Cronología de los atentados de Bruselas: Duro golpe al corazón de Europa

El corazón de Europa se ha paralizado este martes 22 de marzo tras sufrir una cadena de atentados coordinados que han dejado al menos 30 muertos y más de 200 heridos, según el balance oficial. El terror se ha instalado en Bruselas a las ocho de la mañana cuando se ha producido una doble explosión en el área de salidas del aeropuerto de Bruselas-Zaventem (Bélgica). Tan sólo una hora y media después, a las 09.30 horas, otra nueva explosión ha sacudido la estación de metro Maelbeek, a escaso metros del complejo de instituciones europeas, cerca de la sede de la Comisión Europea, del Parlamento Europeo y del Consejo de la UE.

El terror se ha apoderado de nuevo de Europa cuatro meses después de los brutales atentados de París del 13 de noviembre, que dejaron 130 muertos. Los primeros minutos tras los atentados han sido apoderados por la confusión, las cifras desconcertantes y los datos sin oficializar.

Los primeros testimonios de los testigos de la tragedia daban cuenta del pánico que se vivían en los puntos claves de las explosiones. “Tengo la sensación de estar en una película o en un mal sueño», relataba una española a través de su twitter instantes después de producirse la doble explosión en el aeropuerto bruselense.

En este punto han fallecido al menos 14 personas. El fiscal general belga, Frédéric Van Leeuw, confirmó en una rueda de prensa que una de las dos explosiones acaecidas en el aeródromo fue por inmolación. «Hubo dos explosiones en la zona de salidas [del aeropuerto], una de ellas probablemente causada por un ataque suicida». Asimismo, alrededor de las 13.00 horas, durante la inspección de la zona del atentado en el aeropuerto la policía ha encontrado junto al terrorista que se ha inmolado un cinturón de explosivos sin detonar y un fusil de asalto AK47 ‘Kalashnikov’, el mismo usado por los yihadistas de los atentados del 13-N. Además, la agencia de noticias Belga también ha informado del hallazgo de “varias armas” en el complejo aeroportuario.

Cuando aún reinaba la confusión, varios testigos de las explosiones del aeropuerto han asegurado a medios belgas que segundos antes de las dos deflagraciones se han escuchado varios disparos en la terminal de salida y un grito «en árabe». El relato de varios testigos también coincide en señalar que las bombas del aeropuerto tenían clavos.

En cuanto a los atentados en el metro, la compañía de transporte público de Bruselas ha informado de que la explosión en el metro de Bruselas se registró en el interior de los vagones de un tren que se encontraba detenido en el andén.

Bélgica, blindada

Tras las múltiples explosiones las autoridades han decretado el nivel máximo de alerta antiterrorista, convirtiendo así al país en un auténtico fortín. Tras la explosión en el aeropuerto, se ha evacuado todo el aeropuerto y se ha restringido el tráfico aéreo. Los vuelos que estuvieran activos han sido derivados al aeropuerto de Charleroi.

También se ha blindado el tráfico por tierra. Carreteras y transporte público han sido tomados por las fuerzas de seguridad. Las redes de transporte público de la capital belga, incluidas las líneas de metro, autobús y tranvía, se han cerrado totalmente como medida de seguridad. Así como las estaciones de ferrocarril de Bruselas (central, norte y sur) y la del aeropuerto. Y también en Amberes, donde se ha desalojado la estación de trenes.

La frontera por carretera y tren entre Bélgica y Francia también ha sido clausurada.

El transporte que enlaza Bruselas con las principales capitales europeas también se ha visto alterado. Eurostar, operador ferroviario de Alta Velocidad que une Francia y Bélgica con Reino Unido a través del túnel bajo el Canal de la Mancha, ha suspendido el tráfico ferroviario desde Bruselas y Reino Unido en ambos sentidos.

El blindaje se debe no sólo a motivos de seguridad sino también para facilitar las labores de investigación de la policía belga, que pretende aclarar si podría haber cómplices de los terroristas que se hayan dado a la fuga.

Según medios egipcios, el Estado Islámico ha reivindicado los atentados. La agencia TASS informa que los terroristas no dan a conocer los detalles de los ataques perpetrados en la capital belga pero amenazan con nuevos atentados en Europa.

Cuatro días después de la detención de Abdeslam

Las explosiones en Bruselas se producen tan sólo cuatro días después de la detención del yihadista Salah Abdeslam, huido tras los atentados del 13 de noviembre en París, que provocaron 130 muertos.

Las autoridades manejaban la posibilidad de venganza tras la detención del cabecilla de los atentados de París. Las autoridades señalan que podría haber estado «preparando algo» en Bruselas tras el 13N.

Llama la atención que Bélgica no haya elevado el nivel de alerta máximo hasta el mismo día de los atentados después de la detención de Abdeslam. Antes de los atentados el país se encontraba en nivel 3, después de reducir el nivel máximo que se activó entre el 21 y el 25 de noviembre, tras los atentados de París. Ya entonces el primer ministro belga, Charles Michel, advirtió de la posibilidad de que Bruselas sufriera un atentado similar al de París.

España mantiene el nivel 4 de alerta antiterrorista

España mantiene de momento el nivel 4 sobre una escala de cinco categorías. Este nivel se adoptó en junio tras la oleada de atentados yihadistas en París, Túnez y Kuwait. Elevar la alerta hasta el nivel cinco, el máximo, significa que el Gobierno tiene información sobre «una amenaza concreta» y conlleva un despliegue total de medios: Ejército en las calles y espacio aéreo restringido.

Tras la reunión de la mesa de Evaluación de Amenaza Terrorista y el pacto antiyihadista, a la que acudieron todos los partidos firmantes y Podemos, que aunque no es firmante, ha ido como oyente, se ha tomado la decisión de mantener el nivel de alerta terrorista en 4. Aunque se reforzará la vigilancia en los aeropuertos.

El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha anunciado que hay cuatro personas de nacionalidad española con heridas que no revisten especial gravedad. El Gobierno español confirma además que no hay víctimas españolas entre los muertos.