía de Picasso, la vida de Picasso en el fondo es ficción, está muy cercana a la novela”.
Javier Santamarta
El libro del convaleciente, de Enrique Jardiel Poncela.
En este año complicado en el que, por desgracia, hay tantos enfermos, recomiendo El libro del convaleciente. Un clásico ideal para hacernos unas risas, y que estoy seguro de que va a animar mucho a la gente.