La historia de Lisey: memorabilia del amor y otras pesadillas
Los libros de King han sido adaptados a la pantalla grande religiosamente. Este verano le ha tocado a una de sus novelas más personales pero no por ello menos terrorífica: ‘La historia de Lisey’
En el limbo de los sueños hay puertas creadas a la medida de cada imaginario. Portales que comunican al subconsciente formados con la intermitencia de los recuerdos. Entre el mundo de los sueños y lo que recordamos cuando estamos despiertos hay cosas de las que no se hablan. Criaturas que se esconden en la oscuridad, recuerdos que se convierten en pesadillas. Lugares a los que algunas personas van cuando la luz no refleja en la ventana y, en ocasiones, no vuelven.
Stephen King ha escrito sobre este universo de la psicología humana por más de cinco décadas, desde que en 1974 su primer libro publicado -pero no el primero que escribe- Carrie explora el trauma de una adolescente con telequinesis atrapada en un pueblo condenado. Desde entonces, los libros de King han sido adaptados a la pantalla grande religiosamente, algunos múltiples veces. Este verano le ha tocado a una de sus novelas más personales, pero no por ello menos terrorífica: La historia de Lisey. El libro había esquivado la fanaticada mediática por 15 años, sin embargo, desde el pasado 4 de junio esta memorabilia del amor y otras pesadillas se puede ver en Apple TV.
La novela ha sido adaptada a una miniserie de 8 capítulos dirigida por el cineasta chilenoPablo Larraín, y protagonizada por Julianne Moore y Clive Owen.
Esta es la primera adaptación de la novela, publicada originalmente en el 2006. No obstante, antes de encender la TV hay algo que todo lector de Stephen King no dudaría en señalar: como de costumbre, el libro precede a la serie y esto merece un repaso a la historia original antes de que Moore y Owen se apoderen de los protagonistas en el imaginario colectivo.
La historia de Lisey: de amor y fantasmas
Han pasado dos años desde que su esposo falleció repentinamente. Lisey Landon Debuscher todavía oye el eco de su voz en los pasillos de su casa, una casa que se hace más grande y pesada a medida que su ausencia se prolonga. Lisey se sorprende exclamando en voz alta los diálogos más secretos de su matrimonio, sopesando la presencia de Scott en cada cuarto y esquina de su hogar.
Scott Landon fue un exitoso escritor en vida, con una colección de cuentos y novelas inéditas codiciada por sus fanáticos y evitada con la misma avidez por Lisey. Cuando Lisey decide poner orden en el legado de su difunto marido, su inspección literaria resucita aquello que Lisey ha enterrado en su subconsciente. Recuerdos, juegos y frases inherentes a su vida con Scott emergen con la garra de la nostalgia, pero también emergen las pesadillas y criaturas que persiguieron a Scott en vida.
Mientras Lisey recuerda su matrimonio: lo bueno, lo malo, lo sangriento y lo imaginario un admirador obsesionado con el trabajo de Scott amenaza su sanidad y su vida.
Esta es la historia de un matrimonio moldeado por los fantasmas de un escritor. Un hombre perseguido por supersticiones, portales de ensueño y criaturas nocturnas a la caza constante de su lucidez. En La historia de Lisey esa puerta anclada entre el limbo de los sueños y la realidad revela la presencia de una criatura alargada, con el costado moteado que se refleja en los espejos y se alimenta en la oscuridad.
Por otro lado, al ser narrada por Lisey, esta también se convierte en la historia de una mujer que asume los fantasmas de su pareja, y que lucha por la vida de ambos.
Un código secreto: todo sigue igual
Una de las huellas particulares de este libro es el espectro de códigos, bromas, y frases que forman el lenguaje interno de la pareja. Un lenguaje que Lisey formula mientras la neblina de su memoria se disuelve. Con pequeñas pistas y alusiones a este lenguaje King nos introduce en el matrimonio de un escritor cuya imagen pública se encuentra a kilómetros de distancia de su verdadera naturaleza, y cuya esposa es mucho más que la mujer que se deja a medio ver en la esquina de las fotografías.
Expresiones como Inkutt para describir a los fanáticos del escritor (los peligrosos) , «espera a que cambie el viento», «ponte las pilas cuando lo consideres necesario», «todo sigue igual», «baby luv», entre otras, regresan al texto constantemente para revelar un secreto que precede a su matrimonio y que se esconde en el multiverso creado por Stephen King en sus novelas. En esta ocasión, un lugar llamado Boo´ya Moon encierra casi todas las respuestas, pero también todas las pesadillas.
Tres claves del universo de La historia de Lisey
Boo’ya Moon: es el lugar en donde Scott se refugia desde su infancia. Una especie de paraíso a donde va a escribir y reflexionar cuando los maltratos de su familia se hacen intolerables. La geografía del lugar es infinita y deslumbrante. Una planicie de colores, olores, flores y armonía que aparece constantemente en la historia a medida que Lisey recuerda las veces que casi pierde a su marido en ese preciso lugar, porque cuando el sol se pone Boo’ya Moon es también el hogar de criaturas hambrientas y caminos sin regreso.
Dádivas sangrientas: un aspecto particularmente oscuro del libro es el de las dádivas sangrientas, lo cual se refiere a la mutilación que tanto Scott como la hermana de Lisey se causan a raíz de sus traumas de la infancia. En la novela Scott lo describe como una forma de dejar salir a los malos, de escapar de la oscuridad antes de que esta se adhiera a sus entrañas.
La cosa del costado moteado: a lo largo del libro la presencia de una criatura que habita en Boo’ya Moon, un chaval larguirucho que rumia en la selva de su multiverso, se asoma desde los recuerdos más oscuros de Lisey. Este personaje se convierte en el acosador personal de Scott, tanto en sus sueños como cuando está despierto. La presencia de esta criatura que solo aparece de noche recorre las páginas de la novela en una carrera por la psicopatía de Scott, y tras su muerte, la de Lisey.
La adaptación
El pasado 4 de junio Apple TV estrenó la primera adaptación de La historia de Lisey bajo la dirección de Pablo Larraín, director de películas como No, Neruda, Jackie y recientemente Ema. La miniserie cuenta con Julianne Moore como Lisey y Clive Owen como Scott Landon, además de un reparto que incluye a Jennifer Jason Leigh, Dane DeHaan y Sung Kang. La serie fue filmada en New York y New Jersey y es coproducida por J. J. Abrams.
En el pasado, King había expresado su interés en ver la adaptación de la novela, según la revista estadounidense Variety. «La historia de Lisey es mi libro favorito y me encantaría verlo hecho, especialmente ahora que hay una especie de apertura en los servicios de streaming en televisión» escribió King en el 2017.
La serie tiene un repertorio de similitudes y diferencias que se mantienen en la cuerda floja cuando se trata de satisfacer a los lectores de King. Se ha comentado sobre la poderosa actuación de Moore como Lisey, pero también están los detalles que inevitablemente se dejan afuera cuando se ajusta una novela al formato televisivo.
La historia de Lisey es uno de los libros más originales de King, que aunque fiel a su género de terror, además se sumerge esta vez en una historia más cercana al amor y a la locura que a los atributos sobrehumanos que suelen protagonizar sus novelas. El libro tiene elementos fantásticos, pero también es terrorífico, íntimo y sentimental. Explora los aspectos más recónditos y adversos de una pareja mientras alude a los peligros de la adoración y la firmeza interna con la cual somos capaces de luchar por nuestras vidas cuando es necesario, o citando a King, la capacidad de PPCCN: «Ponerse las pilas cuando lo consideres necesario».