Atentados en Francia, Kuwait y Túnez del 26J: los islamistas esperaban una orden para atacar

Actualizado a las 16:43

Tres nuevos atentados islámicos han dejado nuevamente paralizados y desolados a medio mundo. Francia, Túnez y Kuwait han sido los lugares donde esta mañana y de forma casi simultánea el Estado Islámico ha vuelto a dejar presencia de su crueldad. A las 10.00 horas, tenía lugar el primero de ellos en la localidad francesa de Saint-Quentin-Fallavier, contra una empresa industrial de gas. Uno de los terroristas entró con una camioneta y la empotró contra las bombonas de gas. Una persona ha sido decapitada y dos están heridas. El terrorista, de unos 30 años, ha sido detenido y se llama Yassine Sali.

Minutos después, en Túnez, otra explosión ha vuelto a sacudir la ciudad de  Port El Kantaou. Varios islamistas entraban en dos hoteles y armados con Kalashnikov dispararon contra los turistas extranjeros allí alojados. Al menos 27 personas han muerto. Uno de los terroristas habría sido abatido mientras que otro de ellos sigue fugado. Uno de los hoteles pertenece a la cadena hotelera española Riu. Túnez está en situación de alerta desde el pasado marzo cuando se produjo el atentado yihadista en el museo de El Bardo, donde murieron 24 personas, en el peor de los ataques terroristas sufridos en el país en la última década.

Y al mismo tiempo que todo esto ocurría en Francia y Turquía, en la mezquita chií de Imam Sadiq, en Kuwait, un suicida ha hecho explotar un cinturón cargado de explosivos dejando 13 muertos y numerosos heridos, ocho en situación crítica. En el templo había alrededor de 2000 personas.

Yihadistas franceses esperaban una orden para atentar 

Hace dos semanas, el pasado 10 junio, The Objective avanzaba en su portada las intenciones reveladas por Al-Faranci, el yihadista que quemó su pasaporte francés en 2014 en un vídeo del Estado Islámico. Aseguraba ahora que estaban esperando una señal del ISIL para atacar Francia. «Yihadistas franceses esperan una orden del ISIL para atacar en Francia y las capitales europeas», rezaba el titular de la información. 

El terrorista francés Al-Faranci reaparecía a comienzos de mes en un video en el que mezclaba su historia –incluso sale con un bebé tratando de trasladar una imagen de normalidad en la vida dentro del Estado Islámico- con imágenes de Je Suis Charlie y los atentados de París. Con claridad, señalaba en el vídeo que estaba esperando una señal para atacar Francia, país que se encontraba en estado de alerta.

«¿Lo han detenido? ¡Es mi marido!»

Se fue a trabajar a las siete de la mañana. “¿Lo han detenido? Es mi marido. Llevaba una vida familiar normal. Se fue a trabajar. ¿Lo detuvieron? Somos musulmanes normales. Es Ramadán. Tenemos tres hijos y una vida familiar normal. (se echa a llorar) Me va a dar un infarto. ¿A quién puedo pedirle información sobre lo que está pasando? Tengo miedo de hacer nada”. Son las palabras entrecortadas y nerviosas de la esposa del principal sospechosos del atentado de Francia, Yassin Shali, en declaraciones en exclusiva a Europe1. 

Salhi es un transportista de 35 años y padre de tres hijos. Es el principal sospechoso de haber lanzado una furgoneta contra la fabrica de cilindros de gas Airproducts, en Saint-Quentin-Fallavier, en Isère, y de haber decapitado a un hombre y causado dos heridos leves. La víctima decapitada es el gerente de la empresa de mensajería a la que pertenece la furgoneta que conducía el terrorista. 

Según el ministerio de interior, Yassin Shali fue seguido por Inteligencia en 2006 por su radicalización y su “vinculación al movimiento salafista”, pero en 2008 se revocó su categorización como individuo potencialmente peligroso y se levantó su seguimiento. “No tenía antecedentes penales”, subraya el ministerio. Hay más detenidos que han podido participar en el atentado.

El clérigo islamista Choudary: «Lo único que me sorprende es que hayan tardado tanto después de los llamamiento del ISIL a atacar Francia»

Después de las polémicas declaraciones de esta semana del clérigo islamista británico Anjem Choudary en The Objective, hoy le hemos dado la oportunidad de condenar los salvajes atentados islamistas. Lejos de admitirlos y condenarlos, reacciona diciendo que solo le sorprende que hayan «tardado tanto» en llegar después de «los llamamientos del Estado Islámico a que Francia, entre otras, debe ser atacada». 

«Hay una guerra del régimen Americano», dice Choudary, «con la ayuda de Francia entre otros, contra el islam y los musulmanes. No es sólo una guerra militar en Siria e Irak, sino también ideológica, como se vio con las caricaturas de Charlie Hebdo».

El islamista, detenido en Londres en varias ocasiones por su militancia filoterrorista, afirma que a esto hay que sumarle el hecho de que el Estado Islámico «ha alentado activamente a ataques contra intereses franceses y su gente, en particular incluyendo los que participan en la guerra contra los musulmanes, el ataque de hoy en la fábrica Air Product no debería ser una sorpresa», «ya que es una compañía que probablemente fabrica artículos para los militares de Estados Unidos». 

Choudary cierra su soflama de declaraciones a este diario, exentas de condena alguna a lo ocurrido, culpando del atentado a la presencia de fuerzas francesas en los países musulmanes. «Solo hay una opción segura para los franceses y es respetar al Islam y a los musulmanes, abandonar las tierras musulmanas y detener los insultos al Mensajes Muhammad bajo la llamada «libertad». (declaraciones completas de Choydary a The Objective, en inglés)

La alerta terrorista se extiende por el mundo

Las autoridades no descartan posibles nuevos atentados en el día de hoy. España ha declinado por el momento elevar el nivel de alerta por los atentados en Francia, si bien el hecho de que el ataque de Túnez fuera contra un hotel español puede influir en la decisión que se tome en las próximas horas.